Apro
Festivos y ocurrentes, convocados a través de redes sociales, más de 10 mil personas, en su mayoría estudiantes de distintas universidades capitalinas, marcharon del Zócalo al Ángel de la Independencia para expresar su repudio al candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto, a Televisa y a las encuestas, en este orden de críticas.
“¡Esta es la primavera mexicana!”, exclamaban los más cosmopolitas, mientras decenas saltaban sobre el Paseo de la Reforma gritando consignas como “¡El que no brinque es Peña!”, “¡Ni un voto al PRI!”, “Se ve, de lejos, Peña es un pendejo”, “No vine por mis tortas, vine por mis huevos”, “Televisa te idiotiza”, “¡Prensa vendida, Peña no va a arriba!”.
Los contingentes fueron diversos, multicolores y pluripartidistas. Predominaban los estudiantes de la UNAM, de la UAM, de la Iberoamericana, de decenas de escuelas preparatorias con carteles que recordaban el “viernes negro” de Enrique Peña Nieto durante su visita al recinto jesuita de Santa Fe.
Cientos de automovilistas, en los carriles liberados de la avenida Reforma, tocaron el claxon en apoyo a la manifestación, al tiempo que trabajadores de las torres de la principal arteria de la Ciudad de México salieron para saludar a la primera gran marcha en contra del candidato presidencial del PRI.
El fantasma de la represión de 1968 volvió a recorrer las calles capitalinas. Cientos de manifestantes expresaron su repudio a cualquier intento de represión. También la represión en Atenco, los feminicidios y hasta los casos de la niña Paulette y la sospechosa muerte de Mónica Pretelini, esposa de Peña Nieto, asomaron entre las expresiones de repudio al exgobernador mexiquense.
Las redes sociales se impusieron por encima del silencio televisivo y radiofónico. Convocada a través de cinco páginas de Facebook con la frase #MarchaAntiEPN (que en menos de una semana tuvo 6 mil 500 seguidores), Marcha Anti Peña Nieto o Marcha Contra Enrique Peña Nieto, los jóvenes de la generación digital salieron a las calles.
El repudio a las encuestas fue insistente. “¡Prensa vendida, Peña no va arriba!”, exclamaron los primeros contingentes de la marcha que salió a las 12:30 horas del Zócalo capitalino y arribó a la glorieta del Ángel de la Independencia a las 14:00 horas.
Jóvenes músicos cantaban coplas al ritmo del Querreque en contra del Copete, mientras otros danzaron, los Anonymous sacaron sus máscaras, y otros desfilaron con el rostro de Carlos Salinas, de Elba Esther Gordillo y hasta de Gabriel Quadri, los más repudiados de la marcha, después de Enrique Peña Nieto.
El logo de la empresa Televisa estuvo presente en varios de los cartelones que expresaron su repudio al monopolio televisivo. No se observaron ni cámaras de televisión ni unidades móviles para cubrir esta marcha.
Fue el primer gran triunfo de la convocatoria de las redes sociales por encima de las televisoras, de los medios impresos y de los propios partidos políticos, reflexionaban decenas de asistentes.
Festivos y ocurrentes, convocados a través de redes sociales, más de 10 mil personas, en su mayoría estudiantes de distintas universidades capitalinas, marcharon del Zócalo al Ángel de la Independencia para expresar su repudio al candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto, a Televisa y a las encuestas, en este orden de críticas.
“¡Esta es la primavera mexicana!”, exclamaban los más cosmopolitas, mientras decenas saltaban sobre el Paseo de la Reforma gritando consignas como “¡El que no brinque es Peña!”, “¡Ni un voto al PRI!”, “Se ve, de lejos, Peña es un pendejo”, “No vine por mis tortas, vine por mis huevos”, “Televisa te idiotiza”, “¡Prensa vendida, Peña no va a arriba!”.
Los contingentes fueron diversos, multicolores y pluripartidistas. Predominaban los estudiantes de la UNAM, de la UAM, de la Iberoamericana, de decenas de escuelas preparatorias con carteles que recordaban el “viernes negro” de Enrique Peña Nieto durante su visita al recinto jesuita de Santa Fe.
Cientos de automovilistas, en los carriles liberados de la avenida Reforma, tocaron el claxon en apoyo a la manifestación, al tiempo que trabajadores de las torres de la principal arteria de la Ciudad de México salieron para saludar a la primera gran marcha en contra del candidato presidencial del PRI.
El fantasma de la represión de 1968 volvió a recorrer las calles capitalinas. Cientos de manifestantes expresaron su repudio a cualquier intento de represión. También la represión en Atenco, los feminicidios y hasta los casos de la niña Paulette y la sospechosa muerte de Mónica Pretelini, esposa de Peña Nieto, asomaron entre las expresiones de repudio al exgobernador mexiquense.
Las redes sociales se impusieron por encima del silencio televisivo y radiofónico. Convocada a través de cinco páginas de Facebook con la frase #MarchaAntiEPN (que en menos de una semana tuvo 6 mil 500 seguidores), Marcha Anti Peña Nieto o Marcha Contra Enrique Peña Nieto, los jóvenes de la generación digital salieron a las calles.
El repudio a las encuestas fue insistente. “¡Prensa vendida, Peña no va arriba!”, exclamaron los primeros contingentes de la marcha que salió a las 12:30 horas del Zócalo capitalino y arribó a la glorieta del Ángel de la Independencia a las 14:00 horas.
Jóvenes músicos cantaban coplas al ritmo del Querreque en contra del Copete, mientras otros danzaron, los Anonymous sacaron sus máscaras, y otros desfilaron con el rostro de Carlos Salinas, de Elba Esther Gordillo y hasta de Gabriel Quadri, los más repudiados de la marcha, después de Enrique Peña Nieto.
El logo de la empresa Televisa estuvo presente en varios de los cartelones que expresaron su repudio al monopolio televisivo. No se observaron ni cámaras de televisión ni unidades móviles para cubrir esta marcha.
Fue el primer gran triunfo de la convocatoria de las redes sociales por encima de las televisoras, de los medios impresos y de los propios partidos políticos, reflexionaban decenas de asistentes.
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