Las lecciones de La Maestra

José Cárdenas

En solidaridad con Héctor Aguilar Camín

Hace seis años, en una emisión radiofónica convertida en palenque, Elba Esther Gordillo asestó uno de sus navajazos más contundentes.

–Nunca vas a ser presidente de la República, le auguró a Roberto Madrazo. Y recalcó:

–De mi cuenta corre… ¡y de su cuenta corrió!

Hoy Roberto Madrazo esta prácticamente borrado del mapa. Cuando mucho se le ve como alma en pena deambulando en asambleas del PRI o en informes de gobernadores. Todos lo saludan, lo procuran y le palmean la espalda… pero de eso a verlo de nuevo en posiciones de poder, nada. –¿Porque está maldito?

En contraste, La Maestra acumula fuerza y relevancia. Muchos ven su tiempo como la confusa luminosidad que precede al ocaso. Otros, como un ave fénix cuyas cenizas el viento no ha dispersado.

Por lo pronto, este Día del Maestro, Elba Esther probará su fortaleza con el tradicional juego de poder contra el gobierno federal con motivo de las revisiones salariales y asuntos paralelos… pero en esta ocasión con un ingrediente nunca antes visto: detener a la candidata del PAN, con quien tiene jurado un pleito, merced a una supuesta alianza con Enrique Peña Nieto.

La Maestra Gordillo tiene por fin al presidente Calderón donde los aromas del desquite siempre le recomendaron: contra la pared.

Los que han querido ver en los hechos recientes una irremediable pérdida del poder por parte de esta dama de hierro. O han visto mal o no han mirado el panorama completo.

La incursión de Elba Esther en la campaña presidencial con Gabriel Quadri es cualquier cosa menos un desperdicio de recursos o de tiempo. Un candidato cuya verborrea y una Combi dizque desvencijada lo han hecho crecer más de 400% en poco tiempo, es un elemento altamente rentable si se considera —como lo hacen algunos economistas— el binomio costo-beneficio.

Por muy desechable que parezca, y antes de ir a dar al cesto de la basura, Quadri resulta muy útil para otorgarle certeza de conservación del registro al Panal… favorecer a Enrique Peña Nieto para hundir más a Josefina… y sobre todo para criticar el pobre desempeño de la candidata panista cuando estuvo al frente de la Secretaría de Educación y se adjudicó el mérito de la Alianza por la Educación, las evaluaciones y los concursos magisteriales… argumentos con los cuales quiso sostener parte de su campaña presidencial.

No terminaban de pasar sus primeros spots cuando Elba Esther, como Salomé al Bautista, le entregó en una charola de plata la cabeza de la evaluación universal a los adversarios de Josefina.

La evaluación se hará cuando y como le convenga a La Maestra… y al sindicato.

Hoy es 15 de mayo. El doctor José Ángel Córdova se dispone a beber el purgante de una negociación perdida de antemano… Ya vio cómo fracasó el plan de evaluación del magisterio en el plazo convenido… y ahora sentirá en carne propia los rigores de una operación sin anestesia.

MONJE LOCO: La marcha antiPeña Nieto sube como la espuma. Las redes sociales la convocan para el sábado a mediodía en el Zócalo. Andrés Manuel ya se deslindó: “Es un asunto de ciudadanos”, dice. ¿De veras? Lo cierto es que si sumamos los 26 puntos del tabasqueño y los 25 de Josefina, juntos rebasan los 45 de Peña. Son más los que no quieren al PRI de regreso a Los Pinos.

Comentarios