Mauricio Torres / CNN
Festejaron con cantos, aplausos, gritos de “¡México, México!”, “¡Sí se pudo, sí se pudo!” y su distintivo “¡Yo soy 132, yo soy 132!”.
Tras más de dos horas de negociación, unos 300 jóvenes del movimiento — según cifras de la policía local — logró que las autoridades federales retiraran las vallas metálicas en torno a la Secretaría de Gobernación (Segob) y les permitieran caminar a la dependencia para entregar su petición de que el próximo debate presidencial sea transmitido en cadena nacional.
“¡No somos porros, somos estudiantes!”, gritaron alumnos de instituciones públicas y privadas detrás de la barrera que impedía su paso y era vigilada por unos 70 policías federales, a los que pedían solidaridad.
“¡Queremos dialogar!”, exclamaban algunos. “¡No somos violentos!”, decían otros más.
Los jóvenes llegaron a la Segob poco después de las 15:00 horas (local) luego de caminar algunas calles desde Televisa Chapultepec, una de las sedes de la cadena más importante del país y a la que el movimiento #YoSoy132 acusa de ser parcial en su cobertura informativa y, con ello, afectar la democracia del país.
También la critican por supuestamente apoyar al candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto y producir “contenidos basura”.
Con mantas y pancartas caminaron por el centro de la capital mexicana hasta las inmediaciones de Gobernación, donde planeaban realizar un mitin.
Molestos por la colocación de las vallas, empezaron a gritar para exigir el paso. Del otro lado de la barrera, también bajo la mirada de la Policía Federal, integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se sumaban a su causa.
“¡Estudiante, escucha, el SME está en tu lucha!”, gritaban los sindicalistas.
Según personal de Gobernación, la barrera se instaló para prevenir que los miembros del SME se unieran a la otra manifestación y causaran actos violentos.
Mientras un grupo pequeño de jóvenes exigía tomar medidas e intentaba mover las vallas —lo que era reprendido por el resto con gritos de “¡No violencia!”—, otro sector intentaba negociar con las autoridades de Gobernación.
Circe Camacho, integrante de la coordinadora interuniversitaria de #YoSoy132, informaba en un altavoz que los funcionarios planteaban que los estudiantes formaran una comisión que entrara a la secretaría, lo que fue rechazado por sus compañeros.
Poco después, Carlos Brito, vocero de la coordinadora, indicaba que se había acordado que, a las 16:00 horas, los jóvenes leyeran el documento que entregarían a la Segob y después personal de la dependencia lo recogiera.
Dio la hora y una estudiante leyó la carta, que exige a la Segob ordenar la transmisión del debate presidencial en cadena nacional, por tratarse de “información de trascendencia para la nación”. El encuentro entre candidatos está programado para el 10 de junio, 21 días antes de las elecciones.
Luis Carlos Migliavacca, director de Atención Ciudadana y Concertación Política, llegó entonces a la valla, dijo desconocer el acuerdo de recoger el documento y planteó de nuevo la propuesta de que los alumnos formaran una comisión que entrara a Gobernación.
Ante el nuevo rechazo de los estudiantes —y tras otros momentos de negociación—, las autoridades accedieron a quitar las barreras y dejarlos pasar hasta la entrada de la dependencia para entregar el texto.
Entre gritos de “¡No violencia!” y con los brazos entrelazados para formar una cadena, los jóvenes caminaron hasta la puerta de la secretaría, donde los recibió el subsecretario de Gobierno, Obdulio Ávila.
“Soy respetuoso del movimiento que encabezan”, dijo Ávila frente a los alumnos, ante quienes se comprometió a entregar el documento al secretario de Gobernación, Alejandro Poiré y a garantizarles su derecho a manifestarse.
Junto con el texto, el funcionario recibió una flor blanca. Desde los costados, algunos estudiantes exigieron a gritos que fijara una fecha para responder a la solicitud, aunque el subsecretario se retiró sin hacerlo.
Concluida la entrega, los jóvenes volvieron a tomarse de los brazos para regresar en cadena humana hasta Televisa Chapultepec.
El sonido que acompañó sus pasos fue el de la celebración de una de las primeras victorias del movimiento, formado hace dos semanas en demanda de la democratización de los medios de comunicación y comicios transparentes.
“¡Sí se pudo, sí se pudo!”, gritaron. “¡Yo soy 132, yo soy 132!”, exclamaron.
Festejaron con cantos, aplausos, gritos de “¡México, México!”, “¡Sí se pudo, sí se pudo!” y su distintivo “¡Yo soy 132, yo soy 132!”.
Tras más de dos horas de negociación, unos 300 jóvenes del movimiento — según cifras de la policía local — logró que las autoridades federales retiraran las vallas metálicas en torno a la Secretaría de Gobernación (Segob) y les permitieran caminar a la dependencia para entregar su petición de que el próximo debate presidencial sea transmitido en cadena nacional.
“¡No somos porros, somos estudiantes!”, gritaron alumnos de instituciones públicas y privadas detrás de la barrera que impedía su paso y era vigilada por unos 70 policías federales, a los que pedían solidaridad.
“¡Queremos dialogar!”, exclamaban algunos. “¡No somos violentos!”, decían otros más.
Los jóvenes llegaron a la Segob poco después de las 15:00 horas (local) luego de caminar algunas calles desde Televisa Chapultepec, una de las sedes de la cadena más importante del país y a la que el movimiento #YoSoy132 acusa de ser parcial en su cobertura informativa y, con ello, afectar la democracia del país.
También la critican por supuestamente apoyar al candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto y producir “contenidos basura”.
Con mantas y pancartas caminaron por el centro de la capital mexicana hasta las inmediaciones de Gobernación, donde planeaban realizar un mitin.
Molestos por la colocación de las vallas, empezaron a gritar para exigir el paso. Del otro lado de la barrera, también bajo la mirada de la Policía Federal, integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se sumaban a su causa.
“¡Estudiante, escucha, el SME está en tu lucha!”, gritaban los sindicalistas.
Según personal de Gobernación, la barrera se instaló para prevenir que los miembros del SME se unieran a la otra manifestación y causaran actos violentos.
Mientras un grupo pequeño de jóvenes exigía tomar medidas e intentaba mover las vallas —lo que era reprendido por el resto con gritos de “¡No violencia!”—, otro sector intentaba negociar con las autoridades de Gobernación.
Circe Camacho, integrante de la coordinadora interuniversitaria de #YoSoy132, informaba en un altavoz que los funcionarios planteaban que los estudiantes formaran una comisión que entrara a la secretaría, lo que fue rechazado por sus compañeros.
Poco después, Carlos Brito, vocero de la coordinadora, indicaba que se había acordado que, a las 16:00 horas, los jóvenes leyeran el documento que entregarían a la Segob y después personal de la dependencia lo recogiera.
Dio la hora y una estudiante leyó la carta, que exige a la Segob ordenar la transmisión del debate presidencial en cadena nacional, por tratarse de “información de trascendencia para la nación”. El encuentro entre candidatos está programado para el 10 de junio, 21 días antes de las elecciones.
Luis Carlos Migliavacca, director de Atención Ciudadana y Concertación Política, llegó entonces a la valla, dijo desconocer el acuerdo de recoger el documento y planteó de nuevo la propuesta de que los alumnos formaran una comisión que entrara a Gobernación.
Ante el nuevo rechazo de los estudiantes —y tras otros momentos de negociación—, las autoridades accedieron a quitar las barreras y dejarlos pasar hasta la entrada de la dependencia para entregar el texto.
Entre gritos de “¡No violencia!” y con los brazos entrelazados para formar una cadena, los jóvenes caminaron hasta la puerta de la secretaría, donde los recibió el subsecretario de Gobierno, Obdulio Ávila.
“Soy respetuoso del movimiento que encabezan”, dijo Ávila frente a los alumnos, ante quienes se comprometió a entregar el documento al secretario de Gobernación, Alejandro Poiré y a garantizarles su derecho a manifestarse.
Junto con el texto, el funcionario recibió una flor blanca. Desde los costados, algunos estudiantes exigieron a gritos que fijara una fecha para responder a la solicitud, aunque el subsecretario se retiró sin hacerlo.
Concluida la entrega, los jóvenes volvieron a tomarse de los brazos para regresar en cadena humana hasta Televisa Chapultepec.
El sonido que acompañó sus pasos fue el de la celebración de una de las primeras victorias del movimiento, formado hace dos semanas en demanda de la democratización de los medios de comunicación y comicios transparentes.
“¡Sí se pudo, sí se pudo!”, gritaron. “¡Yo soy 132, yo soy 132!”, exclamaron.
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