Salvador García Soto
Prueba fehaciente de lo efímeras y cambiantes que pueden ser las encuestas -en tanto fotos de un momento específico- es que la disputa final en la contienda presidencial puede terminar siendo entre dos, pero no entre los dos que hasta ahora se creía, que eran Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota, sino entre el priista aún puntero en la carrera y el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien para algunos sondeos ya logró rebasar a la candidata del PAN que estaría siendo desplazada al tercer lugar en las encuestas.
Los análisis en los cuarteles de campaña, especialmente el del PRI, empiezan a manejar la posibilidad de que en las próximas semanas la disputa presidencial tienda a cerrarse y se reduzca la abultada ventaja que hasta ahora mantiene su candidato en los sondeos a unos 15 puntos sobre el segundo lugar; pero en crecimiento, los priistas ya no ven a la panista Vázquez Mota, sino al candidato del llamado Movimiento Progresistas, López Obrador, quien creen terminará por pasar al PAN y se acercará a Peña.
Al PRI le conviene, y siempre le ha convenido, que la pelea sea con la izquierda y no con la derecha panista, con la que suele polarizarse más y eso hace que el blanquiazul capte mucho más voto antipriista. Se sienten más cómodos enfrentándose a López Obrador, que aunque también tiene un discurso anti-PRI, sus votantes son menos recalcitrantes en contra del viejo partido.
La incógnita es, si llegara a producirse un escenario como el de una pelea entre Peña Nieto y López Obrador, con una Vázquez Mota desplazada a un lejano tercer lugar, ¿cómo van a actuar los panistas, sobre todo los más duros que se resisten a cualquier posibilidad de perder el poder tras doce años en la Presidencia? ¿buscarían endurecer aún más las campañas de ataques contra Peña? ¿irían también contra Andrés Manuel para evitar que los mande al tercer sitio o buscarían un pacto con el candidato de las izquierdas para crear un bloque antipriista y eventualmente un gobierno de coalición?
Esta última opción, el de una alianza entre el PAN y López Obrador, aunque parece lejana, ya se escucha en algunos círculos del panismo, donde lo plantean como “el último recurso para tratar de evitar el regreso del PRI a Los Pinos”. Si bien no hay ninguna coincidencia ni ideológica ni programática entre Vázquez Mota y Andrés Manuel, sería una de las salidas desesperadas que podrían tomar en el panismo si su candidata es desplazada al tercer lugar.
La otra salida que tendría el PAN es enrarecer el ambiente electoral con más campañas sucias en las que pueden hurgar en vidas privadas y temas personales de Peña, sin dejar de seguir cuestionando la credibilidad de sus compromisos.
La pregunta en ese escenario es si Josefina y los panistas irían solos a esa guerra en la que se jugarían el todo por el todo o si los va a acompañar el presidente Felipe Calderón, que hoy parece más interesado en poner tierra de por medio de la campaña de Vázquez Mota y seguir sus giras de despedida por el extranjero ¿Va Calderón a apostar todo su resto por la candidata de su partido o sin dejar de apoyarla se hará discretamente a un lado, argumentando sus múltiples compromisos externos y la dejará que se hunda?
NOTAS INDISCRETAS… Por decisión de Radio Fórmula que terminó en una recisión de contrato de mutuo acuerdo, La Chuleta dejó ayer de transmitirse por el 104.1 de FM y 1500 de AM de ese grupo radiofónico. Gracias infinitas a los directivos y personas que nos apoyaron estos cuatro años en esa casa; y gracias sobre todo al público que ayer reaccionó ante nuestra repentina ausencia. A ellos una disculpa por no haber podido despedirnos al aire, pero esperamos pronto estar de nuevo persiguiendo La Chuleta en otras nuevas frecuencias. La Chuleta seguirá y también su labor de informar, cuestionar y divertir… Escalera doble. Los dados andan de vena.
Prueba fehaciente de lo efímeras y cambiantes que pueden ser las encuestas -en tanto fotos de un momento específico- es que la disputa final en la contienda presidencial puede terminar siendo entre dos, pero no entre los dos que hasta ahora se creía, que eran Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota, sino entre el priista aún puntero en la carrera y el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien para algunos sondeos ya logró rebasar a la candidata del PAN que estaría siendo desplazada al tercer lugar en las encuestas.
Los análisis en los cuarteles de campaña, especialmente el del PRI, empiezan a manejar la posibilidad de que en las próximas semanas la disputa presidencial tienda a cerrarse y se reduzca la abultada ventaja que hasta ahora mantiene su candidato en los sondeos a unos 15 puntos sobre el segundo lugar; pero en crecimiento, los priistas ya no ven a la panista Vázquez Mota, sino al candidato del llamado Movimiento Progresistas, López Obrador, quien creen terminará por pasar al PAN y se acercará a Peña.
Al PRI le conviene, y siempre le ha convenido, que la pelea sea con la izquierda y no con la derecha panista, con la que suele polarizarse más y eso hace que el blanquiazul capte mucho más voto antipriista. Se sienten más cómodos enfrentándose a López Obrador, que aunque también tiene un discurso anti-PRI, sus votantes son menos recalcitrantes en contra del viejo partido.
La incógnita es, si llegara a producirse un escenario como el de una pelea entre Peña Nieto y López Obrador, con una Vázquez Mota desplazada a un lejano tercer lugar, ¿cómo van a actuar los panistas, sobre todo los más duros que se resisten a cualquier posibilidad de perder el poder tras doce años en la Presidencia? ¿buscarían endurecer aún más las campañas de ataques contra Peña? ¿irían también contra Andrés Manuel para evitar que los mande al tercer sitio o buscarían un pacto con el candidato de las izquierdas para crear un bloque antipriista y eventualmente un gobierno de coalición?
Esta última opción, el de una alianza entre el PAN y López Obrador, aunque parece lejana, ya se escucha en algunos círculos del panismo, donde lo plantean como “el último recurso para tratar de evitar el regreso del PRI a Los Pinos”. Si bien no hay ninguna coincidencia ni ideológica ni programática entre Vázquez Mota y Andrés Manuel, sería una de las salidas desesperadas que podrían tomar en el panismo si su candidata es desplazada al tercer lugar.
La otra salida que tendría el PAN es enrarecer el ambiente electoral con más campañas sucias en las que pueden hurgar en vidas privadas y temas personales de Peña, sin dejar de seguir cuestionando la credibilidad de sus compromisos.
La pregunta en ese escenario es si Josefina y los panistas irían solos a esa guerra en la que se jugarían el todo por el todo o si los va a acompañar el presidente Felipe Calderón, que hoy parece más interesado en poner tierra de por medio de la campaña de Vázquez Mota y seguir sus giras de despedida por el extranjero ¿Va Calderón a apostar todo su resto por la candidata de su partido o sin dejar de apoyarla se hará discretamente a un lado, argumentando sus múltiples compromisos externos y la dejará que se hunda?
NOTAS INDISCRETAS… Por decisión de Radio Fórmula que terminó en una recisión de contrato de mutuo acuerdo, La Chuleta dejó ayer de transmitirse por el 104.1 de FM y 1500 de AM de ese grupo radiofónico. Gracias infinitas a los directivos y personas que nos apoyaron estos cuatro años en esa casa; y gracias sobre todo al público que ayer reaccionó ante nuestra repentina ausencia. A ellos una disculpa por no haber podido despedirnos al aire, pero esperamos pronto estar de nuevo persiguiendo La Chuleta en otras nuevas frecuencias. La Chuleta seguirá y también su labor de informar, cuestionar y divertir… Escalera doble. Los dados andan de vena.
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