Francisco Garfias
En las redes sociales circulan invitaciones para acudir al mitin de Andrés Manuel López Obrador en la UNAM, pero autoridades universitarias nos dicen que podemos dar por hecho que el candidato del Movimiento Progresista no va a esa casa de estudios.
La prudencia así lo aconseja. Ciudad Universitaria es terreno minado para ir a hacer campaña. Así se trate del mismísimo Andrés Manuel. Ya no se diga Enrique Peña o Josefina Vázquez Mota.
Le preguntamos a César Yáñez, vocero del Peje, si oficialmente el acto está cancelado. “No está descartado. Aún no tenemos fecha”, respondió.
Andrés Manuel ha estado en la UNAM, bastión de la izquierda estudiantil en México, en varias ocasiones. Dos de las últimas. En agosto de 2010 llegó hasta el auditorio Narciso Bassols, de la Facultad de Economía, a presentar su libro La mafia que se adueñó de México. No le fue mal. Le aplaudieron
En marzo del año pasado, a poco de iniciar la campaña para la gubernatura del Estado de México, volvió al campus universitario. Esta vez al auditorio Ricardo Flores Magón de la facultad de Ciencias Políticas.
El tabasqueño fue recibido con pintas de rechazo en bardas del circuito de CU. Una de ellas le exigía “deja de hacer campaña en la facultad”, otra más: “La UNAM pide licencia de los partidos. Fuera PRI, PAN, PRD y PT”.
Las crónicas de ese tiempo relatan que estudiantes, pancartas en mano, le preguntaban al Peje que dónde había quedado el promotor de las consultas públicas. Fueron los tiempos en que se rechazó realizar este ejercicio de participación ciudadana pprque el PAN y el PRD iban a una alianza electoral en la entidad más poblada del país.
A fin de no convertir el campus de CU en arena electoral, las autoridades universitarias ofrecieron otro foro a los cuatro candidatos: TV UNAM. Cada uno de los cuatro aspirantes es o será entrevistado en el programa Observatorio 2012, conducido por Ciro Murayama.
Tabasco es el estado con el más alto índice de evangélicos en todo el país. Una cuarta parte de la población. Es decir, de un total de dos millones 300 mil habitantes, 600 mil están afiliados a una iglesia evangélica. Este porcentaje no es nada despreciable para los candidatos que buscan un cargo federal o local en las elecciones del 1 de julio. Arturo Núñez, candidato de las izquierdas al gobierno de Tabasco, sabe de la importancia de los que profesan esta religión. El martes próximo se reúne con la cúpula evangélica de su estado.
El mismísimo Andrés Manuel López Obrador se ha declarado cristiano. Hace poco vimos un video con escenas de una ceremonia donde era bendecido el candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista.
El que nomás no da golpe con ellos es el candidato del tricolor al gobierno de ese estado, Jesús Alí de la Torre. Ni los voltea a ver. Lo comentan en el equipo de la coalición PRI-Verde. Saben que ese desdén provoca rechazo y empuja a los evangélicos hacia Arturo Núñez, abanderado de la coalición PRD-PT- Movimiento Ciudadano.
A este rechazo súmele la antipatía del gobernador Andrés Granier a la candidatura de Alí. Su gallo era otro. Pero también el descontento en los grupos priistas que encabezan Luis Felipe Graham, candidato a la alcaldía de Centro, y los de Humberto Mayans, candidato al Senado. Núñez, pues, tiene la mesa puesta.
Muy poco hemos escuchado sobre las propuestas de los candidatos presidenciales en materia de política exterior. ¿Que hacer para que México recupere el liderazgo regional que tenía? ¿Cómo equilibrar la relación con Estados Unidos? ¿Qué hacer para que los cubanos olviden el “comes y te vas”?
En el equipo de Vázquez Mota nos mandaron las conclusiones de la reunión que la candidata del PAN tuvo esta semana con un grupo de especialistas en la materia, a fin de recabar opiniones sobre una plataforma de política exterior “amplia, apartidista, incluyente”.
Al encuentro, coordinado por el ex subsecretario de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe, Rubén Beltrán, asistieron, entre otros, Andrés Rozental, Jorge Chabat, Carlos Heredia, Cecilia Soto, Olga Pellicer y Rafael Fernández de Castro.
Las conclusiones: hace falta una política exterior que permita retomar prioridades como una agenda amplia con Estados Unidos que vaya más allá del tema de la seguridad, con acento en oportunidades económicas y retome la agenda migratoria. Urge también reforzar la estrategia para estrechar vínculos con el resto de América Latina. “Hay que poner acento en la cooperación y la promoción de la cultura, crear institutos como el Cervantes Español”, puntualizó Beltrán.
Moraleja de la semana (cortesía de Enrique Jardiel, escritor español). Los políticos son como los cines de barrio, primero te hacen entrar y después te cambian el programa.
En las redes sociales circulan invitaciones para acudir al mitin de Andrés Manuel López Obrador en la UNAM, pero autoridades universitarias nos dicen que podemos dar por hecho que el candidato del Movimiento Progresista no va a esa casa de estudios.
La prudencia así lo aconseja. Ciudad Universitaria es terreno minado para ir a hacer campaña. Así se trate del mismísimo Andrés Manuel. Ya no se diga Enrique Peña o Josefina Vázquez Mota.
Le preguntamos a César Yáñez, vocero del Peje, si oficialmente el acto está cancelado. “No está descartado. Aún no tenemos fecha”, respondió.
Andrés Manuel ha estado en la UNAM, bastión de la izquierda estudiantil en México, en varias ocasiones. Dos de las últimas. En agosto de 2010 llegó hasta el auditorio Narciso Bassols, de la Facultad de Economía, a presentar su libro La mafia que se adueñó de México. No le fue mal. Le aplaudieron
En marzo del año pasado, a poco de iniciar la campaña para la gubernatura del Estado de México, volvió al campus universitario. Esta vez al auditorio Ricardo Flores Magón de la facultad de Ciencias Políticas.
El tabasqueño fue recibido con pintas de rechazo en bardas del circuito de CU. Una de ellas le exigía “deja de hacer campaña en la facultad”, otra más: “La UNAM pide licencia de los partidos. Fuera PRI, PAN, PRD y PT”.
Las crónicas de ese tiempo relatan que estudiantes, pancartas en mano, le preguntaban al Peje que dónde había quedado el promotor de las consultas públicas. Fueron los tiempos en que se rechazó realizar este ejercicio de participación ciudadana pprque el PAN y el PRD iban a una alianza electoral en la entidad más poblada del país.
A fin de no convertir el campus de CU en arena electoral, las autoridades universitarias ofrecieron otro foro a los cuatro candidatos: TV UNAM. Cada uno de los cuatro aspirantes es o será entrevistado en el programa Observatorio 2012, conducido por Ciro Murayama.
Tabasco es el estado con el más alto índice de evangélicos en todo el país. Una cuarta parte de la población. Es decir, de un total de dos millones 300 mil habitantes, 600 mil están afiliados a una iglesia evangélica. Este porcentaje no es nada despreciable para los candidatos que buscan un cargo federal o local en las elecciones del 1 de julio. Arturo Núñez, candidato de las izquierdas al gobierno de Tabasco, sabe de la importancia de los que profesan esta religión. El martes próximo se reúne con la cúpula evangélica de su estado.
El mismísimo Andrés Manuel López Obrador se ha declarado cristiano. Hace poco vimos un video con escenas de una ceremonia donde era bendecido el candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista.
El que nomás no da golpe con ellos es el candidato del tricolor al gobierno de ese estado, Jesús Alí de la Torre. Ni los voltea a ver. Lo comentan en el equipo de la coalición PRI-Verde. Saben que ese desdén provoca rechazo y empuja a los evangélicos hacia Arturo Núñez, abanderado de la coalición PRD-PT- Movimiento Ciudadano.
A este rechazo súmele la antipatía del gobernador Andrés Granier a la candidatura de Alí. Su gallo era otro. Pero también el descontento en los grupos priistas que encabezan Luis Felipe Graham, candidato a la alcaldía de Centro, y los de Humberto Mayans, candidato al Senado. Núñez, pues, tiene la mesa puesta.
Muy poco hemos escuchado sobre las propuestas de los candidatos presidenciales en materia de política exterior. ¿Que hacer para que México recupere el liderazgo regional que tenía? ¿Cómo equilibrar la relación con Estados Unidos? ¿Qué hacer para que los cubanos olviden el “comes y te vas”?
En el equipo de Vázquez Mota nos mandaron las conclusiones de la reunión que la candidata del PAN tuvo esta semana con un grupo de especialistas en la materia, a fin de recabar opiniones sobre una plataforma de política exterior “amplia, apartidista, incluyente”.
Al encuentro, coordinado por el ex subsecretario de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe, Rubén Beltrán, asistieron, entre otros, Andrés Rozental, Jorge Chabat, Carlos Heredia, Cecilia Soto, Olga Pellicer y Rafael Fernández de Castro.
Las conclusiones: hace falta una política exterior que permita retomar prioridades como una agenda amplia con Estados Unidos que vaya más allá del tema de la seguridad, con acento en oportunidades económicas y retome la agenda migratoria. Urge también reforzar la estrategia para estrechar vínculos con el resto de América Latina. “Hay que poner acento en la cooperación y la promoción de la cultura, crear institutos como el Cervantes Español”, puntualizó Beltrán.
Moraleja de la semana (cortesía de Enrique Jardiel, escritor español). Los políticos son como los cines de barrio, primero te hacen entrar y después te cambian el programa.
Comentarios