Salvador García Soto
Es curioso, pero ahora que Josefina Vázquez Mota está sometida a fuertes presiones y que dentro y fuera del PAN se cuestiona la debilidad, física y política de la candidata, el único que ha salido a defenderla públicamente no es el dirigente del PAN, tampoco el presidente Calderón, mucho menos sus correligionarios del blanquiazul; el único caballero que dio la cara y pidió comprensión para Vázquez Mota fue Andrés Manuel López Obrador.
Ayer en varias declaraciones y entrevistas al candidato de las izquierdas se le escuchó defender a su contrincanta, la candidata del PAN, ante los cuestionamientos sobre su salud o la fortaleza de su campaña. ¨Yo la entiendo, a cualquiera le puede pasar eso, no es para criticarla ni para atacarla¨, dijo López Obrador, quien le disputa, según las últimas encuestas el segundo lugar en la contienda presidencial a Josefina.
Pero que hay detrás de esa marcada defensa y de ese arropamiento de Andrés Manuel a su rival en campaña, ¿es sólo un gesto de caballerosidad? o ¿acaso es parte de la filosofía de la ¨República amorosa¨ y de la reconociliación y el perdón?
La verdad es que son puros calculos prácticos de Andrés Manuel López Obrador, pragmatismo puro el que lo lleva a emprender la defensa de Vázquez Mota que no hacen ni siquiera los propios panistas. Si Josefina se llega a debilitar y pierde terreno en esta contienda, sus potenciales voantes, y está medido en estudios recientes de varias casas encuestadoras, no se irían a votar por el PRD sino que votarían por el PRI y por Enrique Peña Nieto.
Es decir, en la medida que Josefina pierda votos quien lograría captarlos sería Peña Nieto con lo que se ampliaría aún más la ventaja del candidato priista que ya de por sí, en estos momentos según los sondeos, parece inalcanzable para la propia Vázquez Mota y para López Obador. Por eso el perredista no quiere que la abanderada del PAN se debilite, no le conviene a él porque quien gana con ese debilitamiento es el PRI y no las izquierdas.
Algo similar ocurría hace algunas semanas cuando el PRI buscaba encarecidamente darle oxigeno a López Obrador y evitar que el candidato de las izquierdas se quedara demasiado atrás en la contienda. A Peña y a los priistas no les convenía que la elección se cerrara solo entre dos, con el PAN, por que la polarización no favorece el voto priista, y preferian una elección tripartita porque de esa manera el voto antiPRI se fragmenta en lugar de concentrarse en un solo candidato.
Así que esa es la lógica detrás de la caballerosa defensa que hace López Obrador de Josefina Vázquez Mota; el candidato de las izquierdas prefiere a una contrincante a la que pueda pasar en algún momento, a una que se desinfle y su caída solo ayude a fortalecer al PRI. Por cierto que si alguien llega a pensar en una posible alianza de facto entre el PAN y el PRD, es decir ver AMLO o a Josefina declinando a favor del otro, la posibilidad es inexistente, además de que matemáticamente cada vez se ve más complicado que, aún juntos, los abanderados de la izquierda y la derecha dieran alcance al priista. Al menos eso es lo que se ve en la fotografía de este momento.
NOTAS INDISCRETAS…Esposas, hermanas, hijas, de todo echaron mano los priistas para poder completar la cuota de género que les exigió el IFE. Ycada gobernador tuvo que sacrificar a varios candidatos varones, algunos muy cercanos a ellos, porque así se los pidió Peña Nieto. La pregunta es si después no va a hacer la cochinada de pedirle a las esposas e hijas que se conviertan en ¨Juanitas¨y pidan licencia para dar paso a los señores sacificados. Eso sería una suciedad…Los dados cierran semana con Escalera. Se guardan en el cajón y vuelven a girar el lunes 9 de abril. Hasta entonces!
Es curioso, pero ahora que Josefina Vázquez Mota está sometida a fuertes presiones y que dentro y fuera del PAN se cuestiona la debilidad, física y política de la candidata, el único que ha salido a defenderla públicamente no es el dirigente del PAN, tampoco el presidente Calderón, mucho menos sus correligionarios del blanquiazul; el único caballero que dio la cara y pidió comprensión para Vázquez Mota fue Andrés Manuel López Obrador.
Ayer en varias declaraciones y entrevistas al candidato de las izquierdas se le escuchó defender a su contrincanta, la candidata del PAN, ante los cuestionamientos sobre su salud o la fortaleza de su campaña. ¨Yo la entiendo, a cualquiera le puede pasar eso, no es para criticarla ni para atacarla¨, dijo López Obrador, quien le disputa, según las últimas encuestas el segundo lugar en la contienda presidencial a Josefina.
Pero que hay detrás de esa marcada defensa y de ese arropamiento de Andrés Manuel a su rival en campaña, ¿es sólo un gesto de caballerosidad? o ¿acaso es parte de la filosofía de la ¨República amorosa¨ y de la reconociliación y el perdón?
La verdad es que son puros calculos prácticos de Andrés Manuel López Obrador, pragmatismo puro el que lo lleva a emprender la defensa de Vázquez Mota que no hacen ni siquiera los propios panistas. Si Josefina se llega a debilitar y pierde terreno en esta contienda, sus potenciales voantes, y está medido en estudios recientes de varias casas encuestadoras, no se irían a votar por el PRD sino que votarían por el PRI y por Enrique Peña Nieto.
Es decir, en la medida que Josefina pierda votos quien lograría captarlos sería Peña Nieto con lo que se ampliaría aún más la ventaja del candidato priista que ya de por sí, en estos momentos según los sondeos, parece inalcanzable para la propia Vázquez Mota y para López Obador. Por eso el perredista no quiere que la abanderada del PAN se debilite, no le conviene a él porque quien gana con ese debilitamiento es el PRI y no las izquierdas.
Algo similar ocurría hace algunas semanas cuando el PRI buscaba encarecidamente darle oxigeno a López Obrador y evitar que el candidato de las izquierdas se quedara demasiado atrás en la contienda. A Peña y a los priistas no les convenía que la elección se cerrara solo entre dos, con el PAN, por que la polarización no favorece el voto priista, y preferian una elección tripartita porque de esa manera el voto antiPRI se fragmenta en lugar de concentrarse en un solo candidato.
Así que esa es la lógica detrás de la caballerosa defensa que hace López Obrador de Josefina Vázquez Mota; el candidato de las izquierdas prefiere a una contrincante a la que pueda pasar en algún momento, a una que se desinfle y su caída solo ayude a fortalecer al PRI. Por cierto que si alguien llega a pensar en una posible alianza de facto entre el PAN y el PRD, es decir ver AMLO o a Josefina declinando a favor del otro, la posibilidad es inexistente, además de que matemáticamente cada vez se ve más complicado que, aún juntos, los abanderados de la izquierda y la derecha dieran alcance al priista. Al menos eso es lo que se ve en la fotografía de este momento.
NOTAS INDISCRETAS…Esposas, hermanas, hijas, de todo echaron mano los priistas para poder completar la cuota de género que les exigió el IFE. Ycada gobernador tuvo que sacrificar a varios candidatos varones, algunos muy cercanos a ellos, porque así se los pidió Peña Nieto. La pregunta es si después no va a hacer la cochinada de pedirle a las esposas e hijas que se conviertan en ¨Juanitas¨y pidan licencia para dar paso a los señores sacificados. Eso sería una suciedad…Los dados cierran semana con Escalera. Se guardan en el cajón y vuelven a girar el lunes 9 de abril. Hasta entonces!
Comentarios