Apro
Un día después de que la Policía Federal detuvo a 11 personas presuntamente ligadas con Los Caballeros Templarios, el grupo criminal tapizó de mantas la ciudad de Morelia, en las que asegura que no son un grupo bélico, que sólo defienden su territorio.
“Justicia no es que seamos bélicos, sólo defendemos y defenderemos nuestra tierra”, decían las mantas firmadas por “Los Caballeros Templarios, Guardia Michoacana”, que de de inmediato fueron retiradas por fuerzas federales y estatales.
Las mantas, colocadas en puentes vehiculares y peatonales de la capital michoacana, son las primeras que aparecen en lo que va del gobierno de Fausto Vallejo, quien asumió el cargo el pasado 15 de febrero.
Ayer, la Policía Federal le asestó un fuerte golpe a ese grupo delictivo al detener a 22 personas que se encontraban reunidas en un balneario de Morelia, a varios de las cuales se les vincula con actividades de extorsión en ciudades de Michoacán y Guanajuato.
De acuerdo con la Policía Federal, 11 de los detenidos podrían pertenecer a Los Caballeros Templarios, el grupo criminal que anunció su aparición hace precisamente un año.
Originalmente dijeron que sustituirían al grupo delictivo conocido como La Familia Michoacana, pero al paso de las semanas se conoció que se trataba de una escisión de dicho grupo.
Sus líderes son Enrique Plancarte, El Kike, y Servando Gómez Martínez, La Tuta, quienes tras la supuesta muerte del líder de La Familia Michoacana, Nazario Moreno González, El Chayo, El Macho Loco o El Más Loco, en diciembre de 2010, y la ruptura con Jesús Méndez Vargas, El Chango, en los días siguientes a la “muerte” de su líder, pretendieron apoderarse de la base social que La Familia cooptó en sus inicios.
Las primeras ejecuciones atribuidas a Los Caballeros Templarios fueron las de dos hombres colgados del cuello en unos puentes y a quienes les pegaron dos carteles que decían: “Lo matamos por ladrón y secuestrador. Atentamente, los caballeros templarios”.
Un día después de que la Policía Federal detuvo a 11 personas presuntamente ligadas con Los Caballeros Templarios, el grupo criminal tapizó de mantas la ciudad de Morelia, en las que asegura que no son un grupo bélico, que sólo defienden su territorio.
“Justicia no es que seamos bélicos, sólo defendemos y defenderemos nuestra tierra”, decían las mantas firmadas por “Los Caballeros Templarios, Guardia Michoacana”, que de de inmediato fueron retiradas por fuerzas federales y estatales.
Las mantas, colocadas en puentes vehiculares y peatonales de la capital michoacana, son las primeras que aparecen en lo que va del gobierno de Fausto Vallejo, quien asumió el cargo el pasado 15 de febrero.
Ayer, la Policía Federal le asestó un fuerte golpe a ese grupo delictivo al detener a 22 personas que se encontraban reunidas en un balneario de Morelia, a varios de las cuales se les vincula con actividades de extorsión en ciudades de Michoacán y Guanajuato.
De acuerdo con la Policía Federal, 11 de los detenidos podrían pertenecer a Los Caballeros Templarios, el grupo criminal que anunció su aparición hace precisamente un año.
Originalmente dijeron que sustituirían al grupo delictivo conocido como La Familia Michoacana, pero al paso de las semanas se conoció que se trataba de una escisión de dicho grupo.
Sus líderes son Enrique Plancarte, El Kike, y Servando Gómez Martínez, La Tuta, quienes tras la supuesta muerte del líder de La Familia Michoacana, Nazario Moreno González, El Chayo, El Macho Loco o El Más Loco, en diciembre de 2010, y la ruptura con Jesús Méndez Vargas, El Chango, en los días siguientes a la “muerte” de su líder, pretendieron apoderarse de la base social que La Familia cooptó en sus inicios.
Las primeras ejecuciones atribuidas a Los Caballeros Templarios fueron las de dos hombres colgados del cuello en unos puentes y a quienes les pegaron dos carteles que decían: “Lo matamos por ladrón y secuestrador. Atentamente, los caballeros templarios”.
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