El doctor y la maestra

Salvador García Soto

José Ángel Córdova Villalobos, recién rescatado por el presidente Felipe Calderón y enviado a la Secretaría de Educación -un área que no domina pero donde le encontraron acomodo político- estuvo a nada de ser postulado candidato a la Presidencia de la República por el Partido Nueva Alianza, que lidera Elba Esther Gordillo.

Varias semanas antes de que Calderón lo buscara para la SEP y luego de su fracasado intento por ser candidato a gobernador de Guanajuato, donde se estrelló con la fuerza y la mano dura del yunquista Juan Manuel Oliva, el doctor Córdova había quedado tan decepcionado de la aplanadora azul en su estado, que el ex titular de Salud escuchó el canto de las sirenas y pensó en lanzarse como candidato presidencial.

La maestra Elba Esther Gordillo personalmente le hizo el ofrecimiento que luego operaron, en varias reuniones con Córdova Villalobos, hombres cercanos a la lideresa magisterial. Dolido con el PAN, el doctor había aceptado ya la postulación y solo negociaba los términos de su candidatura presidencial; paralelamente Gordillo sondeaba a otro personaje: Esteban Moctezuma Barragán, presidente de Fundación Azteca, quien en principio también mostró interés.

Pero cuando a Moctezuma se le comenzaron a complicar las cosas, la opción de Córdova entusiasmo a la maestra y a los elbistas que lo veían como un candidato que no sólo les garantizaba de sobra el registro, sino que podía además obtener una votación importante para ganar diputaciones y senadurías.

Estaba tan amarrada la postulación de José Ángel Córdova por el PANAL que ya se negociaban los términos para hacerla pública y detalles como el registro y la conferencia de prensa el 14 de febrero pasado; pero de pronto, políticos que estuvieron en los últimos amarres dicen que el doctor se echó para atrás y avisó que cancelaba los acuerdos y no podía aceptar la candidatura. Los elbistas suponen que Córdova recibió una llamada de Los Pinos que le pidió no aceptar la oferta de la maestra y le prometieron acomodo futuro dentro del régimen.

Se frustró así la alianza entre el doctor y la maestra, y el PANAL tuvo que recurrir, ya por descarte a postular el 16 de febrero a Gabriel Quadri, quien tenía recomendación directa del dirigente formal del partido, Luis Castro.

Un mes después, el 16 de marzo en Los Pinos, Calderón anunciaba la designación de Córdova Villalobos como titular de la SEP y el presidente hacía notorios esfuerzos por justificar su nombramiento hablando del doctor como “maestro de medicina” y “estudioso de la medicina” y otros calificativos que hicieron evidente que el doctor, que hizo un buen papel como secretario de Salud, que enfrentó exitosamente la epidemia de influenza en 2005 y que mereció incluso el reconocimiento internacional, era ahora, como secretario de Educación, un excelente médico.

NOTAS INDISCRETAS… Mientras Enrique Peña Nieto se cuida de no despeinarse y su coordinador Luis Videgaray celebra en Twitter con mensajes sobre la “gran ventaja” de su candidato, en el Estado de México hay tensiones y jaloneos por las candidaturas a presidencias municipales. Municipios codiciados como Huixquilucan, Naucalpan, Tlalnepantla y Atizapán están por definir a candidatos priistas y en la recta final el golpeteo arrecia. En Huixquilucan la tradición de los juniors se rompió con el descarte de Pablo Peralta, hijo del empresario Carlos Peralta, que buscó la candidatura. Ahora se ve un final de foto entre Carlos Hiriarte y Abel Huitrón, y hay amenazas de militantes locales con manifestarse si hay una imposición. En Naucalpan Rubén Sota, David Sánchez y Sergio Mancilla siguen en la pelea, mientras que en Tlalnepantla y Atizapán, la mala actuación de los actuales alcaldes priistas ha hecho que el PRI piense bien su postulación. A ver si cuidándose el copete de los otros presidenciables a Peña no lo despeinan con rupturas priistas en su estado…Se lanzan los dados. Otra Serpiente.

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