Juan Antonio Zúñiga
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) hizo un llamado al público a reforzar las medidas de prevención en el uso de los productos bancarios, luego de que en los últimos cinco años se registró un incremento de 150 por ciento en el índice de controversias imputables a un posible fraude con tarjetas de débito; mientras el de tarjetas de crédito creció 107 por ciento y el de cheques se elevó 80 por ciento en el mismo periodo.
En contraste, las controversias por posible fraude en transferencias electrónicas tuvieron una reducción de 4.17 por ciento en 2011 respecto a 2007, a pesar de que el número de operaciones de este tipo aumentó 50 por ciento, a 2 millones 400 mil durante el año pasado.
En conferencia de prensa, la directiva del organismo relativizó sus propias cifras, aunque no dejó de mostrar preocupación. Luis Pazos de la Torre, presidente de la Condusef, dijo que 98 por ciento de las transacciones bancarias llegan a buen fin, pero como son millones, el 2 por ciento agrupa varios miles de casos en los que se puede percibir, incluso, la participación del crimen organizado trasnacional en las instituciones financieras.
Para dar una idea de la dimensión de las operaciones, señaló que hay 25 millones de tarjetas de crédito emitidas, con las que en 2011 se realizaron transacciones por más de 430 mil millones de pesos. En tarjetas de débito hay casi 84 millones, que el año pasado movieron unos 2.3 billones de pesos; en tanto hay ya 16 millones de usuarios de banca por Internet y teléfono móvil, mientras se giran alrededor de 100 millones de cheques al año.
Como en la medicina, comparó Pazos de la Torre, lo mejor es la prevención, por lo que recomendó cuidar las tarjetas como se cuidan los billetes y las monedas. Opinó que aunque el primer responsable de su manejo es el usuario, hay corresponsabilidad de la banca.
Luis Fabre Pruneda, vicepresidente técnico del organismo, indicó que entre 2007 y 2011 se atendieron 340 mil controversias en la Condusef por el uso de tarjetas de crédito, de las cuales 119 mil fueron identificadas con posibles fraudes relacionados con consumos no reconocidos y cobros de productos y servicios no contratados. El resto de las controversias estuvieron relacionadas con el servicio y operación de los bancos.
El número de operaciones diarias con tarjetas de crédito pasó de 1.1 millones en 2007 a 1.3 millones en 2011, lo cual significó un incremento de 18.2 por ciento, indicó Fabre. Pero el número diario de controversias relacionadas con presuntos fraudes se elevó de 46 a 113 en el mismo lapso, lo que representó un aumento de 145 por ciento. Así que el índice de controversias provocadas por posibles actos fraudulentos por cada 100 mil operaciones se elevó de 4.2 a 8.7, es decir, creció 107 por ciento en cinco años.
Por el lado de las tarjetas de débito, el número de controversias atendidas por el organismo fue de 45 mil entre 2007 y 2011, pero 91 por ciento de ellas, o sea, casi 41 millones, estuvieron relacionadas con un posible fraude relativo a consumos no reconocidos y disposición de efectivo en ventanilla, sucursal, cajero automático no reconocida. El 9 por ciento restante de las disputas se suscitaron por deficiencias en la operación y servicios de los bancos.
De 3.9 millones de operaciones que se realizaban con tarjetas de débito en 2007, las mismas pasaron a 5.5 millones en 2011, lo cual representó un incremento de 41 por ciento; mientras el número de controversias diarias relacionadas con un posible fraude creció 292 por ciento, al pasar de 13 hace cinco años a 51 en la actualidad. De tal manera que el índice de disputas relacionadas con un probable fraude pasó de 0.4 por cada 100 mil transacciones en 2007 a uno el año pasado. Creció 150 por ciento, según esta medición.
Las controversias derivadas del manejo de cheques ascendieron a 24 mil en los cinco años considerados por la estadística de la Condusef. En 67 por ciento, unos 16 mil 80 casos, se trató de cheques pagados no reconocidos por el titular, y en 33 por ciento se refirió a disputas relativas a la operación y servicio de los bancos. El número de transacciones diarias con cheques se redujo 28.6 por ciento en el periodo, al pasar de 2.1 millones de operaciones en 2007 a 1.5 millones en 2011. Pero las controversias diarias se elevaron de 10 a 15 en los mismos años, mientras el índice por cada 100 mil transacciones con este instrumento aumentó de 0.5 a 0.9 en el lapso.
Sobre las disputas por transferencias electrónicas, el organismo atendió 7 mil de 2007 a 2011, en las cuales hubo la posibilidad de fraude en 75 por ciento de los casos, mientras el índice por cada 100 mil operaciones de este tipo fue de 0.46 el año pasado y marcó un decremento de 4 por ciento en el periodo. La banca por Internet y teléfono móvil resultó ser el medio más seguro, según la estadística del organismo, pues de 200 mil transferencias electrónicas aparece una controversia con probable fraude.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) hizo un llamado al público a reforzar las medidas de prevención en el uso de los productos bancarios, luego de que en los últimos cinco años se registró un incremento de 150 por ciento en el índice de controversias imputables a un posible fraude con tarjetas de débito; mientras el de tarjetas de crédito creció 107 por ciento y el de cheques se elevó 80 por ciento en el mismo periodo.
En contraste, las controversias por posible fraude en transferencias electrónicas tuvieron una reducción de 4.17 por ciento en 2011 respecto a 2007, a pesar de que el número de operaciones de este tipo aumentó 50 por ciento, a 2 millones 400 mil durante el año pasado.
En conferencia de prensa, la directiva del organismo relativizó sus propias cifras, aunque no dejó de mostrar preocupación. Luis Pazos de la Torre, presidente de la Condusef, dijo que 98 por ciento de las transacciones bancarias llegan a buen fin, pero como son millones, el 2 por ciento agrupa varios miles de casos en los que se puede percibir, incluso, la participación del crimen organizado trasnacional en las instituciones financieras.
Para dar una idea de la dimensión de las operaciones, señaló que hay 25 millones de tarjetas de crédito emitidas, con las que en 2011 se realizaron transacciones por más de 430 mil millones de pesos. En tarjetas de débito hay casi 84 millones, que el año pasado movieron unos 2.3 billones de pesos; en tanto hay ya 16 millones de usuarios de banca por Internet y teléfono móvil, mientras se giran alrededor de 100 millones de cheques al año.
Como en la medicina, comparó Pazos de la Torre, lo mejor es la prevención, por lo que recomendó cuidar las tarjetas como se cuidan los billetes y las monedas. Opinó que aunque el primer responsable de su manejo es el usuario, hay corresponsabilidad de la banca.
Luis Fabre Pruneda, vicepresidente técnico del organismo, indicó que entre 2007 y 2011 se atendieron 340 mil controversias en la Condusef por el uso de tarjetas de crédito, de las cuales 119 mil fueron identificadas con posibles fraudes relacionados con consumos no reconocidos y cobros de productos y servicios no contratados. El resto de las controversias estuvieron relacionadas con el servicio y operación de los bancos.
El número de operaciones diarias con tarjetas de crédito pasó de 1.1 millones en 2007 a 1.3 millones en 2011, lo cual significó un incremento de 18.2 por ciento, indicó Fabre. Pero el número diario de controversias relacionadas con presuntos fraudes se elevó de 46 a 113 en el mismo lapso, lo que representó un aumento de 145 por ciento. Así que el índice de controversias provocadas por posibles actos fraudulentos por cada 100 mil operaciones se elevó de 4.2 a 8.7, es decir, creció 107 por ciento en cinco años.
Por el lado de las tarjetas de débito, el número de controversias atendidas por el organismo fue de 45 mil entre 2007 y 2011, pero 91 por ciento de ellas, o sea, casi 41 millones, estuvieron relacionadas con un posible fraude relativo a consumos no reconocidos y disposición de efectivo en ventanilla, sucursal, cajero automático no reconocida. El 9 por ciento restante de las disputas se suscitaron por deficiencias en la operación y servicios de los bancos.
De 3.9 millones de operaciones que se realizaban con tarjetas de débito en 2007, las mismas pasaron a 5.5 millones en 2011, lo cual representó un incremento de 41 por ciento; mientras el número de controversias diarias relacionadas con un posible fraude creció 292 por ciento, al pasar de 13 hace cinco años a 51 en la actualidad. De tal manera que el índice de disputas relacionadas con un probable fraude pasó de 0.4 por cada 100 mil transacciones en 2007 a uno el año pasado. Creció 150 por ciento, según esta medición.
Las controversias derivadas del manejo de cheques ascendieron a 24 mil en los cinco años considerados por la estadística de la Condusef. En 67 por ciento, unos 16 mil 80 casos, se trató de cheques pagados no reconocidos por el titular, y en 33 por ciento se refirió a disputas relativas a la operación y servicio de los bancos. El número de transacciones diarias con cheques se redujo 28.6 por ciento en el periodo, al pasar de 2.1 millones de operaciones en 2007 a 1.5 millones en 2011. Pero las controversias diarias se elevaron de 10 a 15 en los mismos años, mientras el índice por cada 100 mil transacciones con este instrumento aumentó de 0.5 a 0.9 en el lapso.
Sobre las disputas por transferencias electrónicas, el organismo atendió 7 mil de 2007 a 2011, en las cuales hubo la posibilidad de fraude en 75 por ciento de los casos, mientras el índice por cada 100 mil operaciones de este tipo fue de 0.46 el año pasado y marcó un decremento de 4 por ciento en el periodo. La banca por Internet y teléfono móvil resultó ser el medio más seguro, según la estadística del organismo, pues de 200 mil transferencias electrónicas aparece una controversia con probable fraude.
Comentarios