Juan de Dios Castro llama “corrupta” a Vázquez Mota

Álvaro Delgado

Josefina Vázquez Mota, candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la Presidencia de la República, es “corrupta”, afirmó públicamente Juan de Dios Castro Lozano, exsubprocurador general de la República.

La acusación del exfuncionario se produjo en una reunión de panistas de Coahuila, de donde es originario, en la que le preguntó a un diputado federal no identificado por qué Vázquez Mota aseguró, según él, que de ganar la presidencia de la República no gobernaría con panistas.

Según una videograbación del encuentro, que está disponible en la página www.youtube.com desde el 1 de febrero, Castro Lozano convalida también la afirmación de Ernesto Cordero, el derrotado candidato presidencial del PAN, en el sentido de que una familia puede vivir bien con 6 mil pesos mensuales.

Como puede apreciarse en el video, Castro Lozano pregunta al diputado, desde su asiento de primera fila del auditorio, si Vázquez Mota, de ganar la Presidencia de la República, gobernaría con panistas, pero el legislador lo ignora y se dirige al resto de los asistentes.

–¿Podremos vivir con 6 mil pesos? –pregunta el orador, en alusión a lo dicho por Cordero.

–¡No, no, no! –le responden los asistentes.

–¡Sí! –contradice Juan de Dios Castro desde su asiento en primera fila y exige, a gritos, que el diputado le responda a la pregunta que hizo. “Que conteste”.

El panista que preside la reunión llama al orden al exsubprocurador de Derechos Humanos de la PGR, pero éste insiste y no cesa aun con los gritos de reprobación en su contra del resto de los asistentes.

–Licenciado, licenciado, el diputado es invitado nuestro –le dice el moderador.

–¿Sí o no? –insiste Castro.

–Señor, licenciado, el diputado es invitado…

–¿Sí o no? –reta, a gritos.

El diputado retoma la palabra:

–La licenciada Josefina Vázquez Mota…

–¡Corrupta! –grita Castro Lozano desde su lugar.

–…gobernará –sigue el diputado– con los mejores hombres y las mejores mujeres.

Aplaude el auditorio y comienzan a gritar “¡Josefina, Josefina!”, mientras Castro manotea desde su asiento.

Sigue el diputado: “(Josefina) no gobernará con gente que se ha enquistado en la administración pública para hacerse ricos, no gobernará con gente que ha traicionado el ideario del partido y de la democracia”.

Juan de Dios grita desde su lugar: “Presidente, él no contestó la pregunta y dijo que ella no gobernará con puro panista.”

Después de esto, se pone de pie y toma el camino de la salida. Un militante le dice que no se vaya.

“Pero si yo soy panista y estoy gobernando y ella dijo que no, y el señor –dijo al volverse hacia la mesa–, a los ojos de todos no tiene vergüenza para negar lo que ella dijo.”

Regresa a su lugar sólo para gritonear al diputado: “¡No tiene vergüenza…!”

–¡Respeto, respeto! –le piden mujeres, mientras el presidente habla.

–¡Está mintiendo! –insiste Castro.

–¡Respeto, respeto! –insisten las mujeres.

–¡Ella dijo que no gobernará con puros panistas! –se aferra Castro.

El presidente le da la palabra a otro asistente, pero Castro está fuera de sí. “El señor está mintiendo”, reitera, mientras el orador dice que todos tienen derecho a hablar. “Qué bueno que esta campaña está provocando pasiones”, dice.

–¡Y mentiras! –interrumpe otra vez Juan de Dios, quien en ese momento se pone de pie y se va del salón.

–Vino cuete –dice una mujer que la cámara no identifica–. Así hasta yo.

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