El arresto de “El Chapo” antes del 1 de julio de 2012 no dará ventaja al PAN, como suponen, dice Stratfor

Sin Embargo

Existe la sospecha de que el gobierno federal busca capturar en los siguientes meses a Joaquín “El Chapo” Guzmán, líder del cártel de Sinaloa, para mejorar la posición de Acción Nacional en las encuestas de cara a las elecciones presidenciales, pero es muy difícil que este hecho -que se rumora en distintos niveles de la sociedad mexicana- pueda impactar favorablemente al partido en el gobierno, dice un análisis de la agencia de inteligencia Stratfor.

El despacho indica que el gobierno de Calderón ha sido objeto de muchas críticas por su “persecución de los cárteles, lo que contribuye a la baja popularidad de Calderón en este momento” a pesar de que muchos mexicanos parecen apoyar la acción del Estado contra los narcotraficantes.

La agencia dice que de acuerdo con las encuestas, el PAN ha perdido credibilidad entre muchos votantes mexicanos, muchos de los cuales, una vez más, ven al PRI como una alternativa viable para gobernar el país.

Los contactos de Stratfor, que dice incluir a “una variedad de personas, entre ellas funcionarios mexicanos y estadounidenses, periodistas, empresarios, taxistas y vendedores ambulantes”, le han dicho que el gobierno de Calderón podría “sacar algún tipo de golpe político de último minuto”, para así aumentar la popularidad y que el partido oficial pueda retener la presidencia.

Lo que suponen los contactos de la agencia de inteligencia es que el potencial estratagema electoral sería la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán, líder del cártel de Sinaloa, el más rico y poderoso de los narcotraficantes del mundo. El razonamiento de las fuentes de Stratfor es que si Calderón captura al capo, su popularidad se “dispararía”, además de la de su partido político.

Sin embargo, asegura la agencia estadunidense, no se sabe a ciencia cierta si ésta operación política del presidente Calderón servirá a la electoral del PAN. Por ejemplo, dice Stratfor, la muerte de Osama Bin Laden no le ha garantizado a Obama la reelección en Estados Unidos.

Además de las consideraciones políticas, “los factores que han ayudado a evitar la captura de Guzmán hasta el momento son los mismos factores que inhiben la capacidad del gobierno mexicano para capturarlo”, indica Stratfor.

Como lo ha venido asegurando la agencia de inteligencia en anteriores reportes, el cártel de drogas de Los Zetas ha desbancado a su rival de Sinaloa como la mayor banda narcotraficante de México en términos de presencia geográfica.

A finales de 2011, Los Zetas operaba en más de la mitad del país, un total de 17 estados, frente a los 16 en los que se mueve el cartel de Sinaloa.

A diferencia de su rival, que actúa en gran parte a través de sobornos, Los Zetas ”prefieren la brutalidad, la intimidación y la violencia”, lo que, según el informe, puede explicar su ascenso.

“Su modo de operación tiende a ser mucho menos sutil que el de sus contrincantes de Sinaloa, y con un liderazgo compuesto de exsoldados de operaciones especiales, son bastante eficaces al emplear la fuerza y el miedo para lograr sus objetivos”, indica Stratfor.

“Dado que fueron exmilitares quienes fundaron Los Zetas, sus miembros tienden a ascender en la jerarquía del grupo por méritos en lugar de por conexiones familiares”, algo que “contrasta enormemente con la cultura de otros carteles”, añade.

El año pasado, Los Zetas se trasladaron a los estados de Zacatecas y Durango, “logrando el control del primero y retando a la federación de Sinaloa en el último”, y comenzaron a extender su dominio en el estado de Colima y su puerto crucial de Manzanillo.

Al contrario de las alianzas que forma el cártel de Sinaloa, como la que le une al cártel del Golfo, las relaciones que forman Los Zetas son “más efímeras”, indica el informe.

Pese a perder a 17 de sus miembros y cabecillas en 2011, la banda se mantuvo “fuerte” y se reivindicó como fuerza dominante en la península del Yucatán, de acuerdo con Stratfor.

Por su parte, Sinaloa perdió a al menos 10 capos importantes el pasado año, y aunque no está claro cómo eso ha afectado a sus operaciones, sí parece haber mermado su producción de metanfetamina, que dominaba desde la desintegración del cártel de La Familia Michoacana, según la agencia de inteligencia.

De este modo, el cártel de Sinaloa y Los Zetas tienen a su alcance las “mismas herramientas”, sólo que las utilizan de forma distinta, indica Stratfor.

LA RED DE “EL CHAPO” GUZMÁN

Asegura la agencia que dentro de la población rural del estado de Sinaloa, Guzmán es respetado e incluso venerado. “Una figura casi mítica, que ha utilizado su fortuna para comprar la buena voluntad y la lealtad en su propio terreno y en otros lugares. Además de su generosidad pública, Guzmán ha sobornado a la gente durante décadas”, indica Stratfor.

“A diferencia de Los Zetas, los líderes del cártel de Sinaloa tienden a adoptar una visión a largo plazo sobre la corrupción. A menudo se contrataran a un funcionario de bajo nivel y luego continuarán pagando a otras personas. Este enfoque a largo plazo no es diferente a la adoptada por algunos servicios de inteligencia”.

“En pocas palabras”, dice Stratfor, “Guzmán y el cártel de Sinaloa han tenido en su nómina a agentes de la policía y militares, políticos, periodistas y jueces, durante años e incluso décadas”.

Esta “inteligencia”, al igual que los datos que obtienen, ha permitido el liderazgo de Sinaloa para construir una amplia red de “activos” con los que reúne información y sirven como agentes de influencia.

A nivel de calle, todos los cárteles mexicanos emplean “Halcones”, que proporcionan a los cárteles, alertas tempranas de los movimientos de las fuerzas policíacas o de la actividad de los cárteles rivales en el área de su responsabilidad.

Comentarios