Amores perros

José Cárdenas

Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador sellaron un pacto de unidad… después de seis años de distanciamiento.

La última vez que a Cárdenas y a López Obrador se les vio juntos fue en 2005… en aquella marcha de protesta contra el desafuero del entonces jefe de Gobierno.

Al parecer, López Obrador ya perdonó al ingeniero por haber aceptado el encargo de Vicente Fox, para organizar los festejos del Bicentenario.

Cárdenas también parece haber olvidado cuando el tabasqueño literalmente lo sacó a “empujones” del PRD, para adueñarse de la estructura que lo llevaría a competir por la Presidencia en 2006.

Algunos dirán que el pacto sagrado es un acto de mutua generosidad.

–¿No será más bien un acto de necesidad?

López Obrador requiere el aval de Cárdenas para ser Presidente en 2012 o cuando menos salir del tercer lugar en que hoy lo ubican las encuestas.

“Este encuentro ayuda a disipar dudas y malos entendidos”, se ufana El Peje.

Sin duda…

–¿Por fin entendió el líder de la Morena el peso que tiene el hombre al que tanto le debe nuestra incipiente democracia?

“En estos momentos aciagos es fundamental la unidad de aquellos que cuentan con autoridad moral y política como el ingeniero Cárdenas”, subraya López Obrador.

–¿Lo que sea con tal de conquistar el poder?

El mensaje es obvio… y quien sospeche, se amuela.

No vale menospreciar la actitud solidaria del ingeniero Cárdenas. Para fundar la nueva república del amor, todo se vale… todo suma (aplausos).

“Apliquémonos para construir la mayoría política que necesitamos”, responde Cuauhtémoc Cárdenas.

De fondo, el grito unísono: ¡unidad, unidad!... y más aplausos.

Mejor, imposible.

MONJE LOCO: El legendario fundador del PRD puso el plato fuerte en la mesa de Andrés Manuel. Habla de abrir algunos sectores no estratégicos de Pemex a la inversión privada, nacional y extranjera; sustituir el TLC; defender el Estado laico; garantizar el matrimonio entre parejas del mismo sexo y recuperar los territorios en manos del crimen. Ya se sabe, ya se supo…

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