El hasta hace unos días secretario particular de Felipe Calderón, Roberto Gil, se fue a contrapelo del Presidente a coordinar la campaña de Josefina Vázquez Mota. Dicen los que saben que el Presidente le pidió que no se fuera hasta que hubiera terminado la contienda por la candidatura, pero no esperó mucho tiempo. ¿La razón? Porque en Los Pinos le ofrecieron que sí iría al Senado por Chiapas, pero en una posición donde, como se espera, el partido quede relegado al tercer lugar en el estado, quedaría fuera de la Cámara Alta. Vázquez Mota le ofreció que a cambio de que le coordinara la campaña, en caso de ganar la candidatura, ella lo colocaría en el primer lugar de la lista para que, sin importar lo que sucediera en su estado, él garantizara un escaño.
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