Ricardo Eguia
Ladino y testarudo, insensible ante la grave problemática que asola a millones de jóvenes Calderón festina un “Programa Nacional de Financiamiento a la Educación Superior” con el cual no solo evade la obligación del estado de ofrecer una educación superior, pública, gratuita, de calidad y laica, sino que privilegia a las instituciones privadas y beneficia arteramente de nuevo a los Bancos que otorguen esos créditos a las Universidades privadas, en LUGAR DE FORTALECER Y FINANCIAR LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS DE EDUCACIÓN SUPERIOR…
Se repite y confirma la enemistad de Calderón con la población mayoritaria desempleada, empobrecida y expoliada por políticas públicas neoliberales regresivas y fracasadas como la que permite solo a las clases altas deducir de impuestos las colegiaturas que éstas pagan a instituciones privadas de educación…
Así como a un aborigen aislado de la civilización no le diría nada la pintura de la Mona Lisa o la Gioconda, ni “La Piedad” o los frescos de la capilla Sixtina, así a un salvaje en mala hora titular del poder ejecutivo mexicano tampoco percibe, ni le dice nada la tragedia de siete millones de jóvenes sin empleo y sin acceso a una licenciatura, mucho menos a post-grados…
Se ufana Calderón de un programa reduccionista, elitista cuyo objetivo principal es facilitar créditos a jóvenes que aspiren a realizar estudios de licenciatura y post-grado en Universidades privadas lo cual implica, en buen romance, que no financia la educación superior, sino solo se otorgarán préstamos bancarios a un exiguo grupo de estudiantes (en lugar de becar a la mayoría en instituciones públicas) que tendrán que pagar una tasa del 10% (diez por ciento) de intereses por montos que van de $215 mil pesos para licenciatura; $280 mil pesos para post-grado y con un plazo de quince años para la amortización de dichos créditos…
Este programa del belicoso vago de barriada y callejonero tecnócrata sin entrañas que habita Los Pinos, es una copia de otros programas similares en Estados Unidos y en Chile que no solo no han propiciado la democratización del acceso a la educación sino que son hoy mismo en el país sudamericano, motivo de la indignación, protestas iracundas en las calles, grandes movilizaciones de rechazo al gobierno que como aquí lucra con los fondos públicos, gasta mucho y mal, desvía y sub-ejerce los presupuestos, pero desdeña y desestima ampliar e impulsar a las instituciones públicas de educación superior mismas que hoy en México aglutinan la inmensa mayoría de los estudiantes y a las cuales el régimen panista ultraconservador y vasallo de los poderes fácticos, les regatea los recursos indispensables, al punto que cada año tienen que rechazar miles de jóvenes que así se frustran y ven cancelado su futuro por esa cerrazón e insensibilidad del panismo anti-humanista que padece este país…
Este demagógico y gazmoño programa FeCalista es además notoriamente incongruente desde el momento mismo en que el Estado rehuye su obligación de otorgar educación de calidad y saliéndose por peteneras ENVIA A LOS ESTUDIANTES A ENDEUDARSE CON LOS BANCOS EXTRANJERIZADOS (que viven del cheque anual del “Fobaproa-Ipab” así como de las más elevadas comisiones y tasas de interés del mundo) EN LUGAR DE BECARLOS O AUMENTAR EL PRESUPUESTO A LAS UNIVERSIDADES PÚBLICAS PARA QUE AMPLIEN LA COBERTURA Y TAMBIEN SEAN ELLAS LAS QUE SUPRIMAN LAS CUOTAS QUE TAMBIEN VAN A LA ALZA Y ESTÁN HACIENDO PROHIBITIVA LA EDUCACIÓN de sus hijos para millones de familias castigadas por el masivo desempleo, los salarios de hambre, la inflación y la carestía de los productos de la canasta básica, así como por la devaluación del peso y el cierre de empresas por la inseguridad, por la violencia desbordada de la “guerra” fracasada contra el narcotráfico…
Pero también este programa es una incoherencia, una indecencia, una burla soeze inadmisible para millones de jóvenes, desde el momento mismo en que al egresar no existen oportunidades de trabajo remunerado, pues la mediocre economía no crece, no genera empleos por que está férreamente anclada en los indicadores macroeconómicos y no se refleja en los bolsillos de la gente, tiene deprimido el mercado interno todo lo cual hace nugatorio, totalmente inútil como su autor, este “nuevo parto de los montes” calderoniano, pues con esa falta y destrucción de empleos lo único que hace es lastrarlos con una deuda de casi medio millón de pesos aproximadamente si un joven optara por ese crédito leonino sumada una licenciatura con un post-grado…
Bien decía Keynes que si sabía de economía, “algunos gobernantes tienen las mismas bases y certezas al tomar decisiones trascendentales como si fueran vaticinios” de una lectura de la ouíja, del tarot, la palma de la mano o los asientos en una taza de café…
Desde el punto de vista político-electoral peor para ese panismo forrado de conservadurismo decimonónico, enemigo del estado laico, confrontado, además (debido a este programa elusivo) con aproximadamente doce millones de la lista nominal que votarán por primera vez en julio próximo y con ese enorme peso ayudarán a enterrar bajo toneladas de votos al trinquetero de la “Estela de luz” y personaje central de otra “Fiesta del chivo” el nuevo “Leónidas Calderón” dijera el eximio Mario Vargas Llosa.
A esos doce millones de jóvenes que sufragarán con rencor y desprecio contra el pancalderonato habrá que sumarle los millones de familiares de esos jóvenes que hoy se están muriendo de hambre por la sequía “extraordinaria” o “extrema” en Durango, Zacatecas, Chihuahua, Coahuila, Aguascalientes, Jalisco, Tamaulipas, Sonora, Sinaloa y el sur de Nuevo León para los cuales la “Comisión Permanente” aprobó una partida adicional de diez mil millones de pesos pero que con esa total mezquindad antihumana que lo singulariza el “Marte purépecha” lo vetó.
¡Esa es la respuesta de un sátrapa ante la enorme tragedia de millones de mexicano muriendo de sed!
Este veto es conocido ya nacionalmente como el veto de la infamia, por el cual empezarán la semana próxima las grandes movilizaciones de protesta!!!
Ladino y testarudo, insensible ante la grave problemática que asola a millones de jóvenes Calderón festina un “Programa Nacional de Financiamiento a la Educación Superior” con el cual no solo evade la obligación del estado de ofrecer una educación superior, pública, gratuita, de calidad y laica, sino que privilegia a las instituciones privadas y beneficia arteramente de nuevo a los Bancos que otorguen esos créditos a las Universidades privadas, en LUGAR DE FORTALECER Y FINANCIAR LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS DE EDUCACIÓN SUPERIOR…
Se repite y confirma la enemistad de Calderón con la población mayoritaria desempleada, empobrecida y expoliada por políticas públicas neoliberales regresivas y fracasadas como la que permite solo a las clases altas deducir de impuestos las colegiaturas que éstas pagan a instituciones privadas de educación…
Así como a un aborigen aislado de la civilización no le diría nada la pintura de la Mona Lisa o la Gioconda, ni “La Piedad” o los frescos de la capilla Sixtina, así a un salvaje en mala hora titular del poder ejecutivo mexicano tampoco percibe, ni le dice nada la tragedia de siete millones de jóvenes sin empleo y sin acceso a una licenciatura, mucho menos a post-grados…
Se ufana Calderón de un programa reduccionista, elitista cuyo objetivo principal es facilitar créditos a jóvenes que aspiren a realizar estudios de licenciatura y post-grado en Universidades privadas lo cual implica, en buen romance, que no financia la educación superior, sino solo se otorgarán préstamos bancarios a un exiguo grupo de estudiantes (en lugar de becar a la mayoría en instituciones públicas) que tendrán que pagar una tasa del 10% (diez por ciento) de intereses por montos que van de $215 mil pesos para licenciatura; $280 mil pesos para post-grado y con un plazo de quince años para la amortización de dichos créditos…
Este programa del belicoso vago de barriada y callejonero tecnócrata sin entrañas que habita Los Pinos, es una copia de otros programas similares en Estados Unidos y en Chile que no solo no han propiciado la democratización del acceso a la educación sino que son hoy mismo en el país sudamericano, motivo de la indignación, protestas iracundas en las calles, grandes movilizaciones de rechazo al gobierno que como aquí lucra con los fondos públicos, gasta mucho y mal, desvía y sub-ejerce los presupuestos, pero desdeña y desestima ampliar e impulsar a las instituciones públicas de educación superior mismas que hoy en México aglutinan la inmensa mayoría de los estudiantes y a las cuales el régimen panista ultraconservador y vasallo de los poderes fácticos, les regatea los recursos indispensables, al punto que cada año tienen que rechazar miles de jóvenes que así se frustran y ven cancelado su futuro por esa cerrazón e insensibilidad del panismo anti-humanista que padece este país…
Este demagógico y gazmoño programa FeCalista es además notoriamente incongruente desde el momento mismo en que el Estado rehuye su obligación de otorgar educación de calidad y saliéndose por peteneras ENVIA A LOS ESTUDIANTES A ENDEUDARSE CON LOS BANCOS EXTRANJERIZADOS (que viven del cheque anual del “Fobaproa-Ipab” así como de las más elevadas comisiones y tasas de interés del mundo) EN LUGAR DE BECARLOS O AUMENTAR EL PRESUPUESTO A LAS UNIVERSIDADES PÚBLICAS PARA QUE AMPLIEN LA COBERTURA Y TAMBIEN SEAN ELLAS LAS QUE SUPRIMAN LAS CUOTAS QUE TAMBIEN VAN A LA ALZA Y ESTÁN HACIENDO PROHIBITIVA LA EDUCACIÓN de sus hijos para millones de familias castigadas por el masivo desempleo, los salarios de hambre, la inflación y la carestía de los productos de la canasta básica, así como por la devaluación del peso y el cierre de empresas por la inseguridad, por la violencia desbordada de la “guerra” fracasada contra el narcotráfico…
Pero también este programa es una incoherencia, una indecencia, una burla soeze inadmisible para millones de jóvenes, desde el momento mismo en que al egresar no existen oportunidades de trabajo remunerado, pues la mediocre economía no crece, no genera empleos por que está férreamente anclada en los indicadores macroeconómicos y no se refleja en los bolsillos de la gente, tiene deprimido el mercado interno todo lo cual hace nugatorio, totalmente inútil como su autor, este “nuevo parto de los montes” calderoniano, pues con esa falta y destrucción de empleos lo único que hace es lastrarlos con una deuda de casi medio millón de pesos aproximadamente si un joven optara por ese crédito leonino sumada una licenciatura con un post-grado…
Bien decía Keynes que si sabía de economía, “algunos gobernantes tienen las mismas bases y certezas al tomar decisiones trascendentales como si fueran vaticinios” de una lectura de la ouíja, del tarot, la palma de la mano o los asientos en una taza de café…
Desde el punto de vista político-electoral peor para ese panismo forrado de conservadurismo decimonónico, enemigo del estado laico, confrontado, además (debido a este programa elusivo) con aproximadamente doce millones de la lista nominal que votarán por primera vez en julio próximo y con ese enorme peso ayudarán a enterrar bajo toneladas de votos al trinquetero de la “Estela de luz” y personaje central de otra “Fiesta del chivo” el nuevo “Leónidas Calderón” dijera el eximio Mario Vargas Llosa.
A esos doce millones de jóvenes que sufragarán con rencor y desprecio contra el pancalderonato habrá que sumarle los millones de familiares de esos jóvenes que hoy se están muriendo de hambre por la sequía “extraordinaria” o “extrema” en Durango, Zacatecas, Chihuahua, Coahuila, Aguascalientes, Jalisco, Tamaulipas, Sonora, Sinaloa y el sur de Nuevo León para los cuales la “Comisión Permanente” aprobó una partida adicional de diez mil millones de pesos pero que con esa total mezquindad antihumana que lo singulariza el “Marte purépecha” lo vetó.
¡Esa es la respuesta de un sátrapa ante la enorme tragedia de millones de mexicano muriendo de sed!
Este veto es conocido ya nacionalmente como el veto de la infamia, por el cual empezarán la semana próxima las grandes movilizaciones de protesta!!!
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