Apro
Arropado por la dirigencia de los partidos que forman la coalición Movimiento Progresista (PRD-PT y Movimiento Ciudadano), diputados federales, locales, miembros del gobierno capitalino y con la notoria ausencia del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, el precandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador prometió que de ganar la Presidencia en el 2012 logrará terminar con la violencia imperante en el país desde hace cinco años, producto de la guerra que Felipe Calderón le declaró al narcotráfico.
El excandidato presidencial, que busca la candidatura por segunda vez consecutiva, arrancó su precampaña este domingo, en la explanada de la delegación Gustavo A. Madero, en un acto encabezado por el perredista Víctor Hugo Lobo.
Ante cientos de simpatizantes, principalmente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) encabezada por el exjefe de Gobierno, el ahora precandidato, afirmó: “Vamos a serenar a la sociedad. Habrá paz, tranquilidad porque se hará justicia en México”.
En el mitin, se cuestionó cómo lograría la paz social en caso de ganar la Presidencia. Respondió que se debe fomentar la productividad y generar un millón 200 mil empleos para mejorar el desarrollo económico.
Al inicio de su discurso, el tabasqueño consideró que se inicia una nueva etapa en la vida pública del país, misma que -añadió- se logró con el apoyo del pueblo, de quienes le dieron su confianza.
“Cinco años después de las elecciones presidenciales de 2006 seguimos resistiendo.
Desde aquí envío un reconocimiento amoroso por quienes luchan por la democracia y la libertad”.
También lanzó un reconocimiento a los dirigentes de los partidos de izquierda que lo apoyaron, “especialmente al PT” porque desde 2006 lo acompañó en la travesía de transformar la Convención Nacional Democrática en Morena.
“Agradezco a los dirigentes del PRD por su apoyo y respaldo. De los dirigentes del Movimiento Ciudadano, especialmente al PT”, señaló.
De imediato lanzó el reconocimiento a su “amigo” y “buen gobernante”, el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, porque declinó sus aspiraciones presidenciales por encima de los intereses de la nación. Su ausencia fue notoria.
López Obrador también anunció que iniciará una nueva gira de cinco días por las 16 delegaciones políticas del Distrito Federal y luego por todo el país hasta que termine la precampaña, el 15 de febrero del 2012.
“Quiero ofrecer al pueblo del México mis sentimientos, mi corazón para poder salvar a la patria”, apuntó.
Agregó que tiene conciencia de la difícil situación que atraviesa el país, “que no haya un buen gobierno que mejore las condiciones de vida para que millones de mexicanos puedan vivir mejor”, destacó.
Ahí lanzó tres propuestas de campaña: Terminar con la corrupción, ahorrar dinero del presupuesto con una política de austeridad gubernamental y un lugar en universidades públicas para los 7 millones de jóvenes de entre 15 y 23 años que no tienen oportunidad de estudiar.
“Sí se puede lograr esto, si el gobernante tiene autoridad moral y yo no voy a mentir, a transar ni a traicionar al pueblo”, destacó.
Los dirigentes
El mitin comenzó a las 10:30 horas en la explanada de la delegación, abarrotada de simpatizantes. El primero en hablar fue el dirigente del PT, el senador Alberto Anaya, quien le dio trato como presidente y afirmó que esta ocasión sí llegarán al poder. Recordó que su partido nunca dudó en brindarle su apoyo.
“De aquí para adelante. Este arroz ya se coció. Al igual que en 2006 López Obrador volverá a ganar la Presidencia”, indicó.
Después el senador y dirigente de Movimiento Ciudadano, Luis Walton, no se quedó atrás al recordarle a Anaya que quienes apostaron a la división de la izquierda se equivocaron. Se dijo “realmente” satisfecho con ser parte del proyecto lopezobradorista.
También afirmó que unida, la izquierda alcanzará a ganar la Presidencia.
Al respecto, el dirigente del PRD, Jesús Zambrano, quien fue acusado de traidor por una mujer que no paraba de gritar y un hombre de pinta extraña, se comprometió a cuidar los votos de la elección del 1 de julio de 2012 para no repetir los errores de hace seis años, cuando descuidaron casillas, en las que suponen hubo un supuesto fraude.
“Estamos levantándole la mano a López Obrador para que de manera legítima vuelva a ganar la Presidencia”, estableció.
En este primer acto de precampaña también visitó las delegaciones Iztapalapa, Álvaro Obregón y Benito Juárez.
Entre los presentes destacó la presencia de Mario Delgado, precandidato a la jefatura de Gobierno capitalino, la secretaria general del PRD, Dolores Padierna, el diputado federal Armando Ríos Piter, el senador Carlos Navarrete -también precandidato al DF-, el diputado y secretario general adjunto del sindicato de telefonistas, Francisco Hernández Juárez, entre otros que siempre asisten a los mitines, como el senador petista y coordinador de la precampaña y la campaña presidencial, Ricardo Monreal y el diputado Porfirio Muñoz Ledo.
Al final, alrededor de 50 personas que arroparon a López Obrador en el templete levantaron sus manos entrelazadas, en señal de triunfo. Al fondo una manta de la alianza Movimiento Progresista y Morena enmarcó el evento, con el eslogan: “El cambio verdadero está por venir”.
Arropado por la dirigencia de los partidos que forman la coalición Movimiento Progresista (PRD-PT y Movimiento Ciudadano), diputados federales, locales, miembros del gobierno capitalino y con la notoria ausencia del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, el precandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador prometió que de ganar la Presidencia en el 2012 logrará terminar con la violencia imperante en el país desde hace cinco años, producto de la guerra que Felipe Calderón le declaró al narcotráfico.
El excandidato presidencial, que busca la candidatura por segunda vez consecutiva, arrancó su precampaña este domingo, en la explanada de la delegación Gustavo A. Madero, en un acto encabezado por el perredista Víctor Hugo Lobo.
Ante cientos de simpatizantes, principalmente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) encabezada por el exjefe de Gobierno, el ahora precandidato, afirmó: “Vamos a serenar a la sociedad. Habrá paz, tranquilidad porque se hará justicia en México”.
En el mitin, se cuestionó cómo lograría la paz social en caso de ganar la Presidencia. Respondió que se debe fomentar la productividad y generar un millón 200 mil empleos para mejorar el desarrollo económico.
Al inicio de su discurso, el tabasqueño consideró que se inicia una nueva etapa en la vida pública del país, misma que -añadió- se logró con el apoyo del pueblo, de quienes le dieron su confianza.
“Cinco años después de las elecciones presidenciales de 2006 seguimos resistiendo.
Desde aquí envío un reconocimiento amoroso por quienes luchan por la democracia y la libertad”.
También lanzó un reconocimiento a los dirigentes de los partidos de izquierda que lo apoyaron, “especialmente al PT” porque desde 2006 lo acompañó en la travesía de transformar la Convención Nacional Democrática en Morena.
“Agradezco a los dirigentes del PRD por su apoyo y respaldo. De los dirigentes del Movimiento Ciudadano, especialmente al PT”, señaló.
De imediato lanzó el reconocimiento a su “amigo” y “buen gobernante”, el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, porque declinó sus aspiraciones presidenciales por encima de los intereses de la nación. Su ausencia fue notoria.
López Obrador también anunció que iniciará una nueva gira de cinco días por las 16 delegaciones políticas del Distrito Federal y luego por todo el país hasta que termine la precampaña, el 15 de febrero del 2012.
“Quiero ofrecer al pueblo del México mis sentimientos, mi corazón para poder salvar a la patria”, apuntó.
Agregó que tiene conciencia de la difícil situación que atraviesa el país, “que no haya un buen gobierno que mejore las condiciones de vida para que millones de mexicanos puedan vivir mejor”, destacó.
Ahí lanzó tres propuestas de campaña: Terminar con la corrupción, ahorrar dinero del presupuesto con una política de austeridad gubernamental y un lugar en universidades públicas para los 7 millones de jóvenes de entre 15 y 23 años que no tienen oportunidad de estudiar.
“Sí se puede lograr esto, si el gobernante tiene autoridad moral y yo no voy a mentir, a transar ni a traicionar al pueblo”, destacó.
Los dirigentes
El mitin comenzó a las 10:30 horas en la explanada de la delegación, abarrotada de simpatizantes. El primero en hablar fue el dirigente del PT, el senador Alberto Anaya, quien le dio trato como presidente y afirmó que esta ocasión sí llegarán al poder. Recordó que su partido nunca dudó en brindarle su apoyo.
“De aquí para adelante. Este arroz ya se coció. Al igual que en 2006 López Obrador volverá a ganar la Presidencia”, indicó.
Después el senador y dirigente de Movimiento Ciudadano, Luis Walton, no se quedó atrás al recordarle a Anaya que quienes apostaron a la división de la izquierda se equivocaron. Se dijo “realmente” satisfecho con ser parte del proyecto lopezobradorista.
También afirmó que unida, la izquierda alcanzará a ganar la Presidencia.
Al respecto, el dirigente del PRD, Jesús Zambrano, quien fue acusado de traidor por una mujer que no paraba de gritar y un hombre de pinta extraña, se comprometió a cuidar los votos de la elección del 1 de julio de 2012 para no repetir los errores de hace seis años, cuando descuidaron casillas, en las que suponen hubo un supuesto fraude.
“Estamos levantándole la mano a López Obrador para que de manera legítima vuelva a ganar la Presidencia”, estableció.
En este primer acto de precampaña también visitó las delegaciones Iztapalapa, Álvaro Obregón y Benito Juárez.
Entre los presentes destacó la presencia de Mario Delgado, precandidato a la jefatura de Gobierno capitalino, la secretaria general del PRD, Dolores Padierna, el diputado federal Armando Ríos Piter, el senador Carlos Navarrete -también precandidato al DF-, el diputado y secretario general adjunto del sindicato de telefonistas, Francisco Hernández Juárez, entre otros que siempre asisten a los mitines, como el senador petista y coordinador de la precampaña y la campaña presidencial, Ricardo Monreal y el diputado Porfirio Muñoz Ledo.
Al final, alrededor de 50 personas que arroparon a López Obrador en el templete levantaron sus manos entrelazadas, en señal de triunfo. Al fondo una manta de la alianza Movimiento Progresista y Morena enmarcó el evento, con el eslogan: “El cambio verdadero está por venir”.
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