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El procurador de Jalisco, Tomás Coronado, identificó al principal sospechoso del asesinato de los cuatro estudiantes de la Universidad de Guadalajara y al papá de uno de ellos, cuyos cuerpos fueron localizados en dos fosas en las instalaciones de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG).
Según el primer fiscal, el principal sospechoso es conocido con el alias de “El Tatuado” y es miembro de la FEG.
“El Tatuado”, según las investigaciones de la procuraduría estatal, custodiaba el edificio de la FEG, ubicado en la calle Carlos Pereyra 100, atrás de la Normal de Jalisco.
Además, es considerado por las autoridades como el cabecilla del grupo de choque de la FEG, utilizado para amedrentar a sus opositores.
Servía, además, como guardaespaldas de los últimos presidentes de la pseudoagrupación estudiantil. “El Tatuado” actualmente está prófugo.
Las investigaciones de la fiscalía estatal señalan que el móvil de los asesinatos está relacionado con el pago de derecho de piso, al que se negó Armando Gómez, el único adulto entre los asesinados.
El procurador de Jalisco, Tomás Coronado, identificó al principal sospechoso del asesinato de los cuatro estudiantes de la Universidad de Guadalajara y al papá de uno de ellos, cuyos cuerpos fueron localizados en dos fosas en las instalaciones de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG).
Según el primer fiscal, el principal sospechoso es conocido con el alias de “El Tatuado” y es miembro de la FEG.
“El Tatuado”, según las investigaciones de la procuraduría estatal, custodiaba el edificio de la FEG, ubicado en la calle Carlos Pereyra 100, atrás de la Normal de Jalisco.
Además, es considerado por las autoridades como el cabecilla del grupo de choque de la FEG, utilizado para amedrentar a sus opositores.
Servía, además, como guardaespaldas de los últimos presidentes de la pseudoagrupación estudiantil. “El Tatuado” actualmente está prófugo.
Las investigaciones de la fiscalía estatal señalan que el móvil de los asesinatos está relacionado con el pago de derecho de piso, al que se negó Armando Gómez, el único adulto entre los asesinados.
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