Taxco, otro destino turístico de Guerrero, sumido en la narcoviolencia

Apro

Un hombre fue ejecutado en la ciudad de Taxco y, junto al cadáver, sus victimarios dejaron un narcomensaje donde se advierte la confrontación de bandas criminales por la disputa de esta plaza.

A pesar de que los hechos de violencia en este punto turístico, ubicado en la Zona Norte de la entidad, se han recrudecido en las últimas semanas, las autoridades locales han asumido una actitud de indolencia frente a los crímenes, similar a la situación que se vivió en el principal destino turístico de Guerrero, Acapulco, que fue colapsado por la brutal guerra entre bandas de narcotraficantes ante la ausencia plena de autoridad.

El hallazgo del ejecutado se registró ayer por la noche en las inmediaciones del barrio de La Cadena y la víctima fue identificada con el nombre de José Luis Villa Cedeño, de 53 años, de oficio artesano platero y quien presentaba al menos cuatro impactos de bala calibre 38 súper y 7.62, utilizados por los rifles AK-47, indica un reporte oficial de la policía taxqueña.

A un costado del cuerpo, los sicarios dejaron el siguiente mensaje: “Aquí los estamos esperando. Atte. La Familia y El Chiquilín. Esto les va a pasar a todos los que traicionaron a La Empresa y para todos los bocones. Agárrense. P. D Viva La familia. Feliz Navidad”.

Este hecho ocurre a unas horas de que durante la madrugada de este martes, sujetos armados atacaron a balazos la fachada de dos negocios propiedad del alcalde de Taxco, Álvaro Burgos Barrera y de su padre, Álvaro Burgos Díaz: el hotel El Taxqueñito y una gasolinería que se ubican sobre la avenida de Los Plateros.

El mismo martes, un comando baleó la sede del ayuntamiento de Tepecoacuilco, también ubicado en la Zona Norte, donde resultaron dañadas la fachada del inmueble y cuatro patrullas de la Policía Municipal.

Las ejecuciones que anunciaron la disputa por la plaza

Desde el martes 22 de noviembre, en Taxco se advirtió un recrudecimiento de la violencia, con el hallazgo del cuerpo de un hombre descuartizado en las inmediaciones del barrio de Zacazontla.

A un costado de los restos humanos, los sicarios dejaron el siguiente mensaje:

“Esto les pasa a la gente chaquetera. Ya empieza la limpia en esta plaza. No se hagan pendejos, no le hagan al verga. No agarren dinero de los dos lados, ya sabemos quienes lo hacen, siguen ustedes putos. Nosotros no vamos a secuestrar, ni a robar. Ustedes decidan. Atte. El Fantasma y El Chiquilín, brazo armado de La Empresa”.

No obstante, la pelea por las principales plazas que conforman el corredor de drogas de la Zona Norte Previamente tuvo su origen en la ciudad de Iguala, donde el viernes 18 fueron arrojados 13 perros decapitados a la vía pública, junto con un narcomensaje, también firmado por el sujeto identificado como “El Fantasma”, donde amenaza de muerte a supuestos traidores y anuncia acciones de violencia para “limpiar” la plaza.

Previamente, en la misma ciudad, el lunes 14 se registraron tres ataques contra efectivos policíacos en distintos puntos de Iguala, que dejaron un saldo de tres muertos, entre ellos un agente federal y un policía municipal, así como dos agentes ministeriales heridos: un comandante y su escolta.

Las plazas de Iguala y Taxco, que forman parte del corredor de drogas Acapulco-Cuernavaca y que estuvieron bajo el control del cártel de los Beltrán Leyva hasta la muerte del capo Arturo Beltrán en diciembre de 2009, son disputadas por tres bandas delincuenciales.

Estos grupos son identificados como “Los Rojos”, una facción del extinto cártel de los Beltrán Leyva, que tiene su bastión en Chilpancingo, así como “La Familia y Los Caballeros Templarios”, ambos bandos escindidos de “La Familia Michoacana”, indican reportes oficiales consultados por Apro.

Los hechos de violencia en la zona norte de Guerrero se reanudaron a partir de la detención de Jesús Martínez Brito, conocido como “Chucho Brito” o “El Marranero”, al que se considera lugarteniente de “La Familia” y quien fue aprehendido de manera fortuita por el Ejército, el 10 de octubre anterior, en Iguala, indicaron fuentes oficiales.

“El Marranero” formó parte de la banda de “Los Rojos” en el momento en que el cártel de los Beltrán Leyva mantuvo el dominio absoluto del corredor Acapulco-Cuernavaca.

Luego, ante la debacle de los Beltrán Leyva en 2009, el presunto narcotraficante se alió a “La Familia”, luego de que este grupo se escindió del cártel “La Familia Michoacana”, que dominaba la plaza de Iguala hasta hace tres meses, cuando su líder, identificado sólo como “El Sapo Guapo”, cayó abatido junto a su hermano, el exdirector de la policía de Iguala, Jesús Castro Casarrubias, durante una balacera entre su célula criminal y agentes de la corporación municipal, ocurrida a finales de julio pasado.

Comentarios