Jorge Diaz
Lo dicho hace poco en esta columna: “Quizá la estrategia a seguir los próximos días (meses), sea la de distraer a su partido y grupo de asesores, para mantenerlos ocupados y después, tener a Peña Nieto sólo en el terreno ante una cámara, un micrófono y un reportero a modo de cualquier otro partido político y dejarlo mal parado, irlo derrumbando cual castillo de naipes, con apenas un soplido”.
Lo anterior, a propósito de lo sucedido entre un entrevistador del periódico español El País y Enrique Peña Nieto la semana pasada, donde el aspirante priista no pudo contestar algunas preguntas en relación a los precios de algunos productos básicos y se equivocó en el monto del salario mínimo, dando por cancelada la entrevista.
Oficial: Es temporada de caza. Después del gran escándalo en el que se vio involucrado por su desafortunada participación en la FIL Guadalajara, todo indica que sus contrincantes políticos apuntarán al talón de Aquiles fácilmente descubierto hace poco, no me refiero a los aspirantes propiamente, sino a sus brazos ejecutores, aquellos quienes por intereses específicos desde los medios y otros sectores tienen la posibilidad de abordarlo con la intención de hacerlo quedar en ridículo.
La pelota está en la cancha de los asesores de Peña Nieto ¿qué hacer? ¿Lo escondemos hasta un día antes de las elecciones en Julio de 2012 y nos la llevamos con insertos en el Tv y Novelas? ¿Lo mandamos a clases nocturnas? Pero… y si no se le pega nada.
No sé si esto redundará en una disminución en las simpatías hacia el mexiquense y por ende, un aumento en la intención del voto para amarillos o azules, pero estoy seguro que abonará al deleite y el humor en las redes sociales.
Por lo pronto, los otros aspirantes a ocupar Los Pinos durante seis años, deben ponerse a repasar la mayor cantidad de información posible, puesto que es bien sabido que “el que a hierro mata, a hierro muere” y del lado de quienes ven con simpatía la llegada de una presidencia de copete alto, estarán preparando sendos misiles con preguntas que irán de lo verdaderamente serio a lo irrisorio para emparejar el piso en cuanto a nivel de ignorancia (la competencia va a estar reñida).
Con el sello de la casa. Mientras tanto, los panistas en su intento por llamar la atención y ocupar las primeras planas se dan hasta con la cubeta primero, y después se dan la paz. Se nota muy improvisado, pero no abandonan el estilo polarizador y descalificador de la última década; sin embargo, el estarse mordiendo la lengua les perjudicará en esta ocasión.
Lo dicho hace poco en esta columna: “Quizá la estrategia a seguir los próximos días (meses), sea la de distraer a su partido y grupo de asesores, para mantenerlos ocupados y después, tener a Peña Nieto sólo en el terreno ante una cámara, un micrófono y un reportero a modo de cualquier otro partido político y dejarlo mal parado, irlo derrumbando cual castillo de naipes, con apenas un soplido”.
Lo anterior, a propósito de lo sucedido entre un entrevistador del periódico español El País y Enrique Peña Nieto la semana pasada, donde el aspirante priista no pudo contestar algunas preguntas en relación a los precios de algunos productos básicos y se equivocó en el monto del salario mínimo, dando por cancelada la entrevista.
Oficial: Es temporada de caza. Después del gran escándalo en el que se vio involucrado por su desafortunada participación en la FIL Guadalajara, todo indica que sus contrincantes políticos apuntarán al talón de Aquiles fácilmente descubierto hace poco, no me refiero a los aspirantes propiamente, sino a sus brazos ejecutores, aquellos quienes por intereses específicos desde los medios y otros sectores tienen la posibilidad de abordarlo con la intención de hacerlo quedar en ridículo.
La pelota está en la cancha de los asesores de Peña Nieto ¿qué hacer? ¿Lo escondemos hasta un día antes de las elecciones en Julio de 2012 y nos la llevamos con insertos en el Tv y Novelas? ¿Lo mandamos a clases nocturnas? Pero… y si no se le pega nada.
No sé si esto redundará en una disminución en las simpatías hacia el mexiquense y por ende, un aumento en la intención del voto para amarillos o azules, pero estoy seguro que abonará al deleite y el humor en las redes sociales.
Por lo pronto, los otros aspirantes a ocupar Los Pinos durante seis años, deben ponerse a repasar la mayor cantidad de información posible, puesto que es bien sabido que “el que a hierro mata, a hierro muere” y del lado de quienes ven con simpatía la llegada de una presidencia de copete alto, estarán preparando sendos misiles con preguntas que irán de lo verdaderamente serio a lo irrisorio para emparejar el piso en cuanto a nivel de ignorancia (la competencia va a estar reñida).
Con el sello de la casa. Mientras tanto, los panistas en su intento por llamar la atención y ocupar las primeras planas se dan hasta con la cubeta primero, y después se dan la paz. Se nota muy improvisado, pero no abandonan el estilo polarizador y descalificador de la última década; sin embargo, el estarse mordiendo la lengua les perjudicará en esta ocasión.
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