Campos Elíseos / Katia D'Artigues
La llegada de Pedro Joaquín
Así que una constitución moral, plantea Andrés Manuel López Obrador. Mmm. Lo escribió de su mano y computadora ayer y lo publicó.
En esta explicación —muy necesaria— de qué es lo que hace una “república amorosa”, ahora el virtual precandidato de las izquierdas propone que, de llegar a la presidencia, convocaría a hacer una “constitución moral” que será un “código del bien” (sic).
Así lo escribió:
—De ahí que hagamos el compromiso de convocar con este propósito a la elaboración de una constitución moral a especialistas en la materia, filósofos, sicólogos, sociólogos, antropólogos y a todos aquellos que tengan algo que aportar al respecto, como los ancianos venerables de las comunidades indígenas, los maestros, los padres y madres de familia, los jóvenes, los escritores, las mujeres, los empresarios, los defensores de la diversidad y de los derechos humanos, los practicantes de todas las religiones y los librepensadores.
Ajajá. Sería un ejercicio interesante, sin duda, pero, ¿no deberíamos definir primero qué es el bien y quién es bueno? A mí, por lo menos, me sigue sin quedar claro.
Por cierto, ayer, en una ciberentrevista declaró que ahora sí irá a todos los debates con los candidatos presidenciales.
¿Muera el rey, viva el rey? Creo que no será tan fácil para el PRI como pretenden.
Ya se fue Humberto Moreira. Sí. “Renunció” para evitar que a su partido le siguieran dando golpes… pero, ¿y la deuda de por lo menos 25 mil millones de pesos que le enjaretó a Coahuila?
Ése es un tema que seguirá siendo nota. Debe seguirlo siendo.
Para empezar, su hermano, el nuevo gobernador, Rubén Moreira, toma protesta y anuncia, claro, un plan de austeridad. También la revisión de la deuda de la que no supo su hermano (igual que los papeles falsificados). ¿Qué clase de gobernador endeuda así a su estado sin saber? Sólo espero que no se trate de una característica genética hereditaria, por el bien de los coahuilenses.
Por lo pronto, este jueves todos los planetas están alineados para ungir a Pedro Joaquín Coldwell. Eso de los planetas es un decir: Últimamente en el PRI, como en el sistema solar, todo gira alrededor del Sol-Peña Nieto, quien dio su visto bueno al senador igual que con una sola palabra suya —que tenía que “ponderar” su salida— le dio la despedida a Moreira.
¿Y quién es Pedro Joaquín Coldwell? Tiene 61 años y el 5 de agosto de 2012, pasada la elección, cumplirá 62. Actualmente es senador por mayoría y presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales. Fue gobernador de su estado, Quintana Roo.
Lo interesante de Joaquín Coldwell es que también es cercano al que fuera precandidato presidencial, Manlio Fabio Beltrones, e incluso trabajó de cerca, junto con él, el proyecto de la reforma política… que aún insistirán en pasar.
Joaquín Coldwell es priísta desde 1970 y por ese partido fue diputado local a los 25 años, y a los 29 fue diputado federal.
Es abogado por la Universidad Iberoamericana, donde fue reconocido como el alumno con mejor promedio de su generación y obtuvo mención honorífica. En la Ibero también fue académico impartiendo Sistemas Políticos y Gobiernos Contemporáneos, y maestro de Historia de México en el CBTIS de Cozumel.
Entre los cargos públicos que ha ocupado están el de director del Fonatur y secretario de Turismo con Carlos Salinas de Gortari y también coordinador de la Mesa del Diálogo para Chiapas y titular de la Comisión Nacional de Ayuda a Refugiados.
Ya en el partido, seguramente se las sabe de todas todas, porque ha sido secretario de Acción Política y de Organización de la CNOP, secretario General, de Organización y de Gestión Social del CEN; coordinador regional para elecciones en varios estados del país, representante ante el IFE y delegado del CEN en varias entidades. Su hermana, Addy Joaquín Coldwell, también fue priísta, pero ya en el proceso interno para elegir al candidato a gobernador por Quintana Roo se quejó del proceso, renunció a su militancia e ingresó a las filas del Partido Acción Nacional.
Siguen las disculpas por el lapsus de Enrique Peña Nieto y los tuits de su hija Paulina Peña. ¿Qué dijeron ahora el ex gobernador y su esposa Angélica Rivera? Se lo digo en la edición online de esta columna. Además, el pésimo chiste machista del presidente chileno Sebastián Piñera y qué ex gobernador perredista ya fue inhabilitado por anomalías en su gestión.
La llegada de Pedro Joaquín
Así que una constitución moral, plantea Andrés Manuel López Obrador. Mmm. Lo escribió de su mano y computadora ayer y lo publicó.
En esta explicación —muy necesaria— de qué es lo que hace una “república amorosa”, ahora el virtual precandidato de las izquierdas propone que, de llegar a la presidencia, convocaría a hacer una “constitución moral” que será un “código del bien” (sic).
Así lo escribió:
—De ahí que hagamos el compromiso de convocar con este propósito a la elaboración de una constitución moral a especialistas en la materia, filósofos, sicólogos, sociólogos, antropólogos y a todos aquellos que tengan algo que aportar al respecto, como los ancianos venerables de las comunidades indígenas, los maestros, los padres y madres de familia, los jóvenes, los escritores, las mujeres, los empresarios, los defensores de la diversidad y de los derechos humanos, los practicantes de todas las religiones y los librepensadores.
Ajajá. Sería un ejercicio interesante, sin duda, pero, ¿no deberíamos definir primero qué es el bien y quién es bueno? A mí, por lo menos, me sigue sin quedar claro.
Por cierto, ayer, en una ciberentrevista declaró que ahora sí irá a todos los debates con los candidatos presidenciales.
¿Muera el rey, viva el rey? Creo que no será tan fácil para el PRI como pretenden.
Ya se fue Humberto Moreira. Sí. “Renunció” para evitar que a su partido le siguieran dando golpes… pero, ¿y la deuda de por lo menos 25 mil millones de pesos que le enjaretó a Coahuila?
Ése es un tema que seguirá siendo nota. Debe seguirlo siendo.
Para empezar, su hermano, el nuevo gobernador, Rubén Moreira, toma protesta y anuncia, claro, un plan de austeridad. También la revisión de la deuda de la que no supo su hermano (igual que los papeles falsificados). ¿Qué clase de gobernador endeuda así a su estado sin saber? Sólo espero que no se trate de una característica genética hereditaria, por el bien de los coahuilenses.
Por lo pronto, este jueves todos los planetas están alineados para ungir a Pedro Joaquín Coldwell. Eso de los planetas es un decir: Últimamente en el PRI, como en el sistema solar, todo gira alrededor del Sol-Peña Nieto, quien dio su visto bueno al senador igual que con una sola palabra suya —que tenía que “ponderar” su salida— le dio la despedida a Moreira.
¿Y quién es Pedro Joaquín Coldwell? Tiene 61 años y el 5 de agosto de 2012, pasada la elección, cumplirá 62. Actualmente es senador por mayoría y presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales. Fue gobernador de su estado, Quintana Roo.
Lo interesante de Joaquín Coldwell es que también es cercano al que fuera precandidato presidencial, Manlio Fabio Beltrones, e incluso trabajó de cerca, junto con él, el proyecto de la reforma política… que aún insistirán en pasar.
Joaquín Coldwell es priísta desde 1970 y por ese partido fue diputado local a los 25 años, y a los 29 fue diputado federal.
Es abogado por la Universidad Iberoamericana, donde fue reconocido como el alumno con mejor promedio de su generación y obtuvo mención honorífica. En la Ibero también fue académico impartiendo Sistemas Políticos y Gobiernos Contemporáneos, y maestro de Historia de México en el CBTIS de Cozumel.
Entre los cargos públicos que ha ocupado están el de director del Fonatur y secretario de Turismo con Carlos Salinas de Gortari y también coordinador de la Mesa del Diálogo para Chiapas y titular de la Comisión Nacional de Ayuda a Refugiados.
Ya en el partido, seguramente se las sabe de todas todas, porque ha sido secretario de Acción Política y de Organización de la CNOP, secretario General, de Organización y de Gestión Social del CEN; coordinador regional para elecciones en varios estados del país, representante ante el IFE y delegado del CEN en varias entidades. Su hermana, Addy Joaquín Coldwell, también fue priísta, pero ya en el proceso interno para elegir al candidato a gobernador por Quintana Roo se quejó del proceso, renunció a su militancia e ingresó a las filas del Partido Acción Nacional.
Siguen las disculpas por el lapsus de Enrique Peña Nieto y los tuits de su hija Paulina Peña. ¿Qué dijeron ahora el ex gobernador y su esposa Angélica Rivera? Se lo digo en la edición online de esta columna. Además, el pésimo chiste machista del presidente chileno Sebastián Piñera y qué ex gobernador perredista ya fue inhabilitado por anomalías en su gestión.
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