Apro
El subsecretario de Seguridad Pública estatal, el teniente coronel Manuel Jesús Cicero Salazar, fue cesado luego de protagonizar una trifulca la madrugada del pasado 18 domingo al chocar su auto contra un autobús de transporte de personal del hotel Moon Palace, cuyo operador, Emmanuel Muñoz Salinas, resultó con traumatismo craneoencefálico debido a la golpiza que le propinaron los escoltas del jefe policiaco.
En lugar del militar fue designado Salvador Rocha Vargas, quien fungió como secretario de Seguridad Pública en el sexenio pasado hasta su encarcelamiento por presuntos nexos con el narcotráfico.
Cicero Salazar se encontraba en estado de ebriedad y venía acompañado de una bailarina exótica que había sacado del bar Ejecutivo.
Los escoltas de Cicero también la emprendieron a golpes contra el agente de Tránsito, Juan Enrique López Reyes, por lo que al sitio llegaron varias patrullas municipales.
La gresca dejó cuatro policías lesionados, tres municipales y uno estatal.
La reyerta, que duró casi dos horas y en la que ambos bandos cortaron cartucho, fue apaciguada por elementos del Ejército y la Marina.
En rueda de prensa a la que convocó ayer, horas antes de que se anunciara su despido, Cicero Salazar afirmó que no fue cesado y que él renunció a su cargo ante la falta de respaldo que ha padecido por parte del general retirado Bibiano Villa Castillo, titular de la SSP estatal, para el desempeño de sus funciones.
También dijo que se iba de la corporación junto con una veintena de sus colaboradores.
Al dar su versión sobre lo acontecido, negó haber estado ebrio al momento de esos hechos y aseguró que él se encontraba en un sanatorio atendiéndose de un problema de presión arterial cuando su vehículo, que era conducido por el agente Eduardo Vázquez, colisionó el autobús.
“Yo me encontraba en el consultorio de la clínica Quirúrgica del Sur, con el doctor González, me está tratando de la presión… me avisan que hay un problema de tránsito, se hizo más grande, me preocupó porque en la camioneta tenía mis armas… cuando hay una trifulca voy, qué bueno que no se robaron nada, las puertas estaban abiertas, tenían al chofer sometido, un relajo tremendo…
“Por mi condición de exmilitar yo no voy a rendir mis armas, aunque me corten cartucho, tuve que tomar el sonido, y avisarles que pido auxilio a las Fuerzas Armadas, porque si yo no le pido auxilio a las Fuerzas Armadas, ahí hubiera ocurrido una masacre”, justificó.
Y dijo que el conflicto con los municipales se debe a que en las últimas semanas él y su equipo investigaban a varios patrulleros de la corporación que presuntamente cobran cuotas por protección a ‘narcotienditas’.
“Las patrullas 5404, 5484, 5217, 5618, 5504, entre otras 40 unidades más, pasan a los puntos de venta de droga y cobran 200 pesos por protección”, denunció.
Incluso reveló que aunque reportó la situación a las autoridades municipales, nada han hecho al respecto.
Destacó que el problema con los municipales que derivó en el incidente de la madrugada del domingo inició a las 14 horas del sábado, cuando a la altura de la prolongación Tulum las patrullas 5636, 5446, 5405, 5548, 5619, y una del táctico de la Policía Municipal, cerraron el paso a una de sus unidades, una camioneta gris.
Aseguró que los municipales encañonaron a dos de sus elementos y se mofaron de ellos.
Por la noche, en una conferencia de prensa encabezada por el secretario de Gobierno estatal, Luis González Flores, éste dio a conocer la destitución de Cicero y presentó como su relevo a Rocha Vargas, quien fue detenido en septiembre de 2009 por la Subprocuraduría Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) por presuntos nexos con el narcotráfico, cargos de los que quedó absuelto por falta de pruebas en diciembre de 2010.
“El caso de Salvador Rocha también es conocido en el estado, él fue absuelto legalmente, libre absolutamente de los cargos que se le imputaron, por lo cual no hay antecedentes penales, porque fue absuelto de todo”, aseguró González Flores, quien se negó a abundar sobre el incidente que llevó al cese de Cicero.
El subsecretario de Seguridad Pública estatal, el teniente coronel Manuel Jesús Cicero Salazar, fue cesado luego de protagonizar una trifulca la madrugada del pasado 18 domingo al chocar su auto contra un autobús de transporte de personal del hotel Moon Palace, cuyo operador, Emmanuel Muñoz Salinas, resultó con traumatismo craneoencefálico debido a la golpiza que le propinaron los escoltas del jefe policiaco.
En lugar del militar fue designado Salvador Rocha Vargas, quien fungió como secretario de Seguridad Pública en el sexenio pasado hasta su encarcelamiento por presuntos nexos con el narcotráfico.
Cicero Salazar se encontraba en estado de ebriedad y venía acompañado de una bailarina exótica que había sacado del bar Ejecutivo.
Los escoltas de Cicero también la emprendieron a golpes contra el agente de Tránsito, Juan Enrique López Reyes, por lo que al sitio llegaron varias patrullas municipales.
La gresca dejó cuatro policías lesionados, tres municipales y uno estatal.
La reyerta, que duró casi dos horas y en la que ambos bandos cortaron cartucho, fue apaciguada por elementos del Ejército y la Marina.
En rueda de prensa a la que convocó ayer, horas antes de que se anunciara su despido, Cicero Salazar afirmó que no fue cesado y que él renunció a su cargo ante la falta de respaldo que ha padecido por parte del general retirado Bibiano Villa Castillo, titular de la SSP estatal, para el desempeño de sus funciones.
También dijo que se iba de la corporación junto con una veintena de sus colaboradores.
Al dar su versión sobre lo acontecido, negó haber estado ebrio al momento de esos hechos y aseguró que él se encontraba en un sanatorio atendiéndose de un problema de presión arterial cuando su vehículo, que era conducido por el agente Eduardo Vázquez, colisionó el autobús.
“Yo me encontraba en el consultorio de la clínica Quirúrgica del Sur, con el doctor González, me está tratando de la presión… me avisan que hay un problema de tránsito, se hizo más grande, me preocupó porque en la camioneta tenía mis armas… cuando hay una trifulca voy, qué bueno que no se robaron nada, las puertas estaban abiertas, tenían al chofer sometido, un relajo tremendo…
“Por mi condición de exmilitar yo no voy a rendir mis armas, aunque me corten cartucho, tuve que tomar el sonido, y avisarles que pido auxilio a las Fuerzas Armadas, porque si yo no le pido auxilio a las Fuerzas Armadas, ahí hubiera ocurrido una masacre”, justificó.
Y dijo que el conflicto con los municipales se debe a que en las últimas semanas él y su equipo investigaban a varios patrulleros de la corporación que presuntamente cobran cuotas por protección a ‘narcotienditas’.
“Las patrullas 5404, 5484, 5217, 5618, 5504, entre otras 40 unidades más, pasan a los puntos de venta de droga y cobran 200 pesos por protección”, denunció.
Incluso reveló que aunque reportó la situación a las autoridades municipales, nada han hecho al respecto.
Destacó que el problema con los municipales que derivó en el incidente de la madrugada del domingo inició a las 14 horas del sábado, cuando a la altura de la prolongación Tulum las patrullas 5636, 5446, 5405, 5548, 5619, y una del táctico de la Policía Municipal, cerraron el paso a una de sus unidades, una camioneta gris.
Aseguró que los municipales encañonaron a dos de sus elementos y se mofaron de ellos.
Por la noche, en una conferencia de prensa encabezada por el secretario de Gobierno estatal, Luis González Flores, éste dio a conocer la destitución de Cicero y presentó como su relevo a Rocha Vargas, quien fue detenido en septiembre de 2009 por la Subprocuraduría Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) por presuntos nexos con el narcotráfico, cargos de los que quedó absuelto por falta de pruebas en diciembre de 2010.
“El caso de Salvador Rocha también es conocido en el estado, él fue absuelto legalmente, libre absolutamente de los cargos que se le imputaron, por lo cual no hay antecedentes penales, porque fue absuelto de todo”, aseguró González Flores, quien se negó a abundar sobre el incidente que llevó al cese de Cicero.
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