Univisión
Las operaciones del grupo delictivo Los Zetas no se han visto afectadas, pese a las disputas por el territorio de esa banda criminal con otras, ni pese a los embates del gobierno mexicano.
De acuerdo al último análisis de Stratfor, recogido por la versión digital de El Universal, pese a estar en medio de varias batallas y de los golpes del gobierno mexicano, la capacidad de operación y el alcance territorial del que en algún tiempo fuera brazo armado del cártel del Golfo no se han visto mermadas.
Caso contrario de su antiguo aliado: el cártel del Golfo podría sufrir en lo próximo una grave ruptura.
Las disputas de los Zetas son con el cártel del Golfo, el de Sinaloa y las Fuerzas Armadas en el noreste del país, mientras apoyan al cártel de Juárez a repeler los ataques de la organización del Pacífico en Chihuahua, dijo El Universal con base en la consultora Strategic Forecasting (Stratfor).
Sin embargo, esta banda sigue tomando control en territorios adicionales, ejerciendo presión en Zacatecas, Jalisco, Nayarit, Guerrero y el Estado de México, y luchando en Chiapas y Oaxaca contra el cártel de Sinaloa.
De acuerdo al informe de la firma, recogido por el medio mexicano, el panorama no luce alentador, pues en los próximos meses podrían aumentar los niveles de violencia en las zonas disputadas por las bandas criminales –como es el caso de Monterrey y Veracruz--, aunque el liderazgo de los violentos zetas no se verá amenazado.
“Aunque Los Zetas se han retirado antes de territorios como Reynosa (Tamaulipas) en 2010, la pérdida de esa plaza no resultó perjudicial para las operaciones del cártel debido a su control en la región de Nuevo Laredo también Tamaulipas. No obstante, se espera ver un incremento en los esfuerzos defensivos de Los Zetas en ambas ciudades por su gran valor estratégico”, citó el medio a la firma.
Las pérdidas de tropa del cártel, de acuerdo al reporte, las ha sabido absorber de manera eficaz, de acuerdo a la dinámica con la que se comportaron los últimos tres meses las bandas narcotraficantes mexicanas.
El cártel del Golfo, a punto de reventar
Mientras tanto, el que sí parece estar debilitado es el cártel del Golfo, que de acuerdo a la firma luce en una posición de debilitamiento y presión ante las incursiones de las fuerzas federales en sus territorios.
Además de que el grupo, hoy en día liderado por Eduardo Costilla Sánchez “El Coss”, enfrenta también bajas por enfrentamientos con otras bandas criminales y por la ofensiva de las fuerzas armadas mexicanas, su principal riesgo podría ser una división interna que podría desencadenar división y un final violento para el cártel.
Tras la muerte de Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén “Tony Tormenta” –quien lideraba el cártel con Costilla Sánchez, Rafael “El Junior” Cárdenas podría estar buscando ser la cabeza del grupo, y cuenta con una fracción conocida como “Los Rojos”.
En el otro bando se ubica la organización bajo el mando de “El Coss”, que actualmente posee el control total del cártel.
“Pese a que la división en el Golfo se ha expandido discretamente durante dos años, la erupción de la violencia interna durante el pasado trimestre indica que la fractura puede estar a punto de explotar. Las consecuencias de una ruptura violenta en el cártel podrían incluir movimientos de Los Zetas y Sinaloa para sacar ventaja de la situación y ganar territorio”, citó El Universal.
Las operaciones del grupo delictivo Los Zetas no se han visto afectadas, pese a las disputas por el territorio de esa banda criminal con otras, ni pese a los embates del gobierno mexicano.
De acuerdo al último análisis de Stratfor, recogido por la versión digital de El Universal, pese a estar en medio de varias batallas y de los golpes del gobierno mexicano, la capacidad de operación y el alcance territorial del que en algún tiempo fuera brazo armado del cártel del Golfo no se han visto mermadas.
Caso contrario de su antiguo aliado: el cártel del Golfo podría sufrir en lo próximo una grave ruptura.
Las disputas de los Zetas son con el cártel del Golfo, el de Sinaloa y las Fuerzas Armadas en el noreste del país, mientras apoyan al cártel de Juárez a repeler los ataques de la organización del Pacífico en Chihuahua, dijo El Universal con base en la consultora Strategic Forecasting (Stratfor).
Sin embargo, esta banda sigue tomando control en territorios adicionales, ejerciendo presión en Zacatecas, Jalisco, Nayarit, Guerrero y el Estado de México, y luchando en Chiapas y Oaxaca contra el cártel de Sinaloa.
De acuerdo al informe de la firma, recogido por el medio mexicano, el panorama no luce alentador, pues en los próximos meses podrían aumentar los niveles de violencia en las zonas disputadas por las bandas criminales –como es el caso de Monterrey y Veracruz--, aunque el liderazgo de los violentos zetas no se verá amenazado.
“Aunque Los Zetas se han retirado antes de territorios como Reynosa (Tamaulipas) en 2010, la pérdida de esa plaza no resultó perjudicial para las operaciones del cártel debido a su control en la región de Nuevo Laredo también Tamaulipas. No obstante, se espera ver un incremento en los esfuerzos defensivos de Los Zetas en ambas ciudades por su gran valor estratégico”, citó el medio a la firma.
Las pérdidas de tropa del cártel, de acuerdo al reporte, las ha sabido absorber de manera eficaz, de acuerdo a la dinámica con la que se comportaron los últimos tres meses las bandas narcotraficantes mexicanas.
El cártel del Golfo, a punto de reventar
Mientras tanto, el que sí parece estar debilitado es el cártel del Golfo, que de acuerdo a la firma luce en una posición de debilitamiento y presión ante las incursiones de las fuerzas federales en sus territorios.
Además de que el grupo, hoy en día liderado por Eduardo Costilla Sánchez “El Coss”, enfrenta también bajas por enfrentamientos con otras bandas criminales y por la ofensiva de las fuerzas armadas mexicanas, su principal riesgo podría ser una división interna que podría desencadenar división y un final violento para el cártel.
Tras la muerte de Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén “Tony Tormenta” –quien lideraba el cártel con Costilla Sánchez, Rafael “El Junior” Cárdenas podría estar buscando ser la cabeza del grupo, y cuenta con una fracción conocida como “Los Rojos”.
En el otro bando se ubica la organización bajo el mando de “El Coss”, que actualmente posee el control total del cártel.
“Pese a que la división en el Golfo se ha expandido discretamente durante dos años, la erupción de la violencia interna durante el pasado trimestre indica que la fractura puede estar a punto de explotar. Las consecuencias de una ruptura violenta en el cártel podrían incluir movimientos de Los Zetas y Sinaloa para sacar ventaja de la situación y ganar territorio”, citó El Universal.
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