María Alejandra Arroyo / Corresponsal
Monterrey, NL, 1°. de septiembre. Nuevo León ha tocado fondo y no estamos peor sólo porque los criminales piensan que no les conviene, dijo hoy José Antonio Fernández Carbajal, presidente y director general de la empresa Fomento Económico Mexicano (Femsa).
Al encabezar la entrega de los premios Eugenio Garza Sada 2011, Fernández Carbajal calificó como una atrocidad lo ocurrido la semana pasada en el casino Royale, criticó a los gobernantes, a la sociedad, a los sistemas de justicia e incluso a las instituciones educativas, por lo que hemos dejado de hacer y que ha provocado la situación de inseguridad que golpea a la entidad.
Si don Eugenio Garza Sada viviera sé que estaría triste, indignado por la violencia, inseguridad y corrupción que vivimos. Estaría exigiendo a las autoridades eficacia y honestidad en la aplicación de la justicia, agregó el también vicepresidente del Consejo de Administración del Tecnológico de Monterrey.
“Cuatro jóvenes que incendiaron el casino nacieron en Monterrey. Es momento de preguntarnos en qué hemos fallado o qué hemos dejado de hacer.
¿Qué paso con sus maestros? ¿Qué hicieron o dejaron de hacer los gobernantes, el sistema de administración de justicia? ¿Dónde estábamos los empresarios?, ¿qué promueven los medios de comunicación? Y hago todas estas preguntas no para señalar culpables: todos desde nuestra trinchera tenemos un papel que cumplir, continuó.
Criticó a los actores políticos que han puesto –dijo– los intereses partidistas por sobre la misma sociedad. Sin embargo, hizo un llamado a analizar los temas en los que se ha fallado para revertir el clima de inseguridad propiciado también por la corrupción de un sistema de justicia, que además resulta tortuoso.
No hay ningún control de la plaza; hay que decirlo con todas sus letras: las autoridades de Nuevo León han tenido un desempeño insatisfactorio. Nuevo León merece tener un gobierno efectivo, limpio y eficiente. Los actuales son momentos de prueba decisivos. No estamos dispuestos a vernos en el espejo de ese casino en llamas, concluyó.
Monterrey, NL, 1°. de septiembre. Nuevo León ha tocado fondo y no estamos peor sólo porque los criminales piensan que no les conviene, dijo hoy José Antonio Fernández Carbajal, presidente y director general de la empresa Fomento Económico Mexicano (Femsa).
Al encabezar la entrega de los premios Eugenio Garza Sada 2011, Fernández Carbajal calificó como una atrocidad lo ocurrido la semana pasada en el casino Royale, criticó a los gobernantes, a la sociedad, a los sistemas de justicia e incluso a las instituciones educativas, por lo que hemos dejado de hacer y que ha provocado la situación de inseguridad que golpea a la entidad.
Si don Eugenio Garza Sada viviera sé que estaría triste, indignado por la violencia, inseguridad y corrupción que vivimos. Estaría exigiendo a las autoridades eficacia y honestidad en la aplicación de la justicia, agregó el también vicepresidente del Consejo de Administración del Tecnológico de Monterrey.
“Cuatro jóvenes que incendiaron el casino nacieron en Monterrey. Es momento de preguntarnos en qué hemos fallado o qué hemos dejado de hacer.
¿Qué paso con sus maestros? ¿Qué hicieron o dejaron de hacer los gobernantes, el sistema de administración de justicia? ¿Dónde estábamos los empresarios?, ¿qué promueven los medios de comunicación? Y hago todas estas preguntas no para señalar culpables: todos desde nuestra trinchera tenemos un papel que cumplir, continuó.
Criticó a los actores políticos que han puesto –dijo– los intereses partidistas por sobre la misma sociedad. Sin embargo, hizo un llamado a analizar los temas en los que se ha fallado para revertir el clima de inseguridad propiciado también por la corrupción de un sistema de justicia, que además resulta tortuoso.
No hay ningún control de la plaza; hay que decirlo con todas sus letras: las autoridades de Nuevo León han tenido un desempeño insatisfactorio. Nuevo León merece tener un gobierno efectivo, limpio y eficiente. Los actuales son momentos de prueba decisivos. No estamos dispuestos a vernos en el espejo de ese casino en llamas, concluyó.
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