Campos Elíseos / Katia D'Artigues
Finalmente llegó el día. Ayer en 3 estados se llevaron a cabo comicios para elegir al nuevo gobernador: Estado de México, Coahuila y Nayarit, mientras que en uno más, Hidalgo, solo para renovar el Congreso local y presidencias municipales. Hasta el cierre de este blog, la tendencia de votos favorecía en todos los casos y en la mayoría por muchos puntos, al PRI. A veces hasta por los ¿demodé? “carros completos”.
Aunque denuncias de irregularidades hay (antes y durante la jornada electoral) lo cierto es que el GRAN ganador de ayer fue el Revolucionario Institucional y eso hay que pensarlo. Parafraseando a Monterroso: “Y si es que alguna vez dormimos, el dinosaurio seguía ahí”. Si la de ayer, sobre todo la del Estado de México, es el “laboratorio” de las elecciones del 2012, ¿hay manera de evitar que el PRI gane de nuevo la Presidencia?
Es una buena pregunta a contestar. ¿Ustedes qué opinan?
Por lo pronto recupero algunas lecciones para los otros partidos políticos:
Para el PAN y el PRD: En las elecciones no está funcionando el discurso de lo malos, autoritarios y malos gobernantes que eran en el PRI, aunque lo hayan sido. Hay razones para ello: el electorado es más joven. Después de 11 años de gobiernos federales panistas, después de esta crisis de inseguridad, los jóvenes no lo creen o bien, ya no lo recuerdan.
Dato importante: la tercera parte del electorado en el 2012 tendrá de 18 a 30 años. Si bien los de 30 sí votaron –algunos—en el 2000 para “sacar al PRI de Los Pinos”, el resto no. NO tienen memoria de ello. Es un “mito genial”, quizá.
Para el PAN: Los compadres no funcionan (ver Guillermo Anaya: mucho más cuando se enfrentan a un estado como Coahuila, donde todo está a nombre de los Moreira o cercanos, donde todo lo controla el PRI); tampoco candidatos reciclados, aunque con trayectoria política. Sí, pienso en Luis Felipe Bravo Mena, que aunque siempre ha vivido en el Estado de México no tenía arraigo y mucho más podía triunfar después de todos los errores que cometió el PAN en la entidad. ¿Algunos? Tony Rivers, el alcalde que se clonó a sí mismo para evadir la ley electoral… y aprobar las cuentas públicas del Estado de México con Arturo Montiel, entre otros. La verdad –y me lo dijo un panista-- cayeron al tercer lugar en el Estado de México porque no había cuarto candidato…
Para el PRD, PT y Convergencia: sólo unidos tienen chance. Acuérdense de Acapulco (como María Bonita, de Agustín Lara) y ahora vean Nayarit, donde quedaron en tercer lugar. Y sumen los puntos que hubieran podido tener con los partidos “amigos”.
No sé si el nombre del juego sean las alianzas y si eso sea posible en el 2012 (ideológicamente es imposible, pragmáticamente todo es posible), pero lo que queda claro es que desunidos, imposible. Fragmentan el voto.
A ver qué dicen por estos días –más que el natural derecho al pataleo y las reales denuncias, pero estructurales ,del sistema electoral en el Estado de México que no admiten irregularidades, casi—tanto Andrés Manuel López Obrador como Marcelo Ebrard.
También una lección para todos, que quizá no sirva para el 2012: la política es local. Los candidatos que triunfan son aquellos con arraigo popular y local. Imponer a un candidato de fuera, sólo porque se le ocurre a alguien (aunque sea buen candidato) es taaaan priista….
¿Qué Enrique Peña Nieto va en caballo de hacienda rumbo a Los Pinos? Puede ser… pero también hay que recordar que a estas alturas en 1999 nadie pensó que ganaría Fox e igual en el 2005, poco pensaban que ganaría Calderón. Si bien el contexto no es el mismo en lo absoluto, hay algo en común entre ambos candidatos que no llegaron al poder, Labastida y AMLO: se confiaron, fueron soberbios. (En el caso de AMLO yo sólo estoy de acuerdo con José Antonio Crespo en “Hablan las actas”: no sé quién ganó, sé que gobierna Calderón y que eso es pues, legal, gústele a quién le guste).
Contesto un poco: yo no veo a los priistas demasiado soberbios y confiados. Más bien los veo trabajando. Sí los veo, digamos, “sobrados” , “arrogantes”,”perdonavidas”…. Un largo etcétera SIN aceptar errores pasados y demostrando que han cambiado porque creo, además, que en parte su campaña se basa en el que (aunque con corrupción) ellos sí saben cómo hacerlo. ¿Cómo los ven ustedes?
Quizá, me pregunto, eso lo que queremos, como nación (que somos todos) : dado que nadie ha podido probar incorruptibilidad, y todos los gobierno acaban siendo medio priistas en el fondo (“el pequeño priista que todos llevamos dentro”, dijo Felipe Calderón alguna vez), queremos al original y no al pirata. #Fuertesdeclaraciones, diríamos en Twitter.
¿Ganadores? Pues una indudable: Elba Esther Gordillo. Fue con todos los que ganaron. O tiene buen ojo…. O decide cosas con sus soldados/ maestros. También el Partido Verde, quien bueno, venderá en color “verde dólar” su amor-aventurero….
Un dato que alerta para terminar: el nivel de abstencionismo, el cual, además de demostrar un claro desencanto hacia la clase política y los comicios, implica también un aumento en el costo de cada sufragio. De acuerdo con autoridades electorales, el costo de cada voto, tomando en cuenta a los más de 10 millones de electores, era de 161 pesos, aunque aumentaría tomando en cuenta el porcentaje de abstencionismo.
¿Qué otras lecciones apuntarían? ¿Cómo vivieron la jornada electoral hayan sido votantes o no? Cuéntenme.
Espero sus comentarios, estamos en cibercontacto….
Finalmente llegó el día. Ayer en 3 estados se llevaron a cabo comicios para elegir al nuevo gobernador: Estado de México, Coahuila y Nayarit, mientras que en uno más, Hidalgo, solo para renovar el Congreso local y presidencias municipales. Hasta el cierre de este blog, la tendencia de votos favorecía en todos los casos y en la mayoría por muchos puntos, al PRI. A veces hasta por los ¿demodé? “carros completos”.
Aunque denuncias de irregularidades hay (antes y durante la jornada electoral) lo cierto es que el GRAN ganador de ayer fue el Revolucionario Institucional y eso hay que pensarlo. Parafraseando a Monterroso: “Y si es que alguna vez dormimos, el dinosaurio seguía ahí”. Si la de ayer, sobre todo la del Estado de México, es el “laboratorio” de las elecciones del 2012, ¿hay manera de evitar que el PRI gane de nuevo la Presidencia?
Es una buena pregunta a contestar. ¿Ustedes qué opinan?
Por lo pronto recupero algunas lecciones para los otros partidos políticos:
Para el PAN y el PRD: En las elecciones no está funcionando el discurso de lo malos, autoritarios y malos gobernantes que eran en el PRI, aunque lo hayan sido. Hay razones para ello: el electorado es más joven. Después de 11 años de gobiernos federales panistas, después de esta crisis de inseguridad, los jóvenes no lo creen o bien, ya no lo recuerdan.
Dato importante: la tercera parte del electorado en el 2012 tendrá de 18 a 30 años. Si bien los de 30 sí votaron –algunos—en el 2000 para “sacar al PRI de Los Pinos”, el resto no. NO tienen memoria de ello. Es un “mito genial”, quizá.
Para el PAN: Los compadres no funcionan (ver Guillermo Anaya: mucho más cuando se enfrentan a un estado como Coahuila, donde todo está a nombre de los Moreira o cercanos, donde todo lo controla el PRI); tampoco candidatos reciclados, aunque con trayectoria política. Sí, pienso en Luis Felipe Bravo Mena, que aunque siempre ha vivido en el Estado de México no tenía arraigo y mucho más podía triunfar después de todos los errores que cometió el PAN en la entidad. ¿Algunos? Tony Rivers, el alcalde que se clonó a sí mismo para evadir la ley electoral… y aprobar las cuentas públicas del Estado de México con Arturo Montiel, entre otros. La verdad –y me lo dijo un panista-- cayeron al tercer lugar en el Estado de México porque no había cuarto candidato…
Para el PRD, PT y Convergencia: sólo unidos tienen chance. Acuérdense de Acapulco (como María Bonita, de Agustín Lara) y ahora vean Nayarit, donde quedaron en tercer lugar. Y sumen los puntos que hubieran podido tener con los partidos “amigos”.
No sé si el nombre del juego sean las alianzas y si eso sea posible en el 2012 (ideológicamente es imposible, pragmáticamente todo es posible), pero lo que queda claro es que desunidos, imposible. Fragmentan el voto.
A ver qué dicen por estos días –más que el natural derecho al pataleo y las reales denuncias, pero estructurales ,del sistema electoral en el Estado de México que no admiten irregularidades, casi—tanto Andrés Manuel López Obrador como Marcelo Ebrard.
También una lección para todos, que quizá no sirva para el 2012: la política es local. Los candidatos que triunfan son aquellos con arraigo popular y local. Imponer a un candidato de fuera, sólo porque se le ocurre a alguien (aunque sea buen candidato) es taaaan priista….
¿Qué Enrique Peña Nieto va en caballo de hacienda rumbo a Los Pinos? Puede ser… pero también hay que recordar que a estas alturas en 1999 nadie pensó que ganaría Fox e igual en el 2005, poco pensaban que ganaría Calderón. Si bien el contexto no es el mismo en lo absoluto, hay algo en común entre ambos candidatos que no llegaron al poder, Labastida y AMLO: se confiaron, fueron soberbios. (En el caso de AMLO yo sólo estoy de acuerdo con José Antonio Crespo en “Hablan las actas”: no sé quién ganó, sé que gobierna Calderón y que eso es pues, legal, gústele a quién le guste).
Contesto un poco: yo no veo a los priistas demasiado soberbios y confiados. Más bien los veo trabajando. Sí los veo, digamos, “sobrados” , “arrogantes”,”perdonavidas”…. Un largo etcétera SIN aceptar errores pasados y demostrando que han cambiado porque creo, además, que en parte su campaña se basa en el que (aunque con corrupción) ellos sí saben cómo hacerlo. ¿Cómo los ven ustedes?
Quizá, me pregunto, eso lo que queremos, como nación (que somos todos) : dado que nadie ha podido probar incorruptibilidad, y todos los gobierno acaban siendo medio priistas en el fondo (“el pequeño priista que todos llevamos dentro”, dijo Felipe Calderón alguna vez), queremos al original y no al pirata. #Fuertesdeclaraciones, diríamos en Twitter.
¿Ganadores? Pues una indudable: Elba Esther Gordillo. Fue con todos los que ganaron. O tiene buen ojo…. O decide cosas con sus soldados/ maestros. También el Partido Verde, quien bueno, venderá en color “verde dólar” su amor-aventurero….
Un dato que alerta para terminar: el nivel de abstencionismo, el cual, además de demostrar un claro desencanto hacia la clase política y los comicios, implica también un aumento en el costo de cada sufragio. De acuerdo con autoridades electorales, el costo de cada voto, tomando en cuenta a los más de 10 millones de electores, era de 161 pesos, aunque aumentaría tomando en cuenta el porcentaje de abstencionismo.
¿Qué otras lecciones apuntarían? ¿Cómo vivieron la jornada electoral hayan sido votantes o no? Cuéntenme.
Espero sus comentarios, estamos en cibercontacto….
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