Octavio Santiago Regalado / Vía: NSS Oaxaca
El nombre de este aporte viene a colación del chiste aquel que reza: ¡Mi hijo se llama Jelipe y ansina quero que le digan!
Chiste porque, desde que Calderón es presidente de nuestro país, México es un país de caricatura, de vacilada y de chiste.
Al momento de teclear estas líneas, en dos hechos diferentes, al menos 32 personas fueron ejecutadas según los medios de comunicación en Chalco, Estado de México; y Monterrey, Nuevo León.
Vecinos de aquella zona del Estado de México narran que, alrededor de las 16:30 hrs. bajaron esposadas de dos camionetas a los 11 infortunados para luego ejecutarlos en el bordo de un canal de aguas negras; y cerca de las 22:00 hrs. un comando armado irrumpió en el Bar Sabino Gordo en pleno centro de Monterrey para asesinar a 21 desdichados y dejar heridas de muerte a por lo menos 5 personas más.
Lo más grave del asunto para el gobierno calderonista es que, no hay un sólo detenido por estos hechos de sangre. 32 muertos sin que nadie, haya visto, o escuchado nada. Hay que mencionar que elementos de la Policía Federal Preventiva tienen un destacamento a unas cuadras del Bar Sabino Gordo en Monterrey.
Por ser una zona extensa y marginada se podría pensar que los criminales que ultimaron a 11 personas en Chalco aprovecharon un descuido de las autoridades. ¿Y Monterrey? hay presencia del ejército y de las fuerzas federales desde que se recrudeció la criminalidad en ese estado y, si se toma en cuenta que, los hechos ocurrieron en el centro de la ciudad; ¿Qué pasa con la lucha anticrimen de Calderón? Simplemente, no funciona.
Vimos a un presidente conmoverse casi hasta las lágrimas en el diálogo con Sicilia en Chapultepec en el momento de pedir perdón por las víctimas de la guerra contra el crimen organizado. ¡Ni modo presidente! hay que pedir perdón por 32 más y los que se acumulen la semana que viene.
Me decía un amigo que con las aseveraciones de la FAO de que en 2011 y 2012 habrá insuficiencia alimentaria. Que no se tome a mal el trabajo del presidente, que lo único que está haciendo es luchar porque cada día con esta guerra seamos menos mexicanos y los alimentos nos alcancen más. Hablando de chistes… ¡Qué buen chiste!
Don Gelboy debe tener mucho cuidado. Si bien es cierto que, es el gallo que puede echar al PAN de los pinos, también es cierto que, situaciones como las de Chalco, por su bien y por el bien de los mexiquenses, no pueden volver a ocurrir en su estado.
El cuestionamiento más importante en este momento es: ¿Para qué les sirve a los regiomontanos un gobernador tan inútil como el Priísta Rodrigo Medina?
Ojalá, para bien de todos quienes vivimos en este golpeado país las cosas fueran sencillas. Por eso hoy, la pregunta es necesaria: ¿Hasta cuando Jelipe?
El nombre de este aporte viene a colación del chiste aquel que reza: ¡Mi hijo se llama Jelipe y ansina quero que le digan!
Chiste porque, desde que Calderón es presidente de nuestro país, México es un país de caricatura, de vacilada y de chiste.
Al momento de teclear estas líneas, en dos hechos diferentes, al menos 32 personas fueron ejecutadas según los medios de comunicación en Chalco, Estado de México; y Monterrey, Nuevo León.
Vecinos de aquella zona del Estado de México narran que, alrededor de las 16:30 hrs. bajaron esposadas de dos camionetas a los 11 infortunados para luego ejecutarlos en el bordo de un canal de aguas negras; y cerca de las 22:00 hrs. un comando armado irrumpió en el Bar Sabino Gordo en pleno centro de Monterrey para asesinar a 21 desdichados y dejar heridas de muerte a por lo menos 5 personas más.
Lo más grave del asunto para el gobierno calderonista es que, no hay un sólo detenido por estos hechos de sangre. 32 muertos sin que nadie, haya visto, o escuchado nada. Hay que mencionar que elementos de la Policía Federal Preventiva tienen un destacamento a unas cuadras del Bar Sabino Gordo en Monterrey.
Por ser una zona extensa y marginada se podría pensar que los criminales que ultimaron a 11 personas en Chalco aprovecharon un descuido de las autoridades. ¿Y Monterrey? hay presencia del ejército y de las fuerzas federales desde que se recrudeció la criminalidad en ese estado y, si se toma en cuenta que, los hechos ocurrieron en el centro de la ciudad; ¿Qué pasa con la lucha anticrimen de Calderón? Simplemente, no funciona.
Vimos a un presidente conmoverse casi hasta las lágrimas en el diálogo con Sicilia en Chapultepec en el momento de pedir perdón por las víctimas de la guerra contra el crimen organizado. ¡Ni modo presidente! hay que pedir perdón por 32 más y los que se acumulen la semana que viene.
Me decía un amigo que con las aseveraciones de la FAO de que en 2011 y 2012 habrá insuficiencia alimentaria. Que no se tome a mal el trabajo del presidente, que lo único que está haciendo es luchar porque cada día con esta guerra seamos menos mexicanos y los alimentos nos alcancen más. Hablando de chistes… ¡Qué buen chiste!
Don Gelboy debe tener mucho cuidado. Si bien es cierto que, es el gallo que puede echar al PAN de los pinos, también es cierto que, situaciones como las de Chalco, por su bien y por el bien de los mexiquenses, no pueden volver a ocurrir en su estado.
El cuestionamiento más importante en este momento es: ¿Para qué les sirve a los regiomontanos un gobernador tan inútil como el Priísta Rodrigo Medina?
Ojalá, para bien de todos quienes vivimos en este golpeado país las cosas fueran sencillas. Por eso hoy, la pregunta es necesaria: ¿Hasta cuando Jelipe?
Comentarios