La unidad en el Distrito Federal

Alejandra Barrales

Desde la primera elección en el Distrito Federal en 1997, el PRD se ha convertido en la opción de los capitalinos, en tres ocasiones la población ha ratificado en las urnas el apoyo a este proyecto de gobierno. El año entrante nuevamente nos someteremos a la evaluación de la gente, por eso es importante salir como un partido unido, de un solo frente.

Hay aspectos en los que tenemos absoluta certeza: la unidad de las izquierdas está firme, el bastión de la izquierda se encuentra en el Distrito Federal y el proyecto de izquierda es el único que puede garantizar la transformación de nuestro país.

Por eso es de gran importancia la reunión de representantes de diferentes expresiones perredistas que tienen una representación en la Ciudad de México, que convocaron a la unidad, hacer a un lado las confrontaciones y definir reglas claras para la elección de candidaturas en la capital del país.

La propuesta impulsada por Julio César Moreno, Carlos Augusto Morales de Nueva Izquierda; Héctor Guijosa y Carlos Reyes Gámiz de Unidad y Renovación Unyr; José Luis Muñoz Soria y Agustín Torres de Izquierda Democrática Nacional; Víctor Hugo Romo de Foro Nuevo Sol; Erasto Ensástiga de la Red por la Unidad de las Izquierdas, así como el secretario general del PRD-DF, Jesús Valencia, pretende iniciar un proceso de discusión y autocrítica de lo que ha hecho el partido, establecer el mecanismo de renovación de la dirigencia del partido, definir la estrategia para las elecciones del 2012 y las reglas para elegir a los candidatos la Jefatura de Gobierno, Jefaturas Delegacionales y diputaciones de la ALDF.

Abrir este espacio para la reflexión y discusión servirá para reconocer las fortalezas y debilidades, aprender de la lección de los últimos procesos electorales estatales, pero sobre todo dejar atrás los enfrentamientos que sólo nos entrampan y caminar hacia adelante.

El electorado del Distrito Federal ha decidido apoyar al proyecto de izquierda durante 14 años, para el PRD la Ciudad de México es su principal fortaleza, por eso debemos seguir la opción para la población más educada, participativa y crítica del país.

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