José Gil Olmos y Mauricio Rodríguez
Después de recorrer 3 mil kilómetros, la Caravana por la Paz que encabeza el poeta Javier Sicilia llegó a esta ciudad, donde lo recibieron cientos de habitantes de la colonia Villas de Salvárcar, donde hace dos años ejecutaron a 16 jóvenes durante una fiesta.
Una larga hilera de autos y cientos de personas recibieron a la caravana en el puente por donde se ingresa a esta colonia. Ahí, Luz María Ávila, madre de dos de los jóvenes sacrificados en enero del 2010, recibió a Sicilia, a quien entregó un rosario.
Al cabo de seis días de camino, en los que se realizaron actos en ocho ciudades con cientos de víctimas y organizaciones ciudadanas, la caravana tuvo su primer evento en esta colonia popular de Juárez, al que acudieron vestidas de blanco las familias de las víctimas.
Sicilia dijo que estaba feliz de llegar a estas tierras, “donde muchas familias sufren el mismo dolor que yo”.
El poeta estaba acompañado por el obispo Raúl Vera, varios pastores evangélicos, el exombudsman de la Ciudad de México, Emilio Álvarez Icaza, así como de contingentes de Michoacán, Oaxaca, Morelos y Distrito Federal, que incrementaron la caravana de 16 autobuses con más de 600 personas.
En Salvárcar, el poeta encabezó una marcha por las calles de la colonia y un encuentro con familias de los jóvenes asesinados.
Asimismo, participó en un acto en memoria de los más de 5 mil muertos registrados en Chihuahua tras la declaración de guerra hecha por Felipe Calderón al crimen organizado; aquí se colocaron linternas con el nombre de las víctimas.
Este viernes, los habitantes de Juárez y las organizaciones que acompañan la caravana tienen previsto realizar mesas de debate para afinar el Pacto Ciudadano por la Paz que se firmará, por la noche, en el Monumento a Juárez.
El sábado 11, la caravana tendrá su último acto en la frontera con Estados Unidos, donde se realizará un encuentro con organizaciones de ese país preocupadas por la violencia en Juárez y toda la línea que divide ambas naciones.
Después de recorrer 3 mil kilómetros, la Caravana por la Paz que encabeza el poeta Javier Sicilia llegó a esta ciudad, donde lo recibieron cientos de habitantes de la colonia Villas de Salvárcar, donde hace dos años ejecutaron a 16 jóvenes durante una fiesta.
Una larga hilera de autos y cientos de personas recibieron a la caravana en el puente por donde se ingresa a esta colonia. Ahí, Luz María Ávila, madre de dos de los jóvenes sacrificados en enero del 2010, recibió a Sicilia, a quien entregó un rosario.
Al cabo de seis días de camino, en los que se realizaron actos en ocho ciudades con cientos de víctimas y organizaciones ciudadanas, la caravana tuvo su primer evento en esta colonia popular de Juárez, al que acudieron vestidas de blanco las familias de las víctimas.
Sicilia dijo que estaba feliz de llegar a estas tierras, “donde muchas familias sufren el mismo dolor que yo”.
El poeta estaba acompañado por el obispo Raúl Vera, varios pastores evangélicos, el exombudsman de la Ciudad de México, Emilio Álvarez Icaza, así como de contingentes de Michoacán, Oaxaca, Morelos y Distrito Federal, que incrementaron la caravana de 16 autobuses con más de 600 personas.
En Salvárcar, el poeta encabezó una marcha por las calles de la colonia y un encuentro con familias de los jóvenes asesinados.
Asimismo, participó en un acto en memoria de los más de 5 mil muertos registrados en Chihuahua tras la declaración de guerra hecha por Felipe Calderón al crimen organizado; aquí se colocaron linternas con el nombre de las víctimas.
Este viernes, los habitantes de Juárez y las organizaciones que acompañan la caravana tienen previsto realizar mesas de debate para afinar el Pacto Ciudadano por la Paz que se firmará, por la noche, en el Monumento a Juárez.
El sábado 11, la caravana tendrá su último acto en la frontera con Estados Unidos, donde se realizará un encuentro con organizaciones de ese país preocupadas por la violencia en Juárez y toda la línea que divide ambas naciones.
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