Flor Zamora
La corrupción es un mal que vivimos día a día, en todos los niveles de gobierno, en los tres poderes, en todo el mundo. Es un fenómeno universal que desagraciadamente no logra ser erradicado de nuestro país. La corrupción tiene vínculos con la política. El dinero es indispensable para la realización de las campañas electorales que permiten el acceso al poder de los representantes populares.
Con motivo de la reciente detención y posterior liberación del ex Presidente Municipal de Tijuana, Jorge Hank Rohn, y la cercanía de la elección de Gobernador en el Estado de México, retomo lo que en mis clases de Derecho aprendí y durante los últimos años confirme, las decisiones jurídicas tienen implicaciones políticas y viceversa.
Para muestra, recordaré algunos de los casos más emblemáticos relacionados con corrupción, política y dinero.
1.- Amigos de Fox. Semanas antes de la elección del año 2000, el PRI presentó al IFE una queja en contra de la Alianza que llevó a Vicente Fox al Poder. La resolución del caso entre el IFE y el TIRFE tardó más de tres años y se acreditó que la campaña de Fox contó con un financiamiento paralelo que no fue reportado al IFE.
2.- PEMEX-GATE. La denuncia fue presentada por el PRD y se acreditó que el PRI recibió recursos provenientes del Sindicato de Trabajadores de PEMEX con los que se financiaron gastos de la campaña presidencial de Francisco Labastida. Las denuncias llegaron hasta el ámbito penal, pero en el tema electoral, la resolución del IFE se aprobó el 14 de marzo de 2003, semanas antes de la elección de Diputados Locales en el Estado de México.
3.- El Señor de las Ligas.- En marzo de 2004, en televisión nacional fuimos testigos de la forma en la que el empresario Carlos Ahumada entregaba dinero en efectivo a René Bejarano para financiar la campaña del PRD en el 2003. El caso tardó años en resolverse tanto en el ámbito penal, como en el electoral. Se sabe que actualmente Bejarano participa en la campaña de Alejandro Encinas.
4.- Michoacanazo. A finales de mayo de 2009, un mes antes del cierre de campañas para la elección de diputados federales, 11 presidentes municipales y 16 altos funcionarios del gobierno de Michoacán fueron detenidos por presuntos vínculos con el narcotráfico. Todos ligados al PRD.
5.- Greg Sánchez. A diez días de la elección de gobernador en Quintan Roo, en mayo de 2010, el candidato de la “Mega Alianza Todos por Quintana Roo” integrada por PRD, PT y Convergencia, Greg Sánchez fue detenido con motivo de presuntas conductas relacionadas con delincuencia organizada, delitos contra la salud y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Los casos anteriores y la reciente detención de Hank, evidencian que la conjunción de corrupción, política y dinero sigue y seguirá latente en la vida política del país. Las decisiones jurídicas con implicaciones políticas inciden en la confianza de los ciudadanos en las instituciones y sobre todo en los electores.
Que no nos traicione la memoria, no olvidemos que en breve inicia el proceso electoral más complicado de la historia reciente en México. Las elecciones de 2000 y 2006 serán cosa de niños al lado de lo que nos espera para el 2012. Exijamos a las autoridades, partidos y candidatos cumplir con sus tareas y dejar a los ciudadanos la libre elección de sus representantes y que, una vez que resulten electos, gobiernen para todos; total, soñar, no cuesta nada.
La corrupción es un mal que vivimos día a día, en todos los niveles de gobierno, en los tres poderes, en todo el mundo. Es un fenómeno universal que desagraciadamente no logra ser erradicado de nuestro país. La corrupción tiene vínculos con la política. El dinero es indispensable para la realización de las campañas electorales que permiten el acceso al poder de los representantes populares.
Con motivo de la reciente detención y posterior liberación del ex Presidente Municipal de Tijuana, Jorge Hank Rohn, y la cercanía de la elección de Gobernador en el Estado de México, retomo lo que en mis clases de Derecho aprendí y durante los últimos años confirme, las decisiones jurídicas tienen implicaciones políticas y viceversa.
Para muestra, recordaré algunos de los casos más emblemáticos relacionados con corrupción, política y dinero.
1.- Amigos de Fox. Semanas antes de la elección del año 2000, el PRI presentó al IFE una queja en contra de la Alianza que llevó a Vicente Fox al Poder. La resolución del caso entre el IFE y el TIRFE tardó más de tres años y se acreditó que la campaña de Fox contó con un financiamiento paralelo que no fue reportado al IFE.
2.- PEMEX-GATE. La denuncia fue presentada por el PRD y se acreditó que el PRI recibió recursos provenientes del Sindicato de Trabajadores de PEMEX con los que se financiaron gastos de la campaña presidencial de Francisco Labastida. Las denuncias llegaron hasta el ámbito penal, pero en el tema electoral, la resolución del IFE se aprobó el 14 de marzo de 2003, semanas antes de la elección de Diputados Locales en el Estado de México.
3.- El Señor de las Ligas.- En marzo de 2004, en televisión nacional fuimos testigos de la forma en la que el empresario Carlos Ahumada entregaba dinero en efectivo a René Bejarano para financiar la campaña del PRD en el 2003. El caso tardó años en resolverse tanto en el ámbito penal, como en el electoral. Se sabe que actualmente Bejarano participa en la campaña de Alejandro Encinas.
4.- Michoacanazo. A finales de mayo de 2009, un mes antes del cierre de campañas para la elección de diputados federales, 11 presidentes municipales y 16 altos funcionarios del gobierno de Michoacán fueron detenidos por presuntos vínculos con el narcotráfico. Todos ligados al PRD.
5.- Greg Sánchez. A diez días de la elección de gobernador en Quintan Roo, en mayo de 2010, el candidato de la “Mega Alianza Todos por Quintana Roo” integrada por PRD, PT y Convergencia, Greg Sánchez fue detenido con motivo de presuntas conductas relacionadas con delincuencia organizada, delitos contra la salud y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Los casos anteriores y la reciente detención de Hank, evidencian que la conjunción de corrupción, política y dinero sigue y seguirá latente en la vida política del país. Las decisiones jurídicas con implicaciones políticas inciden en la confianza de los ciudadanos en las instituciones y sobre todo en los electores.
Que no nos traicione la memoria, no olvidemos que en breve inicia el proceso electoral más complicado de la historia reciente en México. Las elecciones de 2000 y 2006 serán cosa de niños al lado de lo que nos espera para el 2012. Exijamos a las autoridades, partidos y candidatos cumplir con sus tareas y dejar a los ciudadanos la libre elección de sus representantes y que, una vez que resulten electos, gobiernen para todos; total, soñar, no cuesta nada.
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