Pedro Matías
El comandante Isidro López Ortiz, jefe del grupo de robos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), arrojó al piso, frente al gobernador Gabino Cué Monteagudo, un estimulo económico de varios miles de pesos que le entregó el mandatario, junto a otros 152 elementos, por haber esclarecido el robo de 167 millones de pesos a la Compañía Mexicana de Traslado de Valores (Cometra).
Con el rostro endurecido por la ira, López Ortiz arrojó el dinero como un acto de “dignidad” y de protesta por las investigaciones que abrió el gobierno del estado en contra de él mismo y de otros tres agentes que participaron en el esclarecimiento del asalto a Cometra, conocido como “el robo del siglo”, de los que se sospecha que no entregaron todo el dinero recuperado.
La acción tomó por sorpresa al gobernador, que no daba crédito a tal acto de insubordinación; al procurador general de Justicia del estado, Manuel de Jesús López; y al vicepresidente de Cometra, Constantino Huerta, quienes encabezaban la ceremonia realizada en el Palacio de Gobierno.
Después de saludar al gobernador y al procurador, el comandante recibió de manos del vicepresidente de Cometra, un fajo de billetes; tomó el sobre, lo abrió e inmediatamente aventó el dinero al piso.
El comandante López Ortiz dijo a la agencia Apro que la “incongruencia gubernamental” lo orilló a tomar la decisión, “como un gesto de dignidad”; además reclamó el pago del 10% del monto recuperado, como lo prometió Cometra.
“No trabajamos por recompensas; y estoy de acuerdo, pero si ellos prometieron públicamente que les iban a dar el 10% de lo recuperado, pues que lo cumplan”, dijo.
Consideró que para escamotearles la recompensa, el 12 de abril se integró la averiguación previa 60/(FCIE)/2011 en contra de él y de los Canuto Rey Méndez López, Laurentino Guadalupe Matías Jiménez y Tomás Enrique Aquino. Se les acusa de los delitos de robo calificado y abuso de autoridad.
“Quién los entiende –cuestionó iracundo el policía--… Primero nos trataron como héroes y nos felicitó el propio gobernador; luego nos encuartelan durante tres días consecutivos y se nos somete a intensos interrogatorios y ahora nos citan al Palacio de Gobierno para darnos un estímulo”.
Sobre el dinero rechazado, el comandante señaló: “No sé qué cantidad era; ni siquiera la conté. Sólo procedí a tirar el dinero como un acto de dignidad.”
“Únicamente escuche decir al gobernador: ‘Ah caray’ y me fui a mi lugar; pero cuando el gobernador termino de repartir el dinero se acerco a saludarnos y me llegó a decir que no iba a cometer ninguna injusticia; que su gobierno es democrático y que se haría una investigación seria”, explicó.
El policía, quien sospecha que habrá inconformidad en las filas de la Agencia Estatal de Investigaciones y no descarta represalias en su contra, manifestó: “Yo sí creo en el gobernador, en quien no creo es en el procurador porque dolosamente está utilizando testimonios de las mismas personas que detuvimos y consignamos; nada más falta que los ladrones van a ser los agraviados.”
López Ortiz dejó en claro que no se opone a que se le investigue, “lo que no se vale –agregó-- es que lo hagan torciendo la ley, con mentiras o testimonios que se sacan a fuerzas”.
Ante el temor de represalias, el agente responsabiliza al gobierno del estado de cualquier cosa que les pueda pasar a sus compañeros de trabajo, a su persona y a su familia.
El comandante del grupo de robos de la AEI recordó la forma como recuperaron, el 31 de marzo, 142 millones de los pesos de los 167 que fueron robados a Cometra.
En el operativo, además del dinero recuperado, los agentes aseguraron un vehículo, 35 armas de fuego y a los presuntos responsables: Angélico Olivera, Edgar López Rojas y Alberto de Jesús Martínez, razón por la que recibieron, el 7 de abril, un reconocimiento público del gobernador Gabino Cué.
“El día 30 efectuamos cateos y recabamos información que nos llevó a Jayacatlán, Atatlahuca y rancherías del área. Fuimos como 100 elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones y no hubo ni detenciones ni aseguramientos de dinero.
“Al día siguiente, con gente de Cometra y 11 agentes del grupo de investigaciones de robos, me avoqué a investigar y algunas autoridades nos proporcionaron datos positivos que indicaban dónde pudieran haberse movido esos presuntos con el dinero; y nos condujo a San José Aragón. Ahí llegamos a cierto domicilio donde nos tomamos un refresco y nos dieron información del vehículo y uno de los presuntos. Nos indicaron dónde estuvo estacionado por un par de días.
“Al llegar interrogamos a la señora Victoria Rojas Hernández y ahí, sorpresa, encontramos 24 bultos con dinero. Eran 100 millones aproximadamente. La misma señora informó que en otro domicilio de Jayacatlán había más dinero. Dejamos a gente de Comentra en el primer lugar asegurado y seis elementos de mi grupo resguardando el dinero. Otros seis nos trasladamos con gente de Cometra al segundo domicilio y ahí aseguramos otras 11 bolsas de dinero, otro superior hizo cateos en otros tres domicilios y el único error fue no ir con gente de Cometra, de ahí surgen las sospechas”, puntualizó.
López Río destacó que directivos de Cometra le informaron que ya habían elaborado un informe en donde manifestaban que había sido él y 11 elementos lo que habían encontrado el dinero y merecían la recompensa.
Después del incidente, el gobernador Gabino Cué reiteró que su administración reconocerá siempre a los buenos policías; sin embargo, advirtió: “aquellos que traicionen, no a su gobierno, sino a la confianza de la gente, serán sancionados”.
Ante los integrantes de la corporación reunidos en el salón Gobernadores, dijo: “No vamos a tolerar que ningún servidor público, aprovechándose de su cargo, pueda estar al margen de la legalidad.”
En alusión al policía insumiso, el mandatario asentó que cualquier policía que considere que es injusto el trato que reciben en la corporación, puede dejar las filas y dar oportunidad a otros elementos. “No vamos a permitir actos que traten de dañar una institución, y si alguien no está de acuerdo, no tiene por qué estar en esta corporación”, precisó.
Cué Monteagudo aseguró que las investigaciones del caso aún no han concluido; y si algún policía está involucrado en los hechos, será sancionado. Aclaró, sin embargo, que no se crearán “chivos expiatorios” ni se permitirá que se detenga injustamente a alguien, “pero tampoco vamos a solapar ningún acto de corrupción”.
El comandante Isidro López Ortiz, jefe del grupo de robos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), arrojó al piso, frente al gobernador Gabino Cué Monteagudo, un estimulo económico de varios miles de pesos que le entregó el mandatario, junto a otros 152 elementos, por haber esclarecido el robo de 167 millones de pesos a la Compañía Mexicana de Traslado de Valores (Cometra).
Con el rostro endurecido por la ira, López Ortiz arrojó el dinero como un acto de “dignidad” y de protesta por las investigaciones que abrió el gobierno del estado en contra de él mismo y de otros tres agentes que participaron en el esclarecimiento del asalto a Cometra, conocido como “el robo del siglo”, de los que se sospecha que no entregaron todo el dinero recuperado.
La acción tomó por sorpresa al gobernador, que no daba crédito a tal acto de insubordinación; al procurador general de Justicia del estado, Manuel de Jesús López; y al vicepresidente de Cometra, Constantino Huerta, quienes encabezaban la ceremonia realizada en el Palacio de Gobierno.
Después de saludar al gobernador y al procurador, el comandante recibió de manos del vicepresidente de Cometra, un fajo de billetes; tomó el sobre, lo abrió e inmediatamente aventó el dinero al piso.
El comandante López Ortiz dijo a la agencia Apro que la “incongruencia gubernamental” lo orilló a tomar la decisión, “como un gesto de dignidad”; además reclamó el pago del 10% del monto recuperado, como lo prometió Cometra.
“No trabajamos por recompensas; y estoy de acuerdo, pero si ellos prometieron públicamente que les iban a dar el 10% de lo recuperado, pues que lo cumplan”, dijo.
Consideró que para escamotearles la recompensa, el 12 de abril se integró la averiguación previa 60/(FCIE)/2011 en contra de él y de los Canuto Rey Méndez López, Laurentino Guadalupe Matías Jiménez y Tomás Enrique Aquino. Se les acusa de los delitos de robo calificado y abuso de autoridad.
“Quién los entiende –cuestionó iracundo el policía--… Primero nos trataron como héroes y nos felicitó el propio gobernador; luego nos encuartelan durante tres días consecutivos y se nos somete a intensos interrogatorios y ahora nos citan al Palacio de Gobierno para darnos un estímulo”.
Sobre el dinero rechazado, el comandante señaló: “No sé qué cantidad era; ni siquiera la conté. Sólo procedí a tirar el dinero como un acto de dignidad.”
“Únicamente escuche decir al gobernador: ‘Ah caray’ y me fui a mi lugar; pero cuando el gobernador termino de repartir el dinero se acerco a saludarnos y me llegó a decir que no iba a cometer ninguna injusticia; que su gobierno es democrático y que se haría una investigación seria”, explicó.
El policía, quien sospecha que habrá inconformidad en las filas de la Agencia Estatal de Investigaciones y no descarta represalias en su contra, manifestó: “Yo sí creo en el gobernador, en quien no creo es en el procurador porque dolosamente está utilizando testimonios de las mismas personas que detuvimos y consignamos; nada más falta que los ladrones van a ser los agraviados.”
López Ortiz dejó en claro que no se opone a que se le investigue, “lo que no se vale –agregó-- es que lo hagan torciendo la ley, con mentiras o testimonios que se sacan a fuerzas”.
Ante el temor de represalias, el agente responsabiliza al gobierno del estado de cualquier cosa que les pueda pasar a sus compañeros de trabajo, a su persona y a su familia.
El comandante del grupo de robos de la AEI recordó la forma como recuperaron, el 31 de marzo, 142 millones de los pesos de los 167 que fueron robados a Cometra.
En el operativo, además del dinero recuperado, los agentes aseguraron un vehículo, 35 armas de fuego y a los presuntos responsables: Angélico Olivera, Edgar López Rojas y Alberto de Jesús Martínez, razón por la que recibieron, el 7 de abril, un reconocimiento público del gobernador Gabino Cué.
“El día 30 efectuamos cateos y recabamos información que nos llevó a Jayacatlán, Atatlahuca y rancherías del área. Fuimos como 100 elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones y no hubo ni detenciones ni aseguramientos de dinero.
“Al día siguiente, con gente de Cometra y 11 agentes del grupo de investigaciones de robos, me avoqué a investigar y algunas autoridades nos proporcionaron datos positivos que indicaban dónde pudieran haberse movido esos presuntos con el dinero; y nos condujo a San José Aragón. Ahí llegamos a cierto domicilio donde nos tomamos un refresco y nos dieron información del vehículo y uno de los presuntos. Nos indicaron dónde estuvo estacionado por un par de días.
“Al llegar interrogamos a la señora Victoria Rojas Hernández y ahí, sorpresa, encontramos 24 bultos con dinero. Eran 100 millones aproximadamente. La misma señora informó que en otro domicilio de Jayacatlán había más dinero. Dejamos a gente de Comentra en el primer lugar asegurado y seis elementos de mi grupo resguardando el dinero. Otros seis nos trasladamos con gente de Cometra al segundo domicilio y ahí aseguramos otras 11 bolsas de dinero, otro superior hizo cateos en otros tres domicilios y el único error fue no ir con gente de Cometra, de ahí surgen las sospechas”, puntualizó.
López Río destacó que directivos de Cometra le informaron que ya habían elaborado un informe en donde manifestaban que había sido él y 11 elementos lo que habían encontrado el dinero y merecían la recompensa.
Después del incidente, el gobernador Gabino Cué reiteró que su administración reconocerá siempre a los buenos policías; sin embargo, advirtió: “aquellos que traicionen, no a su gobierno, sino a la confianza de la gente, serán sancionados”.
Ante los integrantes de la corporación reunidos en el salón Gobernadores, dijo: “No vamos a tolerar que ningún servidor público, aprovechándose de su cargo, pueda estar al margen de la legalidad.”
En alusión al policía insumiso, el mandatario asentó que cualquier policía que considere que es injusto el trato que reciben en la corporación, puede dejar las filas y dar oportunidad a otros elementos. “No vamos a permitir actos que traten de dañar una institución, y si alguien no está de acuerdo, no tiene por qué estar en esta corporación”, precisó.
Cué Monteagudo aseguró que las investigaciones del caso aún no han concluido; y si algún policía está involucrado en los hechos, será sancionado. Aclaró, sin embargo, que no se crearán “chivos expiatorios” ni se permitirá que se detenga injustamente a alguien, “pero tampoco vamos a solapar ningún acto de corrupción”.
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