Con informacion de las Agencias
El gobierno venezolano informó que se trabaja para lograr un buen arreglo en el diferendo por la nacionalización de la cementera mexicana que decretó en 2008 Hugo Chávez
ARREGLO El gobierno de Hugo Chávez informó que desde finales del año pasado trabaja con Cemex sobre un acuerdo para lograr un arreglo amistoso al diferendo entre las partes tras la nacionalización de la cementera en 2008
El Gobierno venezolano afirmó hoy que en los próximos días se debería anunciar un "arreglo amistoso" directo con la productora de cemento Cemex, en momentos en que la mexicana mantiene un reclamo por su expropiación ante un tribunal internacional de arbitraje.
"Desde finales del año 2010 se viene trabajando entre las partes un proyecto de acuerdo para alcanzar un arreglo amistoso, que debe anunciarse en los próximos días" , dijo el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias de Venezuela en un comunicado.
El Ministerio indicó que en el "proceso arbitral" a cargo del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), esta instancia del Banco Mundial se consideró con jurisdicción para conocer del caso el pasado 30 de diciembre.
Ello "no implica condena alguna contra nuestro país, ni se pronuncia sobre el fondo del asunto vinculado al ejercicio soberano del Estado venezolano sobre la ordenación de las empresas productoras de cemento" , remarcó.
El Gobierno del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, nacionalizó en junio de 2008 el sector cementero del país, alegando el carácter estratégico del mismo, y anunció la expropiación de las tres empresas trasnacionales que operaban en su territorio: la suiza Hocim, la francesa Lafarge y la mexicana Cemex.
El Gobierno venezolano anunció en 2009 un acuerdo de pago de 552 y 267 millones de dólares por el 85 y 89 por ciento de las acciones de Holcim y Lafarge, respectivamente, y admitió que no habían prosperado las negociaciones con Cemex.
Cemex pretendía un pago de unos mil 300 millones de dólares de compensación por sus activos, mientras el Gobierno venezolano solo ofreció 650 millones de dólares, según datos de la empresa mexicana.
"Iniciamos un proceso de arbitraje en una corte internacional; sin embargo, mantenemos nuestra actitud ante el Gobierno para negociar fuera del proceso de arbitraje" , dijo el pasado 28 de octubre Héctor Medina, vicepresidente ejecutivo de Finanzas de la firma en Monterrey (norte de México) .
El 8 de septiembre, el Ministerio de Comunicación e Información dijo que se había "hecho un arreglo amistoso" con Cemex y que Chávez había aprobado recursos suficientes para honrarlo, y aunque no precisó la cantidad sostuvo que cubría "el costo de sus bienes nacionalizados" .
La empresa, sin embargo, continuó con su demanda ante el tribunal de arbitraje.
El gobierno venezolano informó que se trabaja para lograr un buen arreglo en el diferendo por la nacionalización de la cementera mexicana que decretó en 2008 Hugo Chávez
ARREGLO El gobierno de Hugo Chávez informó que desde finales del año pasado trabaja con Cemex sobre un acuerdo para lograr un arreglo amistoso al diferendo entre las partes tras la nacionalización de la cementera en 2008
El Gobierno venezolano afirmó hoy que en los próximos días se debería anunciar un "arreglo amistoso" directo con la productora de cemento Cemex, en momentos en que la mexicana mantiene un reclamo por su expropiación ante un tribunal internacional de arbitraje.
"Desde finales del año 2010 se viene trabajando entre las partes un proyecto de acuerdo para alcanzar un arreglo amistoso, que debe anunciarse en los próximos días" , dijo el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias de Venezuela en un comunicado.
El Ministerio indicó que en el "proceso arbitral" a cargo del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), esta instancia del Banco Mundial se consideró con jurisdicción para conocer del caso el pasado 30 de diciembre.
Ello "no implica condena alguna contra nuestro país, ni se pronuncia sobre el fondo del asunto vinculado al ejercicio soberano del Estado venezolano sobre la ordenación de las empresas productoras de cemento" , remarcó.
El Gobierno del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, nacionalizó en junio de 2008 el sector cementero del país, alegando el carácter estratégico del mismo, y anunció la expropiación de las tres empresas trasnacionales que operaban en su territorio: la suiza Hocim, la francesa Lafarge y la mexicana Cemex.
El Gobierno venezolano anunció en 2009 un acuerdo de pago de 552 y 267 millones de dólares por el 85 y 89 por ciento de las acciones de Holcim y Lafarge, respectivamente, y admitió que no habían prosperado las negociaciones con Cemex.
Cemex pretendía un pago de unos mil 300 millones de dólares de compensación por sus activos, mientras el Gobierno venezolano solo ofreció 650 millones de dólares, según datos de la empresa mexicana.
"Iniciamos un proceso de arbitraje en una corte internacional; sin embargo, mantenemos nuestra actitud ante el Gobierno para negociar fuera del proceso de arbitraje" , dijo el pasado 28 de octubre Héctor Medina, vicepresidente ejecutivo de Finanzas de la firma en Monterrey (norte de México) .
El 8 de septiembre, el Ministerio de Comunicación e Información dijo que se había "hecho un arreglo amistoso" con Cemex y que Chávez había aprobado recursos suficientes para honrarlo, y aunque no precisó la cantidad sostuvo que cubría "el costo de sus bienes nacionalizados" .
La empresa, sin embargo, continuó con su demanda ante el tribunal de arbitraje.
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