Policías federales detienen a 44 trabajadores de la cárcel, por su posible participación
La huida pudo haber sido planeada por el cártel del Golfo, señalan fuentes militares
La Jornada
Ochenta y nueve reos –66 acusados por delitos del fuero federal– se fugaron del penal de Reynosa, Tamaulipas, y junto con ellos desaparecieron dos custodios, informó Antonio Garza García, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
La Secretaría de la Defensa Nacional informó en la ciudad de México que desplegó 700 efectivos como parte de los operativos de revisión y búsqueda de los internos. Información obtenida de fuentes militares señala que la fuga pudo haber sido planeada por el cártel del Golfo como parte del reclutamiento de sicarios para combatir al cártel de Los Zetas.
En Ciudad Victoria, Garza García y Hugo Andrés Araujo, secretario de Gobierno, dieron una rueda de prensa en la que informaron que los internos huyeron alrededor de las cuatro de la madrugada de la prisión ubicada en la colonia Renacimiento, al fondo de una brecha pavimentada bordeada por casas de interés social y a 600 metros del libramiento Reynosa-Monterrey.
De forma extraoficial se indicó que los evadidos utilizaron dos escaleras para descender la barda perimetral, de ocho metros de altura, y con cuatro torres de vigilancia; afuera, un convoy de camionetas esperaba para llevarlos, al parecer, a la zona urbana de la ciudad.
El alcaide Guadalupe Reyes Ortega y otros 43 trabajadores de la prisión, entre custodios, personal de mantenimiento y enfermería, fueron detenidos por elementos de la Policía Federal que llegaron a las siete de la mañana para tomar el control del reclusorio, cuya capacidad es de mil 400 internos y alberga a casi 2 mil.
Los trabajadores fueron trasladados en calidad de presentados a la delegación de la Procuraduría de Justicia de Tamaulipas donde rinden su declaración, pues podrían haber incurrido en los delitos de omisión, corrupción y coautoría de evasión de presos.
Garza García dijo que de los fugados, 19 cumplían condenas por delitos del fuero común, 66 por infracciones del orden federal y de cuatro no se precisó. Por esa razón hizo un llamado al gobierno de la República a asumir su responsabilidad en la investigación y recaptura de los delincuentes.
Del total de evadidos, 48 estaban en proceso y no tenían sentencia pues llegaron hace apenas seis meses; incluso uno hace siete días. El resto llevaba entre 10 y 11 años de purgar sentencia por delitos contra la salud, homicidio y delincuencia organizada.
La dependencia revisa la cintas de las cámaras de video que hay en el perímetro de las instalación con la finalidad de determinar el grado de colusión de celadores y funcionarios de la cárcel. Garza García destacó que la forma en que huyeron sólo se explica por la colaboración de los carceleros, pues para saltar la barda usaron una escalera.
Subrayó que se distribuyeron las fichas de los internos evadidos a todas las autoridades del país con la intención de que se les ubique y recapture; además se reforzaron las medidas de seguridad en el municipio fronterizo de Reynosa para brindar mayor protección a sus pobladores.
Hugo Andrés Araujo recordó que en mayo pasado, el estado solicitó a la Federación resguardar las cárceles debido a la violencia, pero no hubo respuesta.
El secretario de Seguridad Pública estatal enfatizó que desde marzo se han fugado 201 reos de los penales de Tamaulipas.
Estos fugitivos se suman a los 12 del 5 de abril y a los 12 del 7 de julio. En Matamoros también ocurrió la fuga de 41 de sus internos el 26 de marzo.
La Procuraduría General de la República inició el acta circunstanciada AC/PGR/TAMPS/REY-II/459/2010, por los delitos que resulten de la fuga.
Por la noche, la Secretaría de Gobernación informó que su titular, José Francisco Blake, matiene comunicación constante con el gobernador Eugenio Hernández, y la Policía Federal brinda vigilancia perimetral en la cárcel de Reynosa.
La huida pudo haber sido planeada por el cártel del Golfo, señalan fuentes militares
La Jornada
Ochenta y nueve reos –66 acusados por delitos del fuero federal– se fugaron del penal de Reynosa, Tamaulipas, y junto con ellos desaparecieron dos custodios, informó Antonio Garza García, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
La Secretaría de la Defensa Nacional informó en la ciudad de México que desplegó 700 efectivos como parte de los operativos de revisión y búsqueda de los internos. Información obtenida de fuentes militares señala que la fuga pudo haber sido planeada por el cártel del Golfo como parte del reclutamiento de sicarios para combatir al cártel de Los Zetas.
En Ciudad Victoria, Garza García y Hugo Andrés Araujo, secretario de Gobierno, dieron una rueda de prensa en la que informaron que los internos huyeron alrededor de las cuatro de la madrugada de la prisión ubicada en la colonia Renacimiento, al fondo de una brecha pavimentada bordeada por casas de interés social y a 600 metros del libramiento Reynosa-Monterrey.
De forma extraoficial se indicó que los evadidos utilizaron dos escaleras para descender la barda perimetral, de ocho metros de altura, y con cuatro torres de vigilancia; afuera, un convoy de camionetas esperaba para llevarlos, al parecer, a la zona urbana de la ciudad.
El alcaide Guadalupe Reyes Ortega y otros 43 trabajadores de la prisión, entre custodios, personal de mantenimiento y enfermería, fueron detenidos por elementos de la Policía Federal que llegaron a las siete de la mañana para tomar el control del reclusorio, cuya capacidad es de mil 400 internos y alberga a casi 2 mil.
Los trabajadores fueron trasladados en calidad de presentados a la delegación de la Procuraduría de Justicia de Tamaulipas donde rinden su declaración, pues podrían haber incurrido en los delitos de omisión, corrupción y coautoría de evasión de presos.
Garza García dijo que de los fugados, 19 cumplían condenas por delitos del fuero común, 66 por infracciones del orden federal y de cuatro no se precisó. Por esa razón hizo un llamado al gobierno de la República a asumir su responsabilidad en la investigación y recaptura de los delincuentes.
Del total de evadidos, 48 estaban en proceso y no tenían sentencia pues llegaron hace apenas seis meses; incluso uno hace siete días. El resto llevaba entre 10 y 11 años de purgar sentencia por delitos contra la salud, homicidio y delincuencia organizada.
La dependencia revisa la cintas de las cámaras de video que hay en el perímetro de las instalación con la finalidad de determinar el grado de colusión de celadores y funcionarios de la cárcel. Garza García destacó que la forma en que huyeron sólo se explica por la colaboración de los carceleros, pues para saltar la barda usaron una escalera.
Subrayó que se distribuyeron las fichas de los internos evadidos a todas las autoridades del país con la intención de que se les ubique y recapture; además se reforzaron las medidas de seguridad en el municipio fronterizo de Reynosa para brindar mayor protección a sus pobladores.
Hugo Andrés Araujo recordó que en mayo pasado, el estado solicitó a la Federación resguardar las cárceles debido a la violencia, pero no hubo respuesta.
El secretario de Seguridad Pública estatal enfatizó que desde marzo se han fugado 201 reos de los penales de Tamaulipas.
Estos fugitivos se suman a los 12 del 5 de abril y a los 12 del 7 de julio. En Matamoros también ocurrió la fuga de 41 de sus internos el 26 de marzo.
La Procuraduría General de la República inició el acta circunstanciada AC/PGR/TAMPS/REY-II/459/2010, por los delitos que resulten de la fuga.
Por la noche, la Secretaría de Gobernación informó que su titular, José Francisco Blake, matiene comunicación constante con el gobernador Eugenio Hernández, y la Policía Federal brinda vigilancia perimetral en la cárcel de Reynosa.
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