AFP
Con la caída 3-2 de Uruguay ante Alemania por el tercer puesto se acabó la acción de Sudamérica en el Mundial, que mostró crecimiento en la Celeste, en semis tras 40 años, y en Paraguay, en cuartos por primera vez, mientras los grandes Argentina y Brasil se estancaron.
El otro representante, Chile, quedó con sensación agridulce: doce años después de su última aparición en el torneo superó la primera ronda, pero en octavos se estrelló con la realidad y la ''canarinha'' (3-0).
Comparando a todos con su última presentación en Copa del Mundo, el equipo de Diego Maradona y el de Dunga volvieron a decepcionar a sus hinchas al caer en cuartos de final, como en Alemania-2006, otra vez frente a elencos europeos.
Los albicelestes repitieron frustración ante los germanos (4-0), en tanto que los auriverdes cayeron con Holanda (2-1), que se disfrazó de la Francia de Zidane.
Los dos volvieron a quedarse en las puertas de semifinales, un mínimo que se imponen cada vez que viajan a una Copa del Mundo. Pero entre sus deudas pendientes, además, queda el ''fracaso'' de sus estrellas Leo Messi y Kaká.
El jugador del Barcelona anduvo bien en el despegue del once albiceleste, pero en el primer partido que debía aparecer ante un grande, se pinchó y desnudó también la falta de cintura de Maradona para cambiar una historia desde el banquillo, como sucedió en eliminatorias ante Bolivia (6-1) y Brasil (3-1).
En el caso de Brasil, la tristeza de estrellarse en cuartos fue doblemente dolorosa porque Dunga impuso un estilo de juego que jamás sedujo a los hinchas, que echaron de menos la magia de Kaká, quien "jamás pudo recuperarse de su temporada aquejada por lesiones", como reconoció el médico del plantel.
Dunga se marchó y Brasil espera un cambio. Maradona aún piensa sobre su continuidad.
Para Chile, volver al Mundial después de 12 años de ausencias resultó un alivio. Mucho más alegre resultó su primera victoria desde Chile-1962, venciendo en su debut en Sudáfrica-2010 a Honduras y redoblando la apuesta con victoria 1-0 ante Suiza. Pero después se desinfló con dos derrotas.
Primero España en la fase de grupos (2-1) y luego Brasil en octavos de final (3-0), con eliminación en idéntica etapa que en su último Mundial de Francia-1998, cuando cayó ante la canarinha (4-1), por lo que tampoco hubo mejoría.
"Sabemos atacar, pero debemos aprender a marcar mejor", reconoció su capitán Claudio Bravo, agregando que "este es un plantel joven y puede progresar en el futuro". Mucho dependerá de la luz de Alexis Sánchez, su luz en el ataque.
En cambio, Paraguay y Uruguay regresan con una sorisa.
La Albirroja hizo historia al alcanzar por primera vez los cuartos de final y le dio un susto enorme a España, finalista ante Holanda del Mundial, al que le pudo haber ganado si Óscar ''Tacuara'' Cardozo anotaba un penal en momentos en que la Roja se desesperaba y no podía romper su muro.
El equipo de Gerardo Martino, que ya confirmó su continuidad al menos hasta la Copa América de Argentina-2011, deberá mejorar en ataque, tras confirmar que tiene la mejor defensa de Sudamérica.
Uruguay fue la selección de mejor resultado en Sudáfrica-2010. Había llegado con angustia al ecuménico gracias a un repechaje frente a Costa Rica, con un plantel joven que puede llegar enriquecido a Brasil-2014, con Luis Suárez, Nico Lodeiro o el portero Fernando Muslera a la cabeza. Y ojalá Diego Forlán, su gran estrella (5 goles).
El sufrimiento parece haber marcado a este plantel de Oscar Tabárez que salió vivo de muchas batallas y puso a mal traer a las potencias, aunque su cuenta pendiente es ganarle a alguna de ellas en el futuro, tras caer con Holanda (3-2) en semis y Alemania (3-2) en duelo por el tercer puesto.
Sin embargo, este punto le incumbe a todos, pues Sudamérica se marcha con seis derrotas, tres empates y tres victorias frente a Europa en el balance general, pero cinco caídas en instancia decisiva.
Y atención, pues es el segundo ecuménico seguido que los sudamericanos se despiden sin vencer a una potencia europea. La última vez fue Brasil, en la final de 2002 ante Alemania (2-0).
Con la caída 3-2 de Uruguay ante Alemania por el tercer puesto se acabó la acción de Sudamérica en el Mundial, que mostró crecimiento en la Celeste, en semis tras 40 años, y en Paraguay, en cuartos por primera vez, mientras los grandes Argentina y Brasil se estancaron.
El otro representante, Chile, quedó con sensación agridulce: doce años después de su última aparición en el torneo superó la primera ronda, pero en octavos se estrelló con la realidad y la ''canarinha'' (3-0).
Comparando a todos con su última presentación en Copa del Mundo, el equipo de Diego Maradona y el de Dunga volvieron a decepcionar a sus hinchas al caer en cuartos de final, como en Alemania-2006, otra vez frente a elencos europeos.
Los albicelestes repitieron frustración ante los germanos (4-0), en tanto que los auriverdes cayeron con Holanda (2-1), que se disfrazó de la Francia de Zidane.
Los dos volvieron a quedarse en las puertas de semifinales, un mínimo que se imponen cada vez que viajan a una Copa del Mundo. Pero entre sus deudas pendientes, además, queda el ''fracaso'' de sus estrellas Leo Messi y Kaká.
El jugador del Barcelona anduvo bien en el despegue del once albiceleste, pero en el primer partido que debía aparecer ante un grande, se pinchó y desnudó también la falta de cintura de Maradona para cambiar una historia desde el banquillo, como sucedió en eliminatorias ante Bolivia (6-1) y Brasil (3-1).
En el caso de Brasil, la tristeza de estrellarse en cuartos fue doblemente dolorosa porque Dunga impuso un estilo de juego que jamás sedujo a los hinchas, que echaron de menos la magia de Kaká, quien "jamás pudo recuperarse de su temporada aquejada por lesiones", como reconoció el médico del plantel.
Dunga se marchó y Brasil espera un cambio. Maradona aún piensa sobre su continuidad.
Para Chile, volver al Mundial después de 12 años de ausencias resultó un alivio. Mucho más alegre resultó su primera victoria desde Chile-1962, venciendo en su debut en Sudáfrica-2010 a Honduras y redoblando la apuesta con victoria 1-0 ante Suiza. Pero después se desinfló con dos derrotas.
Primero España en la fase de grupos (2-1) y luego Brasil en octavos de final (3-0), con eliminación en idéntica etapa que en su último Mundial de Francia-1998, cuando cayó ante la canarinha (4-1), por lo que tampoco hubo mejoría.
"Sabemos atacar, pero debemos aprender a marcar mejor", reconoció su capitán Claudio Bravo, agregando que "este es un plantel joven y puede progresar en el futuro". Mucho dependerá de la luz de Alexis Sánchez, su luz en el ataque.
En cambio, Paraguay y Uruguay regresan con una sorisa.
La Albirroja hizo historia al alcanzar por primera vez los cuartos de final y le dio un susto enorme a España, finalista ante Holanda del Mundial, al que le pudo haber ganado si Óscar ''Tacuara'' Cardozo anotaba un penal en momentos en que la Roja se desesperaba y no podía romper su muro.
El equipo de Gerardo Martino, que ya confirmó su continuidad al menos hasta la Copa América de Argentina-2011, deberá mejorar en ataque, tras confirmar que tiene la mejor defensa de Sudamérica.
Uruguay fue la selección de mejor resultado en Sudáfrica-2010. Había llegado con angustia al ecuménico gracias a un repechaje frente a Costa Rica, con un plantel joven que puede llegar enriquecido a Brasil-2014, con Luis Suárez, Nico Lodeiro o el portero Fernando Muslera a la cabeza. Y ojalá Diego Forlán, su gran estrella (5 goles).
El sufrimiento parece haber marcado a este plantel de Oscar Tabárez que salió vivo de muchas batallas y puso a mal traer a las potencias, aunque su cuenta pendiente es ganarle a alguna de ellas en el futuro, tras caer con Holanda (3-2) en semis y Alemania (3-2) en duelo por el tercer puesto.
Sin embargo, este punto le incumbe a todos, pues Sudamérica se marcha con seis derrotas, tres empates y tres victorias frente a Europa en el balance general, pero cinco caídas en instancia decisiva.
Y atención, pues es el segundo ecuménico seguido que los sudamericanos se despiden sin vencer a una potencia europea. La última vez fue Brasil, en la final de 2002 ante Alemania (2-0).
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