Gómez Urrutia recordó que ya en ocasiones anteriores se había querido desvirtuar el sentido de la huelga, argumentando saqueos y pillajes
"La toma por sorpresa de la mina de Cananea es una agresión más en contra de los mineros que han luchado por sus garantías y constituye un nuevo acto de servilismo hacia una empresa (Grupo México)", señaló Napoleón Gómez Urrutia, líder de los mineros.
En entrevista con Carmen Aristegui, Gómez Urrutia recordó que ya en ocasiones anteriores se había querido desvirtuar el sentido de la huelga, argumentando saqueos y pillajes que en la mina nunca existieron.
Para el líder minero resulta grotesco e indignante que el gobierno ponga a disposición de Grupo México una mina que mantenía una huelga justa y legal.
Urrutia señaló que se mantendrán en la lucha y mencionó que desde ayer los mineros determinaron no aceptar las liquidaciones de una empresa ‘explotadora’.
Respecto a la mina de Pasta de Conchos, la cual fue tomada ayer también por la policía, el líder minero dijo que aunque el gobierno federal no quiera admitir que sí mando a tomar la mina, se sigue escudando en las fuerzas estatales.
Finalmente, el dirigente exiliado hoy en la ciudad de Vancouver, Canadá, recordó las malas condiciones en las que se encontraba la mina de Pasta de Conchos al momento de la explosión y resaltó la necesidad de recuperar los cuerpos de los 63 mineros que se mantienen atrapados. (El Semanario Agencia, ESA)
"La toma por sorpresa de la mina de Cananea es una agresión más en contra de los mineros que han luchado por sus garantías y constituye un nuevo acto de servilismo hacia una empresa (Grupo México)", señaló Napoleón Gómez Urrutia, líder de los mineros.
En entrevista con Carmen Aristegui, Gómez Urrutia recordó que ya en ocasiones anteriores se había querido desvirtuar el sentido de la huelga, argumentando saqueos y pillajes que en la mina nunca existieron.
Para el líder minero resulta grotesco e indignante que el gobierno ponga a disposición de Grupo México una mina que mantenía una huelga justa y legal.
Urrutia señaló que se mantendrán en la lucha y mencionó que desde ayer los mineros determinaron no aceptar las liquidaciones de una empresa ‘explotadora’.
Respecto a la mina de Pasta de Conchos, la cual fue tomada ayer también por la policía, el líder minero dijo que aunque el gobierno federal no quiera admitir que sí mando a tomar la mina, se sigue escudando en las fuerzas estatales.
Finalmente, el dirigente exiliado hoy en la ciudad de Vancouver, Canadá, recordó las malas condiciones en las que se encontraba la mina de Pasta de Conchos al momento de la explosión y resaltó la necesidad de recuperar los cuerpos de los 63 mineros que se mantienen atrapados. (El Semanario Agencia, ESA)
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