Se menciona a Marco Antonio Bernal, Manuel Muñoz y Óscar Almaraz entre los más fuertes para convertise en candidato sustituto por el gobierno de Tamaulipas.
CDN
Marco Antonio Bernal, así como Manuel Muñoz Cano y Óscar Almaraz Smers, éstos dos ex colaboradores del gobernador Eugenio Hernández Flores, son tres de los priistas que se perfilan para sustituir a Rodolfo Torre Cantú como candidato a la gubernatura del estado de Tamaulipas.
Entre los priistas que estudian el escenario después del asesinato de Torre Cantú se barajan estos nombres por razones legales y de proyección; ninguno de los tres es funcionario público en activo; dos de ellos, Bernal y Muñoz, fueron señalados en su momento como posibles aspirantes a sustituir a Hernández Flores.
Marco Antonio Bernal es el actual presidente de la Fundación Colosio a nivel nacional, Muñoz es el coordinador de campaña del fallecido aspirante priista y Almaraz es candidato a diputado local y familiar de Enrique Blackmore Smer, fallecido en el mismo atentado contra Torre.
En dos ocasiones, Marco Antonio Bernal se quedó en la raya para convertirse en candidato. La primera fue cuando en 1998 el entonces mandatario estatal Manuel Cavazos Lerma se rehusó a darle su apoyo a Bernal, que entonces estaba en los cuernos de la luna, y se decidió por Tomás Yarrington.
Dos años antes de la nominación para el candidato tamaulipeco, Bernal había conseguido que la dirigencia del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) firmara los únicos acuerdos de paz que el gobierno federal consiguió del grupo armado.
Al no conseguir la nominación, Bernal optó por el bajo perfil, hasta que volvió a la palestra en la LX Legislatura como diputado plurinominal.
Además, pertenece al primer círculo del senador Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa Patrón, quien sustituyó a Bernal en la dirigencia de la CNOP, hace apenas unos días.
La otra ocasión en que Bernal no pudo llegar fue el año pasado, cuando Hernández Flores decidió que Torre Cantú, su secretario de Salud, sería un buen candidato para buscar la gubernatura tamaulipeca en las elecciones del próximo 4 de julio.
Manuel Muñoz Cano, a su vez, fue secretario particular de Eugenio Hernández y luego secretario de Desarrollo Social. El coordinador de campaña de Torre Cantú es hijo del ex diputado desaparecido Manuel Muñoz Rocha, implicado en el asesinato de José Francisco Ruiz Massieu, en 1994, cuando éste era secretario general del PRI.
Muñoz ha sido un hombre cercano al gobernador desde que éste fue presidente municipal de Ciudad Victoria; a principios de este año, cuando se barajaban nombres, se le mencionó.
Óscar Almaraz,es candidato a diputado local por el décimo cuarto distrito electoral. En el gobierno de Hernández Flores fue primero contralor gubernamental, y luego pasó a ser secretario de Finanzas, desde donde saltó a su carrera política electoral.
Bernal es de una generación de políticos anterior a la de Muñoz y Almaraz; Marco Antonio tiene 57 años, Manuel 40 y Óscar 42.
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Marco Antonio Bernal, así como Manuel Muñoz Cano y Óscar Almaraz Smers, éstos dos ex colaboradores del gobernador Eugenio Hernández Flores, son tres de los priistas que se perfilan para sustituir a Rodolfo Torre Cantú como candidato a la gubernatura del estado de Tamaulipas.
Entre los priistas que estudian el escenario después del asesinato de Torre Cantú se barajan estos nombres por razones legales y de proyección; ninguno de los tres es funcionario público en activo; dos de ellos, Bernal y Muñoz, fueron señalados en su momento como posibles aspirantes a sustituir a Hernández Flores.
Marco Antonio Bernal es el actual presidente de la Fundación Colosio a nivel nacional, Muñoz es el coordinador de campaña del fallecido aspirante priista y Almaraz es candidato a diputado local y familiar de Enrique Blackmore Smer, fallecido en el mismo atentado contra Torre.
En dos ocasiones, Marco Antonio Bernal se quedó en la raya para convertirse en candidato. La primera fue cuando en 1998 el entonces mandatario estatal Manuel Cavazos Lerma se rehusó a darle su apoyo a Bernal, que entonces estaba en los cuernos de la luna, y se decidió por Tomás Yarrington.
Dos años antes de la nominación para el candidato tamaulipeco, Bernal había conseguido que la dirigencia del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) firmara los únicos acuerdos de paz que el gobierno federal consiguió del grupo armado.
Al no conseguir la nominación, Bernal optó por el bajo perfil, hasta que volvió a la palestra en la LX Legislatura como diputado plurinominal.
Además, pertenece al primer círculo del senador Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa Patrón, quien sustituyó a Bernal en la dirigencia de la CNOP, hace apenas unos días.
La otra ocasión en que Bernal no pudo llegar fue el año pasado, cuando Hernández Flores decidió que Torre Cantú, su secretario de Salud, sería un buen candidato para buscar la gubernatura tamaulipeca en las elecciones del próximo 4 de julio.
Manuel Muñoz Cano, a su vez, fue secretario particular de Eugenio Hernández y luego secretario de Desarrollo Social. El coordinador de campaña de Torre Cantú es hijo del ex diputado desaparecido Manuel Muñoz Rocha, implicado en el asesinato de José Francisco Ruiz Massieu, en 1994, cuando éste era secretario general del PRI.
Muñoz ha sido un hombre cercano al gobernador desde que éste fue presidente municipal de Ciudad Victoria; a principios de este año, cuando se barajaban nombres, se le mencionó.
Óscar Almaraz,es candidato a diputado local por el décimo cuarto distrito electoral. En el gobierno de Hernández Flores fue primero contralor gubernamental, y luego pasó a ser secretario de Finanzas, desde donde saltó a su carrera política electoral.
Bernal es de una generación de políticos anterior a la de Muñoz y Almaraz; Marco Antonio tiene 57 años, Manuel 40 y Óscar 42.
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