Martha Anaya / Crónica de Política
Siendo tan colmilludos, tan dinosáuricos…; dándoselas de que ellos sí saben gobernar y cómo hacer las cosas, no pocos priistas –y no priistas—se preguntan cómo es que les han pescado a varios de sus gobernadores con los dedos en la puerta.
-Les cambiaron la jugada…-, dice Roberto Madrazo.
Sí, comenta, suponían y esperaban que el gobierno federal actuaría para tratar de impedir el arrasador triunfo que parecía dibujarse hace meses para el PRI en las elecciones del próximo 4 de julio. “Pero no la esperaban por ahí”.
Según el ex presidente del tricolor, sus compañeros se habían preparado a fondo y habían desplegado estrategias en torno al tema de la seguridad. “Pensaban que vendrían por ahí los golpes”, que desde el gobierno les buscarían a los candidatos por el lado de la corrupción, de estar coludidos con el narcotráfico…, que intentarían otro “michoacanazo”.
Pero no fue así. No al menos con los candidatos del PRI (aunque sí se aplicó algo semejante en Quintana Roo, con el candidato del PRD-PT-Convergencia, Gregorio Sánchez.)
-Nos aplicaron una receta similar a la que utilizaron hace seis años frente a López Obrador, sólo que esta vez son audio escándalos en lugar de video escándalos-, diría otra priista de la vieja escuela.
-¿No es ridículo?
-¡Es de párvulos!, ¿acaso no sabemos todos que tienen intervenidos nuestros teléfonos, cómo puedes decir tantas cosas por teléfono? Hay cosas que no se hablan por este medio. Lo sabes tú, lo sé yo, lo sabemos todos…
Tal parece que les ganó la soberbia a los señores gobernadores, que se sintieron sobrados y volvieron a lo de siempre: a la displicencia, al autoritarismo, al manejo impune del poder, apunté.
Los interlocutores guardaron silencio.
El hecho es que hoy lo priistas están preocupados por lo que pueda acontecer el próximo 4 de julio.
Roberto Madrazo ve una situación “compleja” en tres estados: Oaxaca, Puebla y Veracruz .
El más “peligroso” desde su punto de vista: Oaxaca, la entidad gobernada por Ulises Ruiz y donde el candidato de la alianza opositora al priismo, Gabino Cué, “lleva diez años en campaña” . Esa es la elección que más le preocupa.
Puebla, apunta, también la ve “en peligro” . Y en Veracruz habremos de ver una lucha de “tigre contra tigre”.
Y todo ello, resume el ex candidato presidencial, porque “nos cambiaron la jugada”.
Siendo tan colmilludos, tan dinosáuricos…; dándoselas de que ellos sí saben gobernar y cómo hacer las cosas, no pocos priistas –y no priistas—se preguntan cómo es que les han pescado a varios de sus gobernadores con los dedos en la puerta.
-Les cambiaron la jugada…-, dice Roberto Madrazo.
Sí, comenta, suponían y esperaban que el gobierno federal actuaría para tratar de impedir el arrasador triunfo que parecía dibujarse hace meses para el PRI en las elecciones del próximo 4 de julio. “Pero no la esperaban por ahí”.
Según el ex presidente del tricolor, sus compañeros se habían preparado a fondo y habían desplegado estrategias en torno al tema de la seguridad. “Pensaban que vendrían por ahí los golpes”, que desde el gobierno les buscarían a los candidatos por el lado de la corrupción, de estar coludidos con el narcotráfico…, que intentarían otro “michoacanazo”.
Pero no fue así. No al menos con los candidatos del PRI (aunque sí se aplicó algo semejante en Quintana Roo, con el candidato del PRD-PT-Convergencia, Gregorio Sánchez.)
-Nos aplicaron una receta similar a la que utilizaron hace seis años frente a López Obrador, sólo que esta vez son audio escándalos en lugar de video escándalos-, diría otra priista de la vieja escuela.
-¿No es ridículo?
-¡Es de párvulos!, ¿acaso no sabemos todos que tienen intervenidos nuestros teléfonos, cómo puedes decir tantas cosas por teléfono? Hay cosas que no se hablan por este medio. Lo sabes tú, lo sé yo, lo sabemos todos…
Tal parece que les ganó la soberbia a los señores gobernadores, que se sintieron sobrados y volvieron a lo de siempre: a la displicencia, al autoritarismo, al manejo impune del poder, apunté.
Los interlocutores guardaron silencio.
El hecho es que hoy lo priistas están preocupados por lo que pueda acontecer el próximo 4 de julio.
Roberto Madrazo ve una situación “compleja” en tres estados: Oaxaca, Puebla y Veracruz .
El más “peligroso” desde su punto de vista: Oaxaca, la entidad gobernada por Ulises Ruiz y donde el candidato de la alianza opositora al priismo, Gabino Cué, “lleva diez años en campaña” . Esa es la elección que más le preocupa.
Puebla, apunta, también la ve “en peligro” . Y en Veracruz habremos de ver una lucha de “tigre contra tigre”.
Y todo ello, resume el ex candidato presidencial, porque “nos cambiaron la jugada”.
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