Afp, Dpa, Reuters y Notimex
El presidente estadunidense, Barack Obama, ordenó hoy triplicar el número de efectivos que operan en las zonas costeras del Golfo de México, afectadas o amenazadas por la marea negra, y aseguró a los residentes que no serán abandonados, en su segunda visita al estado de Luisiana para inspeccionar los daños causados por el derrame petrolero.
"No lo abandonaremos. No los dejaremos solos", dijo el mandatario a los habitantes de la costa del golfo en un discurso desde una playa en Grand Isle, delante de la costa de Luisiana, especialmente afectada por el vertido de petróleo tras el accidente del 20 de abril en una plataforma marina de la British Petroleum (BP).
El almirante Thad Allen, de la Guardia Costera y principal interlocutor de Obama en la región, declaró a una televisora que la BP ha logrado contener la fuga de petróleo gracias a la inyección de fluidos pesados y desperdicios metálicos. Explicó que el verdadero reto es mantener el lodo encima del crudo hasta el punto que se pueda tapar con cemento.
Sin embargo, reconoció que aun después no quedará claro si la fuga se mantendrá sellada, por lo que las siguientes 12 o 18 horas van a ser críticas y, por supuesto, todos vamos a estar monitoreando la situación muy de cerca”. Subrayó que "estamos muy alentados por el hecho de que pudieron inyectar el lodo. Pero el interrogante es si podemos sostenerlo".
Por parte de la trasnacional británica, el vocero Andrew Gowers informó que la operación top kill, que consiste en bombear barro en las dos fugas de crudo, logró evitar que el petróleo se siga vertiendo en el mar, pero advirtió que "matar" definitivamente las vías llevará "todavía más tiempo". Este día, dijo, las operaciones seguían "avanzando" después de que este proceso comenzó el miércoles.
El director de la petrolera británica, Tony Hayward, quien reconoció que el derrame petrolero "es claramente una catástrofe ambiental", señaló que el éxito de la operación de sellado de la fuga no se sabrá antes de 48 horas. Apuntó que se aplican dos métodos en este objetivo, primero bombear lodo y, en segundo término, inyectar residuos diversos, y que los pasos han sido "positivos".
Obama dijo que todavía no se sabe si el procedimiento será exitoso pero que si se logra, "obviamente será buena noticia", mientras que en la mañana la compañía afirmó que ya fluye bastante menos crudo y gas al océano
El gobernante recorrió localidades del delta del río Misisipi, en Luisiana sur, donde anunció su decisión de "triplicar los efectivos allí donde el petróleo alcanzó las costas o donde debería llegar en las próximas 24 horas", impartiendo órdenes al respecto al almirante Allen como coordinador de las operaciones en el Golfo de México y a la secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano.
Foto
Trabajadores a bordo de un remolcador limpian una mancha de contaminante en la localidad de Pass a Loutre, LuisianaFoto Ap
Explicó que la medida permitirá al gobierno intensificar el esfuerzo, ya "histórico", contra el desastre originado a 80 kilómetros de la costa de Luisiana, tras la explosión y posterior hundimiento de la plataforma Deepwater Horizon, operada por la BP. En ese sentido, prometió a los residentes: "No serán abandonados. Los medios podrán cansarse de la historia. Pero nosotros no".
"Sé que ustedes, los habitantes de la costa del golfo, sufrieron demasiadas pruebas y tragedias", dijo en alusión al huracán Katrina en 2005, que tuvo pésima respuesta y gestión del gobierno del entonces presidente George W. Bush. "Vamos a estar con esto todos los días hasta que la fuga haya terminado, hasta que la costa esté limpia y sus comunidades hayan recuperado la normalidad", agregó.
El estado de Luisiana, afectado ya en unos 240 kilómetros de sus costas, recibió permiso federal para ejecutar un plan de barreras de arena para contrarrestar los efectos de la marea negra.
La Cámara de Representantes aprobó hoy una iniciativa para cuadruplicar el impuesto al barril de petróleo y así financiar un fondo de reparación por daños causados por derrames de crudo. El proyecto propone aumentar de ocho a 34 centavos el barril con miras a recaudar unos 12 mil millones de dólares en 10 años para el fondo de garantía, que hoy suma mil 500 millones de dólares.
El Departamento del Interior anunció que el jefe de la Oficina de Manejo de Tierras, Bob Abbey, será el nuevo director del Servicio de Manejo de Minerales tras la repentina "renuncia" de Elizabeth Birnbaum, la primera "cabeza" del gobierno de Obama que cae a raíz de la marea negra.
En La Habana se informó hoy que banderas rojas fueron izadas en las playas del oeste de Cuba esta semana cerrando brevemente el paso a los nadadores en medio de rumores de que el derrame de petróleo en el Golfo de México estaba empujando a los tiburones hacia aguas de la isla.
Pero medios oficiales de prensa desmintieron los rumores y las playas fueron reabiertas, pero el incidente dejó de manifiesto el temor de que el masivo derrame podría llegar a la isla y causar estragos en un país relativamente a salvo de los males ambientales causados por la modernidad.
"Cuba, como todos los países del área, está preocupada por esta situación", dijo Osmani Borrego Fernández, director del Parque Nacional de Guanahacabibes. Indicó que se mantienen en alerta, pero que hasta ahora no hay evidencias de petróleo.
El presidente estadunidense, Barack Obama, ordenó hoy triplicar el número de efectivos que operan en las zonas costeras del Golfo de México, afectadas o amenazadas por la marea negra, y aseguró a los residentes que no serán abandonados, en su segunda visita al estado de Luisiana para inspeccionar los daños causados por el derrame petrolero.
"No lo abandonaremos. No los dejaremos solos", dijo el mandatario a los habitantes de la costa del golfo en un discurso desde una playa en Grand Isle, delante de la costa de Luisiana, especialmente afectada por el vertido de petróleo tras el accidente del 20 de abril en una plataforma marina de la British Petroleum (BP).
El almirante Thad Allen, de la Guardia Costera y principal interlocutor de Obama en la región, declaró a una televisora que la BP ha logrado contener la fuga de petróleo gracias a la inyección de fluidos pesados y desperdicios metálicos. Explicó que el verdadero reto es mantener el lodo encima del crudo hasta el punto que se pueda tapar con cemento.
Sin embargo, reconoció que aun después no quedará claro si la fuga se mantendrá sellada, por lo que las siguientes 12 o 18 horas van a ser críticas y, por supuesto, todos vamos a estar monitoreando la situación muy de cerca”. Subrayó que "estamos muy alentados por el hecho de que pudieron inyectar el lodo. Pero el interrogante es si podemos sostenerlo".
Por parte de la trasnacional británica, el vocero Andrew Gowers informó que la operación top kill, que consiste en bombear barro en las dos fugas de crudo, logró evitar que el petróleo se siga vertiendo en el mar, pero advirtió que "matar" definitivamente las vías llevará "todavía más tiempo". Este día, dijo, las operaciones seguían "avanzando" después de que este proceso comenzó el miércoles.
El director de la petrolera británica, Tony Hayward, quien reconoció que el derrame petrolero "es claramente una catástrofe ambiental", señaló que el éxito de la operación de sellado de la fuga no se sabrá antes de 48 horas. Apuntó que se aplican dos métodos en este objetivo, primero bombear lodo y, en segundo término, inyectar residuos diversos, y que los pasos han sido "positivos".
Obama dijo que todavía no se sabe si el procedimiento será exitoso pero que si se logra, "obviamente será buena noticia", mientras que en la mañana la compañía afirmó que ya fluye bastante menos crudo y gas al océano
El gobernante recorrió localidades del delta del río Misisipi, en Luisiana sur, donde anunció su decisión de "triplicar los efectivos allí donde el petróleo alcanzó las costas o donde debería llegar en las próximas 24 horas", impartiendo órdenes al respecto al almirante Allen como coordinador de las operaciones en el Golfo de México y a la secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano.
Foto
Trabajadores a bordo de un remolcador limpian una mancha de contaminante en la localidad de Pass a Loutre, LuisianaFoto Ap
Explicó que la medida permitirá al gobierno intensificar el esfuerzo, ya "histórico", contra el desastre originado a 80 kilómetros de la costa de Luisiana, tras la explosión y posterior hundimiento de la plataforma Deepwater Horizon, operada por la BP. En ese sentido, prometió a los residentes: "No serán abandonados. Los medios podrán cansarse de la historia. Pero nosotros no".
"Sé que ustedes, los habitantes de la costa del golfo, sufrieron demasiadas pruebas y tragedias", dijo en alusión al huracán Katrina en 2005, que tuvo pésima respuesta y gestión del gobierno del entonces presidente George W. Bush. "Vamos a estar con esto todos los días hasta que la fuga haya terminado, hasta que la costa esté limpia y sus comunidades hayan recuperado la normalidad", agregó.
El estado de Luisiana, afectado ya en unos 240 kilómetros de sus costas, recibió permiso federal para ejecutar un plan de barreras de arena para contrarrestar los efectos de la marea negra.
La Cámara de Representantes aprobó hoy una iniciativa para cuadruplicar el impuesto al barril de petróleo y así financiar un fondo de reparación por daños causados por derrames de crudo. El proyecto propone aumentar de ocho a 34 centavos el barril con miras a recaudar unos 12 mil millones de dólares en 10 años para el fondo de garantía, que hoy suma mil 500 millones de dólares.
El Departamento del Interior anunció que el jefe de la Oficina de Manejo de Tierras, Bob Abbey, será el nuevo director del Servicio de Manejo de Minerales tras la repentina "renuncia" de Elizabeth Birnbaum, la primera "cabeza" del gobierno de Obama que cae a raíz de la marea negra.
En La Habana se informó hoy que banderas rojas fueron izadas en las playas del oeste de Cuba esta semana cerrando brevemente el paso a los nadadores en medio de rumores de que el derrame de petróleo en el Golfo de México estaba empujando a los tiburones hacia aguas de la isla.
Pero medios oficiales de prensa desmintieron los rumores y las playas fueron reabiertas, pero el incidente dejó de manifiesto el temor de que el masivo derrame podría llegar a la isla y causar estragos en un país relativamente a salvo de los males ambientales causados por la modernidad.
"Cuba, como todos los países del área, está preocupada por esta situación", dijo Osmani Borrego Fernández, director del Parque Nacional de Guanahacabibes. Indicó que se mantienen en alerta, pero que hasta ahora no hay evidencias de petróleo.
Comentarios