Apro Un comando de sicarios ejecutó a nueve miembros de una familia de campesinos indígenas, la madrugada de este martes en la región de La Montaña.
La masacre ocurrió en la comunidad mixteca de Totomixtlahuaca, municipio de Tlacoapa, donde cerca de las 4:30 horas el grupo armado irrumpió al poblado a bordo de dos camionetas.
Luego, se dirigieron a la casa de la familia Ramírez Crispín y asesinaron a Agustín Ramírez Gálvez, de 53 años; su esposa Natividad Crispín Gálvez, de 48, y a sus siete hijos, entre ellos dos menores de edad.
El reporte oficial destaca que el resto de las víctimas fueron identificadas como Pedro, de 36 años; Norma, de 26; Agustín, de 23 años; Alma Rosa, de 19; Noelia, de 18; Alberto, de 14, y Nancy, de 12 años.
Según el testimonio de autoridades locales, los nueve miembros de esta familia indígena fueron acribillados justo cuando dormían.
Los vecinos atemorizados salieron de sus casas para verificar lo ocurrido hasta que el comando se retiró del poblado.
El parte oficial indica que los pobladores denunciaron que el múltiple crimen podría estar relacionado con actividades de siembra y trasiego de enervantes, ya que grupos de narcotraficantes han venido utilizando terrenos comunales para la siembra de amapola y mariguana.
La masacre ocurrió en la comunidad mixteca de Totomixtlahuaca, municipio de Tlacoapa, donde cerca de las 4:30 horas el grupo armado irrumpió al poblado a bordo de dos camionetas.
Luego, se dirigieron a la casa de la familia Ramírez Crispín y asesinaron a Agustín Ramírez Gálvez, de 53 años; su esposa Natividad Crispín Gálvez, de 48, y a sus siete hijos, entre ellos dos menores de edad.
El reporte oficial destaca que el resto de las víctimas fueron identificadas como Pedro, de 36 años; Norma, de 26; Agustín, de 23 años; Alma Rosa, de 19; Noelia, de 18; Alberto, de 14, y Nancy, de 12 años.
Según el testimonio de autoridades locales, los nueve miembros de esta familia indígena fueron acribillados justo cuando dormían.
Los vecinos atemorizados salieron de sus casas para verificar lo ocurrido hasta que el comando se retiró del poblado.
El parte oficial indica que los pobladores denunciaron que el múltiple crimen podría estar relacionado con actividades de siembra y trasiego de enervantes, ya que grupos de narcotraficantes han venido utilizando terrenos comunales para la siembra de amapola y mariguana.
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