Teodoro Rentería Arróyave
En Copenhague, donde asiste a la reunión mundial del Medio Ambiente, el presidente Felipe Calderón Hinojosa se ufanó de la caza de “El Jefe de Jefes”, Arturo Beltrán Leyva, sin que esto quiera decir que otros, como Joaquín “El Chapo Guzmán” también festinen la muerte del que fuera su lugarteniente y después su principal enemigo en el reparto del trasiego de la droga.
El Jefe del Ejecutivo consideró la muerte del líder del cartel de “Los Beltrán Leyva” como un golpe contundente a una de las más peligrosas bandas criminales de México y del Continente Americano al presumir, esa es la palabra correcta, ante periodistas extranjeros, textual: “que en el marco de la estrategia integral de seguridad que hemos emprendido desde el inicio de mi administración esta acción representa un logro muy importante para el pueblo y el gobierno de México y un golpe contundente contra una de las organizaciones criminales, más peligrosas de México y del continente”
Y anunció que el gobierno federal seguirá en esta lucha para hacer de México un país de leyes y de libertades donde las familias puedan vivir tranquilas y en paz en nuestro país.
Nadie puede dejar de reconocer que efectivamente se trata de un golpe contundente al crimen organizado esta acción que llevó a la muerte a Arturo Beltrán Leyva y a seis de sus más leales lugartenientes, lo que se pregunta uno es porqué las autoridades enfilaron sus baterías solo contra el Cartel de los “Beltrán Leyva” y las organizaciones afines: “Los Zetas” y “La Familia de Michoacán” y no contra el cartel de Sinaloa que dirige Joaquín El Chapo Guzmán” uno de los delincuentes más buscados por todas las policías del mundo después de que se le facilitara su huida de la cárcel de Puente Grande del Estado de Jalisco.
Prácticamente, toda la refriega ocurrida este miércoles en uno de los más exclusivos fraccionamientos de la capital de Morelos, fue narrada en vivo por los corresponsales y al través de las frecuencias de la República de Radio Fórmula. En concreto esto fue lo que se narro:
En un operativo que duró más de 6 días que se inició en Puebla y culminó la noche anterior, la Marina Armada de México abatió al capo Arturo Beltrán Leyva, “El Jefe de Jefes”, “El Barbas”, “La Muerte” o “El Botas Blancas”, líder del cártel de “Los Beltrán Leyva”
“El Jefe de Jefes, quedó abatido, desangrado sobre el piso del lujoso condominio Altituded, juntamente con seis de sus más leales lugartenientes. El inmueble ubicado sobre la calle Alta Tensión en Cuernavaca, Morelos, donde el capo estableció su feudo y centro de operaciones fue el escenario de una refriega que duró más de 4 horas, y en la cual también resultó muerto un uniformado y un civil, además de algunas detenciones.
La cacería llevó a los militares a Ahuatepec, Morelos cuando Arturo Beltrán Leyva asistió a una “narcopreposada” con el Rey del Acordeón, Ramón Ayala y los Cadetes de Linares, los cuales aún permanecen arraigados. En esa ocasión falló su captura pero le siguieron el rastro; ayer al ubicarlo, las fuerzas armadas por aire y tierra lo cercaron y se inicio la refriega en la cual los presuntos delincuentes estallaron granadas de fragmentación para propiciar la huida de “El Jefe de Jefes”, sin embargo la estrategia militar triunfo y quedó abatido uno de los capos más buscados por las autoridades de México y Estados Unidos
Desde luego, fueron horas de angustia de la población que escuchaba los intensos tableteos de las ametralladoras de uno y otro bando, que sólo era interrumpidos, de cuando en cuando, por los estallidos de granadas de fragmentación que los pistoleros lanzaban.
Insistimos, nadie puede dejar de reconocer el golpe contundente que dieron las autoridades con la persecución y muerte de “El Jefe de Jefes”, Arturo Beltrán Leyva y seis de sus lugartenientes, sin embargo la pregunta sigue en el aire en cuanto al cartel de Sinaloa cuyo líder es Joaquín el Chapo Guzmán: ¿Qué sigue?
En Copenhague, donde asiste a la reunión mundial del Medio Ambiente, el presidente Felipe Calderón Hinojosa se ufanó de la caza de “El Jefe de Jefes”, Arturo Beltrán Leyva, sin que esto quiera decir que otros, como Joaquín “El Chapo Guzmán” también festinen la muerte del que fuera su lugarteniente y después su principal enemigo en el reparto del trasiego de la droga.
El Jefe del Ejecutivo consideró la muerte del líder del cartel de “Los Beltrán Leyva” como un golpe contundente a una de las más peligrosas bandas criminales de México y del Continente Americano al presumir, esa es la palabra correcta, ante periodistas extranjeros, textual: “que en el marco de la estrategia integral de seguridad que hemos emprendido desde el inicio de mi administración esta acción representa un logro muy importante para el pueblo y el gobierno de México y un golpe contundente contra una de las organizaciones criminales, más peligrosas de México y del continente”
Y anunció que el gobierno federal seguirá en esta lucha para hacer de México un país de leyes y de libertades donde las familias puedan vivir tranquilas y en paz en nuestro país.
Nadie puede dejar de reconocer que efectivamente se trata de un golpe contundente al crimen organizado esta acción que llevó a la muerte a Arturo Beltrán Leyva y a seis de sus más leales lugartenientes, lo que se pregunta uno es porqué las autoridades enfilaron sus baterías solo contra el Cartel de los “Beltrán Leyva” y las organizaciones afines: “Los Zetas” y “La Familia de Michoacán” y no contra el cartel de Sinaloa que dirige Joaquín El Chapo Guzmán” uno de los delincuentes más buscados por todas las policías del mundo después de que se le facilitara su huida de la cárcel de Puente Grande del Estado de Jalisco.
Prácticamente, toda la refriega ocurrida este miércoles en uno de los más exclusivos fraccionamientos de la capital de Morelos, fue narrada en vivo por los corresponsales y al través de las frecuencias de la República de Radio Fórmula. En concreto esto fue lo que se narro:
En un operativo que duró más de 6 días que se inició en Puebla y culminó la noche anterior, la Marina Armada de México abatió al capo Arturo Beltrán Leyva, “El Jefe de Jefes”, “El Barbas”, “La Muerte” o “El Botas Blancas”, líder del cártel de “Los Beltrán Leyva”
“El Jefe de Jefes, quedó abatido, desangrado sobre el piso del lujoso condominio Altituded, juntamente con seis de sus más leales lugartenientes. El inmueble ubicado sobre la calle Alta Tensión en Cuernavaca, Morelos, donde el capo estableció su feudo y centro de operaciones fue el escenario de una refriega que duró más de 4 horas, y en la cual también resultó muerto un uniformado y un civil, además de algunas detenciones.
La cacería llevó a los militares a Ahuatepec, Morelos cuando Arturo Beltrán Leyva asistió a una “narcopreposada” con el Rey del Acordeón, Ramón Ayala y los Cadetes de Linares, los cuales aún permanecen arraigados. En esa ocasión falló su captura pero le siguieron el rastro; ayer al ubicarlo, las fuerzas armadas por aire y tierra lo cercaron y se inicio la refriega en la cual los presuntos delincuentes estallaron granadas de fragmentación para propiciar la huida de “El Jefe de Jefes”, sin embargo la estrategia militar triunfo y quedó abatido uno de los capos más buscados por las autoridades de México y Estados Unidos
Desde luego, fueron horas de angustia de la población que escuchaba los intensos tableteos de las ametralladoras de uno y otro bando, que sólo era interrumpidos, de cuando en cuando, por los estallidos de granadas de fragmentación que los pistoleros lanzaban.
Insistimos, nadie puede dejar de reconocer el golpe contundente que dieron las autoridades con la persecución y muerte de “El Jefe de Jefes”, Arturo Beltrán Leyva y seis de sus lugartenientes, sin embargo la pregunta sigue en el aire en cuanto al cartel de Sinaloa cuyo líder es Joaquín el Chapo Guzmán: ¿Qué sigue?
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