A Puerta Cerrada / Marcela Gómez Zalce
• El que se ríe se lleva y el que se lleva se aguanta
• Y la página se cerró…
Lo más difícil de revertir, mi estimado, es una tendencia. Con la novedad de que después de semanas de investigaciones y pruebas forenses, las autoridades han determinado que la muerte de Michael Jackson fue un homicidio perpetrado por su médico Conrad Murray, quien suministró un coctelito fatal de fármacos donde predominó el Profopol, que finalmente apagó la luz del Rey del Pop, lo que hundió (again) el diagnóstico del doctorcito Calderón, quien en un lamentable espectáculo afirmó días después que Michael murió por drogadicto en aquél ridículo discurso presidencial en el cual mostró su distintiva intolerancia al referirse que los jóvenes se refugian en las drogas porque no creen en Dios ocasionando una ola de sugestivas críticas.
Eran aquellos tiempos previos al proceso del 5 de julio en los que Felipe se encontraba más confiado y seguro de que el PAN lograría el triunfo en varias gubernaturas (San Luis Potosí y Querétaro se daban por ganadas), además de apostar por una mayoría relativa en la Cámara de Diputados. Donde la crisis económica ni de broma se encontraba en el tablero del análisis de expertos, especialistas e ilustres editorialistas. Esa época en donde Calderón y su cuñado Juan Ignacio Zavala movían los hilos del entonces líder del PAN, Germán Martínez quien, arropado por Los Pinos, enseñaba los dientes cual mastín obediente…
Ese periodo previo al 5 de julio donde el gymboree (con minúsculas) en el poder (del no poder) desarrollaba la estrategia de la guerra sucia, la descalificación, el descrédito y el encono contra el PRI. Donde la herramienta del Internet debutó como punta de lanza para sugestivos videos que descalificaban, no sólo a gobiernos priistas y a los entonces inquilinos de Los Pinos (curiosamente sin tocar a Ernesto Zedillo). Discursos donde se insinuaba que el PRI y el narcotráfico eran cómplices y socios. Culpables de sembrar la semilla que hoy es una peligrosa hiedra que amenaza nuestra frágil seguridad nacional.
Esa temporada en la que Beatriz Paredes y sus expertos no quisieron entrarle al toro por los cuernos mientras crecía la molestia, el disgusto y la contrariedad entre las lacritas tricolores que esperaban ansiosos la llegada del 6 de julio para poner un nuevo leverage en el (des)gobierno de Felipe Calderón, quien avaló la polarización deseoso de ¿repetir? el haiga sido como haiga sido… que no se cumplió.
El 5 de julio millones de mexicanos, my friend, votaron en contra del PAN y no a favor del PRI… como parecen creer algunas figuras tricolores. La debacle azul fue devastadora para Felipe quien, hasta hoy, no ha acusado recibo del mensaje de la ciudadanía, harta de la disfuncionalidad presidencial y del talento para (des)gobernar en medio de lo que hoy se conoce como el peor shock económico en los últimos 30 años.
Y para documentar el cinismo y la hipocresía del PRI, resulta que Manlio Fabio Beltrones pactó en Los Pinos con Felipe Calderón cerrar la página de los pasados comicios ante la urgencia de un trabajo conjunto entre ambos poderes.
¡¡¡Chingooooón!!!
Beltrones y el PRI —que con el silencio su dirigencia otorgó el beneplácito del arreglón— le dieron el espaldarazo y la certificación a la guerra sucia emprendida por el PAN y Los Pinos. La misma que los orilló a interponer ante el ife (también con minúsculas) el mayor número de quejas por las campañas negras de calumnia y difamación. Seis semanas después cierran la página electoral (¿a cambio de qué?) con encerronas y pactos, refrendando el uso de originales videos que denostaron, denigraron, insultaron y ofendieron los gobiernos desde Miguel de la Madrid hasta Carlos Salinas, pasando por López Portillo, Díaz Ordaz, Echeverría… ese PRI de hoy cuyos protagonistas son del PRI de ayer.
La señal, mi estimado, no podría ser más insolente en momentos donde con el PVEM son mayoría absoluta para poner orden en el desorden. Pero no. Mejor pactar bajo el argumento de la responsabilidad… la misma con que justificaron la entronización de Felipe en la protesta de su Toma aquél convulso diciembre pensando que los mexicanos somos unos imbéciles.
Y ya con el antecedente de este 2009, con reglas escritas (porque las no escritas las enterraron) y los límites claros rumbo al 2012, my friend, el PRI le seguirá diciendo a Felipe que se faje los pantalones y éste contestará que el próximo presidente será un narco y ahí la llevamos. Nadie se despeina, todos se acomodan, lo pasado es pasado y que siga la simulación…
Lamentable.
• El que se ríe se lleva y el que se lleva se aguanta
• Y la página se cerró…
Lo más difícil de revertir, mi estimado, es una tendencia. Con la novedad de que después de semanas de investigaciones y pruebas forenses, las autoridades han determinado que la muerte de Michael Jackson fue un homicidio perpetrado por su médico Conrad Murray, quien suministró un coctelito fatal de fármacos donde predominó el Profopol, que finalmente apagó la luz del Rey del Pop, lo que hundió (again) el diagnóstico del doctorcito Calderón, quien en un lamentable espectáculo afirmó días después que Michael murió por drogadicto en aquél ridículo discurso presidencial en el cual mostró su distintiva intolerancia al referirse que los jóvenes se refugian en las drogas porque no creen en Dios ocasionando una ola de sugestivas críticas.
Eran aquellos tiempos previos al proceso del 5 de julio en los que Felipe se encontraba más confiado y seguro de que el PAN lograría el triunfo en varias gubernaturas (San Luis Potosí y Querétaro se daban por ganadas), además de apostar por una mayoría relativa en la Cámara de Diputados. Donde la crisis económica ni de broma se encontraba en el tablero del análisis de expertos, especialistas e ilustres editorialistas. Esa época en donde Calderón y su cuñado Juan Ignacio Zavala movían los hilos del entonces líder del PAN, Germán Martínez quien, arropado por Los Pinos, enseñaba los dientes cual mastín obediente…
Ese periodo previo al 5 de julio donde el gymboree (con minúsculas) en el poder (del no poder) desarrollaba la estrategia de la guerra sucia, la descalificación, el descrédito y el encono contra el PRI. Donde la herramienta del Internet debutó como punta de lanza para sugestivos videos que descalificaban, no sólo a gobiernos priistas y a los entonces inquilinos de Los Pinos (curiosamente sin tocar a Ernesto Zedillo). Discursos donde se insinuaba que el PRI y el narcotráfico eran cómplices y socios. Culpables de sembrar la semilla que hoy es una peligrosa hiedra que amenaza nuestra frágil seguridad nacional.
Esa temporada en la que Beatriz Paredes y sus expertos no quisieron entrarle al toro por los cuernos mientras crecía la molestia, el disgusto y la contrariedad entre las lacritas tricolores que esperaban ansiosos la llegada del 6 de julio para poner un nuevo leverage en el (des)gobierno de Felipe Calderón, quien avaló la polarización deseoso de ¿repetir? el haiga sido como haiga sido… que no se cumplió.
El 5 de julio millones de mexicanos, my friend, votaron en contra del PAN y no a favor del PRI… como parecen creer algunas figuras tricolores. La debacle azul fue devastadora para Felipe quien, hasta hoy, no ha acusado recibo del mensaje de la ciudadanía, harta de la disfuncionalidad presidencial y del talento para (des)gobernar en medio de lo que hoy se conoce como el peor shock económico en los últimos 30 años.
Y para documentar el cinismo y la hipocresía del PRI, resulta que Manlio Fabio Beltrones pactó en Los Pinos con Felipe Calderón cerrar la página de los pasados comicios ante la urgencia de un trabajo conjunto entre ambos poderes.
¡¡¡Chingooooón!!!
Beltrones y el PRI —que con el silencio su dirigencia otorgó el beneplácito del arreglón— le dieron el espaldarazo y la certificación a la guerra sucia emprendida por el PAN y Los Pinos. La misma que los orilló a interponer ante el ife (también con minúsculas) el mayor número de quejas por las campañas negras de calumnia y difamación. Seis semanas después cierran la página electoral (¿a cambio de qué?) con encerronas y pactos, refrendando el uso de originales videos que denostaron, denigraron, insultaron y ofendieron los gobiernos desde Miguel de la Madrid hasta Carlos Salinas, pasando por López Portillo, Díaz Ordaz, Echeverría… ese PRI de hoy cuyos protagonistas son del PRI de ayer.
La señal, mi estimado, no podría ser más insolente en momentos donde con el PVEM son mayoría absoluta para poner orden en el desorden. Pero no. Mejor pactar bajo el argumento de la responsabilidad… la misma con que justificaron la entronización de Felipe en la protesta de su Toma aquél convulso diciembre pensando que los mexicanos somos unos imbéciles.
Y ya con el antecedente de este 2009, con reglas escritas (porque las no escritas las enterraron) y los límites claros rumbo al 2012, my friend, el PRI le seguirá diciendo a Felipe que se faje los pantalones y éste contestará que el próximo presidente será un narco y ahí la llevamos. Nadie se despeina, todos se acomodan, lo pasado es pasado y que siga la simulación…
Lamentable.
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