Advierten desinterés de jóvenes por estudiar o trabajar en AL

Notimex

La mitad de los jóvenes de América Latina y el Caribe están condenados a la pobreza porque no terminan los 12 años de escolaridad, tiempo mínimo requerido para superar esa barrera.

De acuerdo con un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), más de la mitad de los jóvenes entre 20 y 24 años, en la región no completan los 12 años de escuela mínima por falta de motivación.

El estudio del profesor-investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, Gonzalo A. Saraví, en colaboración con la Cepal, señaló que los jóvenes en Latinoamérica descartan al trabajo o la escuela como medio de movilidad social.

Se trata de un fenómeno más marcado en muchachos de los sectores más desfavorecidos socialmente, quienes ahora piensan más en el consumo material o simbólico, elementos que les dan identidad para ganarse la inclusión social.

El documento destacó que debido a las dificultades económicas a que se enfrentan en prácticamente toda la región, los jóvenes descartan a la educación secundaria como elemento para mejorar sus condiciones de vida.

En el caso del mercado de trabajo, los jóvenes se muestran desencantados "ante la extendida precariedad laboral, inestabilidad y bajos ingresos que resultan en trayectorias laborales estancadas en la pobreza".

De acuerdo con entrevistas hechas por el autor con jóvenes mexicanos pertenecientes a los sectores más desfavorecidos, la escuela les "aburre" o bien tienen la sensación de "estar sin saber para qué".

Mencionó que en el caso de Perú, los muchachos también han perdido el interés para estudiar o trabajar y experimentan incertidumbre e inactividad.

La situación es similar en Brasil, donde los jóvenes habitantes de las favelas de Río de Janeiro no se interesan en estudiar, porque observan subempleo o desempleo con familiares y amigos que sí estudiaron.

De acuerdo con Saraví, la crisis del sentido de la escuela y el trabajo ha provocado la aparición de mayor migración, actividades delictivas e ilícitas y conductas evasivas, por lo que los dilemas que se plantean para la agenda pública adquieren mayor complejidad y urgencia.

Comentarios