Boletín UNAM-DGCS-294
Ciudad Universitaria
* El saqueo de material arqueológico y el clima húmedo del sitio La Joya de San Martín Garabato, complican la preservación del monumento
* Annick Daneels del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, dirige un proyecto que aportará datos sobre el periodo Clásico del Centro de Veracruz
En el sitio La Joya de San Martín Garabato, arqueólogos de la UNAM, encabezados por la doctora Annick Daneels del Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA), avanzan en el rescate de una pirámide hecha totalmente de barro que data de hace mil 800 años.
Al igual que El Tajín, la estructura corresponde a la cultura del Clásico del Centro de Veracruz y fue creada por un grupo olmeca con características culturales propias, explicó la titular del estudio (que cuenta con el aval del INAH), Annick Daneels.
Los principales obstáculos que enfrentan los expertos son: el saqueo por parte de trabajadores de una ladrillera, quienes extraen partes de la pirámide como material para construcciones modernas, y el clima húmedo de la región que dificulta la preservación del barro antiguo.
Fachada de un edificio monumental
“La fachada que estamos rescatando representa el cinco por ciento de lo que fue la mole original. El daño se debe a la extracción de tierra para ladrillo y relleno para fraccionamientos”, detalló Daneels.
El frontispicio en cuestión, es una subestructura de la pirámide principal del Clásico Tardío (700-1000 d.C.) que medía entre 22 y 25 metros de alto, según los informes existentes.
“Para comparar, la Pirámide de los Nichos de El Tajín es de 19 metros y la construcción en la que se trabaja actualmente mide 10 metros de alto, tiene cuatro escalinatas y es probable que haya sido construida entre los años 200 y 300 de nuestra era”, expuso Daneels.
“El estudio regional en La Joya inició en 1981 y las excavaciones en 2004. Por tratarse de un centro de primer rango y capital política en el periodo Clásico, a través de la reconstrucción de la secuencia constructiva fue posible determinar la antigüedad de los arreglos arquitectónicos asociados con dos sistemas de organización política.”
La pirámide se registró en el marco de un proyecto arqueológico en la cuenca baja del Jamada-Cotaxtla, iniciado en 1981 como parte de la Misión Arqueológica Belga en México, “aunque ya estaba avalada por el INAH desde 1934”, aclaró la investigadora.
Desde que la fachada fue liberada en mayo de 2008, la Dirección Nacional de Registro de Monumentos y Zonas Arqueológicas delimitó las áreas con vestigios estructurales conservados. Desde entonces, se han suspendido los trabajos de la ladrillera en esos perímetros.
“En las áreas de rellenos de la plaza, cuya estratigrafía ya fue registrada, se continúa con la extracción de bloques para construcción, única fuente de ingreso de los pobladores”, apuntó la universitaria.
Luego de presentar este proyecto en un congreso en Estados Unidos, la doctora belga viajará a Europa para entrevistarse con otros especialistas en investigación y restauración.
En Grenoble, Francia, la académica visitará el centro de investigación CRATerre-ENSAG, y en Italia se reunirá con especialistas del Politécnico de Torino (con quienes elabora un proyecto de financiamiento europeo), y con expertos del Centro Internacional para el Estudio de la Preservación y la Restauración de la Propiedad Cultural (ICCROM), en Roma.
“Las labores continuarán con un arqueólogo en campo y la asesoría del especialista Luis Fernando Guerrero Baca, de la UAM Xochimilco, para estudiar la técnica de arquitectura de tierra en trópico húmedo”, concluyó Daneels.
Ciudad Universitaria
* El saqueo de material arqueológico y el clima húmedo del sitio La Joya de San Martín Garabato, complican la preservación del monumento
* Annick Daneels del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, dirige un proyecto que aportará datos sobre el periodo Clásico del Centro de Veracruz
En el sitio La Joya de San Martín Garabato, arqueólogos de la UNAM, encabezados por la doctora Annick Daneels del Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA), avanzan en el rescate de una pirámide hecha totalmente de barro que data de hace mil 800 años.
Al igual que El Tajín, la estructura corresponde a la cultura del Clásico del Centro de Veracruz y fue creada por un grupo olmeca con características culturales propias, explicó la titular del estudio (que cuenta con el aval del INAH), Annick Daneels.
Los principales obstáculos que enfrentan los expertos son: el saqueo por parte de trabajadores de una ladrillera, quienes extraen partes de la pirámide como material para construcciones modernas, y el clima húmedo de la región que dificulta la preservación del barro antiguo.
Fachada de un edificio monumental
“La fachada que estamos rescatando representa el cinco por ciento de lo que fue la mole original. El daño se debe a la extracción de tierra para ladrillo y relleno para fraccionamientos”, detalló Daneels.
El frontispicio en cuestión, es una subestructura de la pirámide principal del Clásico Tardío (700-1000 d.C.) que medía entre 22 y 25 metros de alto, según los informes existentes.
“Para comparar, la Pirámide de los Nichos de El Tajín es de 19 metros y la construcción en la que se trabaja actualmente mide 10 metros de alto, tiene cuatro escalinatas y es probable que haya sido construida entre los años 200 y 300 de nuestra era”, expuso Daneels.
“El estudio regional en La Joya inició en 1981 y las excavaciones en 2004. Por tratarse de un centro de primer rango y capital política en el periodo Clásico, a través de la reconstrucción de la secuencia constructiva fue posible determinar la antigüedad de los arreglos arquitectónicos asociados con dos sistemas de organización política.”
La pirámide se registró en el marco de un proyecto arqueológico en la cuenca baja del Jamada-Cotaxtla, iniciado en 1981 como parte de la Misión Arqueológica Belga en México, “aunque ya estaba avalada por el INAH desde 1934”, aclaró la investigadora.
Desde que la fachada fue liberada en mayo de 2008, la Dirección Nacional de Registro de Monumentos y Zonas Arqueológicas delimitó las áreas con vestigios estructurales conservados. Desde entonces, se han suspendido los trabajos de la ladrillera en esos perímetros.
“En las áreas de rellenos de la plaza, cuya estratigrafía ya fue registrada, se continúa con la extracción de bloques para construcción, única fuente de ingreso de los pobladores”, apuntó la universitaria.
Luego de presentar este proyecto en un congreso en Estados Unidos, la doctora belga viajará a Europa para entrevistarse con otros especialistas en investigación y restauración.
En Grenoble, Francia, la académica visitará el centro de investigación CRATerre-ENSAG, y en Italia se reunirá con especialistas del Politécnico de Torino (con quienes elabora un proyecto de financiamiento europeo), y con expertos del Centro Internacional para el Estudio de la Preservación y la Restauración de la Propiedad Cultural (ICCROM), en Roma.
“Las labores continuarán con un arqueólogo en campo y la asesoría del especialista Luis Fernando Guerrero Baca, de la UAM Xochimilco, para estudiar la técnica de arquitectura de tierra en trópico húmedo”, concluyó Daneels.
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