ÍNDICE POLÍTICO / FRANCISCO RODRÍGUEZ
En una exacta / foto del diario / señor ministro / del imposible / vi en pleno gozo / y en plena euforia / y en plena risa / su rostro simple / seré curioso / señor ministro / de qué se ríe / de qué se ríe
Mario Benedetti (+)
LA IMAGEN DE FELIPE Calderón entregando la cepa de la influenza a un funcionario de la Organización Mundial de la Salud es la peor de todas las promociones turísticas que esta fallida Administración pudiera realizar, aún sin proponérselo.
Destacada en las primeras planas de los diarios de casi todo el país, y supongo que en algunas del resto del planeta, el sonriente Calderón pareciera confirmar a la humanidad –a la que pretendidamente ha salvado de una terrible pandemia--, que sí, que el virus de la influenza porcina sí surgió de nuestro territorio… que sí, que podrían tener razón quienes al inicio de esta temporada maldita llamaron al padecimiento "influenza mexicana"… que sí, que es altamente riesgoso visitar al país en el que esta nueva enfermedad ha dejado la más larga estela de fallecimientos.
Obligado que se entregara dicha cepa, en afán de colaborar con aquellos que ahora mismo están dedicados a la formulación de una vacuna que cuando menos neutralice al ahora conocido virus A-H1N1, pero de ahí a publicitar tal evento como si se tratara de la entrega de un diploma hay una gran distancia.
Se trata de la enésima evidencia de que el ocupante de Los Pinos y sus más próximos colaboradores no atinan una sola. Y no, no es nada más un problema de comunicación, tampoco de comunicación política, sino de política misma. ¿Cómo encargar a cualquiera la promoción de, por ejemplo, el chocolate blanco, si como ingredientes de le entregan chiles verdes, cebollas moradas y tomates agrios?
Ciertos medios tampoco ayudan a limpiar de este veneno respiratorio a la imagen turística del país. Hace casi una semana, y por puro accidente pues no acostumbro a sintonizar esa emisión, observé el show matutino que el llamado Canal de las Estrellas difunde en calidad de noticiero. Casi al finalizar, la sucesión de otras imágenes: en las calles, sobre estatuas, dentro de las instalaciones de Televisa, cubrebocas de todo colores y con diferentes "decorados", transmitiéndose vía satélite a todos los puntos de la geografía planetaria que captan la señal. Muy chistocitos. Muy irresponsables.
Tanto el señor Calderón, como este medio dizque de comunicación, le están dando la puntilla a la tercera actividad económica –tal vez la cuarta, si consideramos a los dineros que acarrea el narcotráfico— generadora de divisas, sí, pero sobremanera de cada vez más escasos empleos.
¿Qué sabor de boca habrán dejado en los trabajadores de la industria turística que han perdido sus fuentes de ingresos en los últimos días, la imagen de Calderón entregando la cepa y el muy ocurrente reportaje de la televisora de avenida Chapultepec?
¿Agradecerán este tipo de promoción los empleados de los hoteles que uno a uno cierran ya por todo el país? ¿Y las aerolíneas, no nada más domésticas, que cada vez cancelan más y más vuelos a nuestros destinos turísticos?
Ante ello, lo invito a preguntarnos, ¿de qué habrán de servir los mil 200 millones de pesos –unos 92 millones de dólares-- que, apenas el domingo, anunció Rodolfo Elizondo como inversión "para impulsar una campaña que promueva los atractivos turísticos nacionales?
Para nada, si esta anti-promoción a cargo del mismísimo señor Calderón es todavía más costosa en términos de empleo y reactivación económica.
¿La cepa que entregó Calderón a la OMS es mexicana?
Todo indica que no. Ayer mismo, justo cuando iniciaba la reunión que sobre el tema convocara el organismo mundial, se daba a conocer la presencia del virus en Japón, sobre pacientes que no salieron de ese país en los últimos meses y que, por supuesto, no habían tocado suelo azteca ni mucho menos respirado nuestro ambiente.
Pero acá, dedicado a la tarea de salvar a la humanidad, es el propio ocupante de Los Pinos el que, con sus acciones propagandísticas a favor del PAN, o simplemente de autopromoción a su cada vez más alicaída imagen dice al mundo todo lo contrario: la cepa es mexicana. Por eso la entrega a la OMS. Para continuar con la justiciera tarea de defender al planeta entero… aunque a los mexicanos nos lleve la tía de las muchachas, ¿o no?
Índice Flamígero: Seguimos bastos. El señor Calderón, quien dice emocionarse con los grandes retos, está realizado: "…a pesar de que México ha sido puesto a prueba, en serio, con adversidades significativas, que cada una de manera aislada hubiera hecho fracturarse las estructuras de una nación sin la fortaleza que tiene México, también es cierto que aún enfrentando juntas esas adversidades los mexicanos no sólo estamos de pie, sino que estamos saliendo adelante". ¡Qué emoción!
*** IMPORTANTE *** Revoluciones es un proyecto de información alternativa sin fines de lucro, para mantenernos en línea requerimos de tu apoyo. Puedes ayudarnos haciendo un deposito bancario, por mínimo que sea, hazlo en el banco HSBC, al número de cuenta 6271254999 a nombre de Samuel R. García o en transferencia electrónica abonando al número Clabe: 021180062712549990. Gracias.
En una exacta / foto del diario / señor ministro / del imposible / vi en pleno gozo / y en plena euforia / y en plena risa / su rostro simple / seré curioso / señor ministro / de qué se ríe / de qué se ríe
Mario Benedetti (+)
LA IMAGEN DE FELIPE Calderón entregando la cepa de la influenza a un funcionario de la Organización Mundial de la Salud es la peor de todas las promociones turísticas que esta fallida Administración pudiera realizar, aún sin proponérselo.
Destacada en las primeras planas de los diarios de casi todo el país, y supongo que en algunas del resto del planeta, el sonriente Calderón pareciera confirmar a la humanidad –a la que pretendidamente ha salvado de una terrible pandemia--, que sí, que el virus de la influenza porcina sí surgió de nuestro territorio… que sí, que podrían tener razón quienes al inicio de esta temporada maldita llamaron al padecimiento "influenza mexicana"… que sí, que es altamente riesgoso visitar al país en el que esta nueva enfermedad ha dejado la más larga estela de fallecimientos.
Obligado que se entregara dicha cepa, en afán de colaborar con aquellos que ahora mismo están dedicados a la formulación de una vacuna que cuando menos neutralice al ahora conocido virus A-H1N1, pero de ahí a publicitar tal evento como si se tratara de la entrega de un diploma hay una gran distancia.
Se trata de la enésima evidencia de que el ocupante de Los Pinos y sus más próximos colaboradores no atinan una sola. Y no, no es nada más un problema de comunicación, tampoco de comunicación política, sino de política misma. ¿Cómo encargar a cualquiera la promoción de, por ejemplo, el chocolate blanco, si como ingredientes de le entregan chiles verdes, cebollas moradas y tomates agrios?
Ciertos medios tampoco ayudan a limpiar de este veneno respiratorio a la imagen turística del país. Hace casi una semana, y por puro accidente pues no acostumbro a sintonizar esa emisión, observé el show matutino que el llamado Canal de las Estrellas difunde en calidad de noticiero. Casi al finalizar, la sucesión de otras imágenes: en las calles, sobre estatuas, dentro de las instalaciones de Televisa, cubrebocas de todo colores y con diferentes "decorados", transmitiéndose vía satélite a todos los puntos de la geografía planetaria que captan la señal. Muy chistocitos. Muy irresponsables.
Tanto el señor Calderón, como este medio dizque de comunicación, le están dando la puntilla a la tercera actividad económica –tal vez la cuarta, si consideramos a los dineros que acarrea el narcotráfico— generadora de divisas, sí, pero sobremanera de cada vez más escasos empleos.
¿Qué sabor de boca habrán dejado en los trabajadores de la industria turística que han perdido sus fuentes de ingresos en los últimos días, la imagen de Calderón entregando la cepa y el muy ocurrente reportaje de la televisora de avenida Chapultepec?
¿Agradecerán este tipo de promoción los empleados de los hoteles que uno a uno cierran ya por todo el país? ¿Y las aerolíneas, no nada más domésticas, que cada vez cancelan más y más vuelos a nuestros destinos turísticos?
Ante ello, lo invito a preguntarnos, ¿de qué habrán de servir los mil 200 millones de pesos –unos 92 millones de dólares-- que, apenas el domingo, anunció Rodolfo Elizondo como inversión "para impulsar una campaña que promueva los atractivos turísticos nacionales?
Para nada, si esta anti-promoción a cargo del mismísimo señor Calderón es todavía más costosa en términos de empleo y reactivación económica.
¿La cepa que entregó Calderón a la OMS es mexicana?
Todo indica que no. Ayer mismo, justo cuando iniciaba la reunión que sobre el tema convocara el organismo mundial, se daba a conocer la presencia del virus en Japón, sobre pacientes que no salieron de ese país en los últimos meses y que, por supuesto, no habían tocado suelo azteca ni mucho menos respirado nuestro ambiente.
Pero acá, dedicado a la tarea de salvar a la humanidad, es el propio ocupante de Los Pinos el que, con sus acciones propagandísticas a favor del PAN, o simplemente de autopromoción a su cada vez más alicaída imagen dice al mundo todo lo contrario: la cepa es mexicana. Por eso la entrega a la OMS. Para continuar con la justiciera tarea de defender al planeta entero… aunque a los mexicanos nos lleve la tía de las muchachas, ¿o no?
Índice Flamígero: Seguimos bastos. El señor Calderón, quien dice emocionarse con los grandes retos, está realizado: "…a pesar de que México ha sido puesto a prueba, en serio, con adversidades significativas, que cada una de manera aislada hubiera hecho fracturarse las estructuras de una nación sin la fortaleza que tiene México, también es cierto que aún enfrentando juntas esas adversidades los mexicanos no sólo estamos de pie, sino que estamos saliendo adelante". ¡Qué emoción!
*** IMPORTANTE *** Revoluciones es un proyecto de información alternativa sin fines de lucro, para mantenernos en línea requerimos de tu apoyo. Puedes ayudarnos haciendo un deposito bancario, por mínimo que sea, hazlo en el banco HSBC, al número de cuenta 6271254999 a nombre de Samuel R. García o en transferencia electrónica abonando al número Clabe: 021180062712549990. Gracias.
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Saludos!!