¿Somos tan poca cosa?

Carlos Albert

Primero llega Nery Castillo a pretender regañar a la prensa mexicana, sin darse cuenta de que en sus argumentaciones pasa a fastidiar a todos los mexicanos diciéndole al periodista que la gran diferencia entre ellos es que mientras el periodista SE QUEDA AQUÍ Y NERY SE VA A JUGAR A EUROPA, o sea, nosotros estamos jodidos por quedarnos en México, país tercermundista, y él es lo máximo por irse a EUROPA.

Curiosamente Nery está en Europa, pero los últimos dos años casi no juega, y cuando lo hace es dentro de una de las Ligas de segundo o tercer nivel, la ucraniana, así que, efectivamente, Nery está en Europa, pero jugando en una Liga de medio pelo, nada como para presumir. Después llega Javier Aguirre al TRI y acepta la chamba, pero decide vivir en MIAMI, o sea, soy mexicano, voy al TRI, pero mejor vivo en otro país, eso no lo entiendo y menos de Javier, SI ESO LO HUBIESE DECIDIDO ERIKSSON, nos lo acabamos, a mí me suena raro, no me lo esperaría de Aguirre. ¿Seguridad?, ¿cercanía con su familia que quedara diseminada?, puede ser, pero no lo acabo de digerir, cada quien su vida, pero no deja de hacerme ruido, como entender que Aguirre llegue a l TRI por insinuación y amistad con el presidente de la República, según Jesús Martínez, y decida aceptar el puesto, pero al mismo tiempo, manda un mensaje subliminal que dice... sí acepto el TRI, pero ahí se ven, voy a vivir en Miami. Son dos desaires muy seguidos y muy marcados, ¿MÉXICO no es bueno ni para Nery ni para Aguirre?... ambos nos batearon gacho.

Y finalmente está lo de Manuel Vidrio, quien viene como segundo de Aguirre, y que con todo respeto no tiene ningún mérito para tan importante puesto. Vidrio no tiene experiencia para esa posición, o sea, otro menosprecio. ¿Por qué Javier no lo llevó a España y en cambio sí lo incrusta en el TRI?

P.D. ¿MÉXICO vale tan poco?, sí pero no, o no pero sí, ¿somos o no somos?

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