(PL) Las declaraciones del obispo de la Arquidiócesis de Durango, Héctor González, quien afirmó que Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera vive en Culiacán, capital de ese norteño estado, crean hoy un gran revuelo en medios políticos mexicanos. El religioso opinó ante la prensa duranguense que "todo el mundo sabe que El Chapo Guzmán vive aquí, más delante del municipio de Guanacevi, menos las autoridades".
El religioso manifestó que no se actúa con energía ante la situación de violencia ligada con el narcotráfico y en ese contexto aludió a la presencia en aquella entidad de uno de los líderes de cártel de Sinaloa.
El obispo de Durango añadió que la incertidumbre prevalece en diversos municipios del estado, como resultado de la presencia de grupos armados ligados con la delincuencia organizada.
Por otra parte, alertó sobre las presiones y amenazas de las bandas del narco contra los sacerdotes y toda la ciudadanía en general, aunque aclaró que no presentará una denuncia debido a que no esta convencido que tenga eficacia.
Sobre las declaraciones de González, el dirigente del oficialista Partido Acción Nacional (PAN) en Durango, Juan C. Gutiérrez, comentó que son valientes y que no es necesario que presente una denuncia formal sobre el paradero de Guzmán Loera.
Puntualizó que se trata de un prófugo de la justicia que tiene girada en su contra una orden de aprehensión y extradición hacia Estados Unidos.
El dirigente estadual del PAN dijo que la situación de seguridad pública en Durango se agravó y cada día crecen más los delitos allí, tras recordar que existe una recompensa para quienes aporten datos sobre los delincuentes más buscados del país.
Mientras tanto, el vocero del arzobispado mexicano, José de Jesús Aguilar, expresó aquí que las declaraciones del sacerdote González representan su opinión personal y no se traata de una posición oficial de la iglesia católica de la nación.
Asimismo, la Subprocuraduría de Investigaciones Especializadas en Delincuencia Organizada (SIEDO) consideró que si el prelado tiene información fidedigna del paradero de El Chapo, su deber es interponer una denuncia ante el Ministerio Público.
lac/fa
El religioso manifestó que no se actúa con energía ante la situación de violencia ligada con el narcotráfico y en ese contexto aludió a la presencia en aquella entidad de uno de los líderes de cártel de Sinaloa.
El obispo de Durango añadió que la incertidumbre prevalece en diversos municipios del estado, como resultado de la presencia de grupos armados ligados con la delincuencia organizada.
Por otra parte, alertó sobre las presiones y amenazas de las bandas del narco contra los sacerdotes y toda la ciudadanía en general, aunque aclaró que no presentará una denuncia debido a que no esta convencido que tenga eficacia.
Sobre las declaraciones de González, el dirigente del oficialista Partido Acción Nacional (PAN) en Durango, Juan C. Gutiérrez, comentó que son valientes y que no es necesario que presente una denuncia formal sobre el paradero de Guzmán Loera.
Puntualizó que se trata de un prófugo de la justicia que tiene girada en su contra una orden de aprehensión y extradición hacia Estados Unidos.
El dirigente estadual del PAN dijo que la situación de seguridad pública en Durango se agravó y cada día crecen más los delitos allí, tras recordar que existe una recompensa para quienes aporten datos sobre los delincuentes más buscados del país.
Mientras tanto, el vocero del arzobispado mexicano, José de Jesús Aguilar, expresó aquí que las declaraciones del sacerdote González representan su opinión personal y no se traata de una posición oficial de la iglesia católica de la nación.
Asimismo, la Subprocuraduría de Investigaciones Especializadas en Delincuencia Organizada (SIEDO) consideró que si el prelado tiene información fidedigna del paradero de El Chapo, su deber es interponer una denuncia ante el Ministerio Público.
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