- Outsourcing
- El pelotero catarrito
Carlos Fernández-Vega
La "moderna" y "sólida" banca que opera en el país, mayoritariamente de capital extranjero, decidió violar una ley mexicana, adicional a las que por "usos y costumbres" transgrede cotidianamente: la Federal del Trabajo, la cual fue depositada en el bote de la basura por los consorcios foráneos que del sistema financiero otrora nacional han hecho su paraíso.
En sólo tres meses (octubre a diciembre de 2008) la banca que opera en el país dio de baja a 56 mil 641 trabajadores, para "reacomodarlos", por medio del outsourcing, en diferentes empresas "prestadoras de servicios", con lo que evadió ("se liberó", dice) la responsabilidad laboral a la que la ley la obliga: contratos, pago de Infonavit e IMSS, antigüedad, aguinaldo, vacaciones, pensiones y jubilaciones y demás prestaciones. Simple y sencillamente las "borró" de sus balances y obligaciones, junto con la posibilidad de huelga, y de paso para ese mundo de empleados bancarios que se han quedado a merced de las subcontratistas, las cuales, como las propias instituciones financieras, no se caracterizan ni son precisamente famosas por acatar los ordenamientos legales.
De tiempo atrás se sabe que las instituciones bancarias recurren crecientemente al outsourcing (subcontratación o "terciarización") para aligerar su nómina, incrementar sus ganancias y descaradamente evadir la ley laboral, sin que autoridad alguna las frene. Era conocido, pues, pero la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (la encargada de supervisar el legal funcionamiento del sector financiero) por primera vez ha reconocido y oficializado tal circunstancia sin mayores complicaciones.
Si se atiende su reporte de septiembre de 2008, la CNBV aseguraba que poco más de 151 mil empleados trabajaban en la banca que opera en el país y en ella cobraban con, se supone, todas las prestaciones de ley. Sin embargo, en su informe de cierre de año, ya con el "catarrito" encima, el organismo dependiente de la Secretaría de Hacienda reconoce el hecho de la creciente subcontratación y el "desvío" de personal.
Así, en diciembre pasado de las 157 mil 14 personas oficialmente empleadas por la banca, 56 mil 641 (36 por ciento del total) despachan y cobran por fuera, toda vez que causaron baja en la nómina bancaria y han sido "contratados" por terceros ("prestadores de servicios"), es decir, empresas de outsourcing, incluso creadas ex profeso por las propias instituciones financieras para evadir la ley, sin que autoridad alguna se de por enterada. Y este "estilo" de relación laboral se utiliza en prácticamente todos los sectores de la actividad económica (con lo que además de ganar millones adicionales "matan" empleo formal), aunque el financiero es el campeón de campeones.
En el referido informe 2008, la CNBV reconoce que en el último mes del año el balance en la banca fue el siguiente: 100 mil 373 empleados formalmente contratados por los bancos ("sindicalizados" alrededor de 65 por ciento de ellos) y 56 mil 641 supuestamente "contratados" por "prestadoras de servicios". Tres meses atrás, en septiembre de ese mismo año, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores aseguraba que el personal formalmente contratado por la banca sumaba 151 mil 439 personas.
Un par de años atrás se denunció que alrededor de 20 por ciento del personal de las instituciones financieras formalmente había causado baja de la nómina bancaria y, en automático, engrosado la relación de personal de las "prestadoras de servicios". Ahora abiertamente se reconoce que la proporción se ha incrementado a 36 por ciento, cuando menos. Con ello, los consorcios bancarios ahorran millones de pesos en impuestos y prestaciones laborales, al tiempo que desaparecieron un fantasma que los horroriza: el derecho de sus trabajadores de emplazar a huelga y actuar en consecuencia.
A los que formalmente quedan en nómina bancaria se les ha incrementado la chamba, por el mismo salario y con idéntica amenaza: si te quejas te mandamos a las "prestadoras de servicios". En un año (2008), por ejemplo, se vieron en la necesidad de atender 22.5 millones de cuentas de captación adicionales y las urgencias y necesidades de mil 300 sucursales más. Quien reclama, al “outsourcing”, y si insiste, a la calle. ¿Y la Secretaría del Trabajo?: "golpeando" a los "enemigos" del inquilino de Los Pinos.
En menor o mayor proporción prácticamente todos los bancos utilizan el truco del "outsourcing" para evadir la Ley Federal del Trabajo, pero se dan casos verdaderamente llamativos, como el de la trasnacional española BBVA-Bancomer, la cual reconoce 27 mil 121 personas trabajando para su causa, pero acota: de ese universo, sólo una fue contratada por la institución y 27 mil 120 por una "prestadora de servicios". Es de suponer, aunque pueden existir errores de apreciación, que el único que fue específicamente contratado por y que cobra en Bancomer y que, se supone, tiene todas las prestaciones de ley, es el director general de la filial del Bilbao Vizcaya Argentaria; los demás, que arreen. Así, según las cifras de la CNBV, el 0.003 por ciento del personal al servicio de este banco está contratado en términos de ley y el resto fuera de, algo por demás notorio como para que la supuesta autoridad laboral ya lo hubiera registrado, impedido y sancionado. Pero no es así.
De los negocios oscuros y los manejos negros no podía quedar fuera el barón de los abonos chiquitos y los intereses de usura. Banco Azteca, propiedad de Ricardo Salinas Pliego, va más allá de Bancomer: de las 17 mil 994 personas reconocidas oficialmente que trabajan para su causa, todas, absolutamente todas, han sido "contratadas" por una "prestadora de servicios".
Lo mismo sucede con el Banco Inbursa, del catastrofista más rico del país: cero personal contratado por la institución de Carlos Slim y mil 544 por una "prestadora de servicios", de mil 544 posibles. Y al inventario se agregan los bancos chatarra Wal-Mart, Volkswagen, Autofin, Ahorro Famsa, Ve por Más, Regional, Compartamos (¡oremos!, porque es propiedad de los Legionarios de Cristo), entre otros.
Es la banca "moderna" y "sólida" (Calderón dixit) que trabaja por el bien de la patria, aunque no sea esta, desde luego.
Las rebanadas del pastel
Sólo a un acérrimo enemigo se le pudo ocurrir llevar al doctor "catarrito" a lanzar la primera bola en el Clásico Mundial de Beisbol, con la consecuente rechifla, y sólo al "pelotero" Carstens aceptar la invitación. De plano, no tiene remedio.
- El pelotero catarrito
Carlos Fernández-Vega
La "moderna" y "sólida" banca que opera en el país, mayoritariamente de capital extranjero, decidió violar una ley mexicana, adicional a las que por "usos y costumbres" transgrede cotidianamente: la Federal del Trabajo, la cual fue depositada en el bote de la basura por los consorcios foráneos que del sistema financiero otrora nacional han hecho su paraíso.
En sólo tres meses (octubre a diciembre de 2008) la banca que opera en el país dio de baja a 56 mil 641 trabajadores, para "reacomodarlos", por medio del outsourcing, en diferentes empresas "prestadoras de servicios", con lo que evadió ("se liberó", dice) la responsabilidad laboral a la que la ley la obliga: contratos, pago de Infonavit e IMSS, antigüedad, aguinaldo, vacaciones, pensiones y jubilaciones y demás prestaciones. Simple y sencillamente las "borró" de sus balances y obligaciones, junto con la posibilidad de huelga, y de paso para ese mundo de empleados bancarios que se han quedado a merced de las subcontratistas, las cuales, como las propias instituciones financieras, no se caracterizan ni son precisamente famosas por acatar los ordenamientos legales.
De tiempo atrás se sabe que las instituciones bancarias recurren crecientemente al outsourcing (subcontratación o "terciarización") para aligerar su nómina, incrementar sus ganancias y descaradamente evadir la ley laboral, sin que autoridad alguna las frene. Era conocido, pues, pero la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (la encargada de supervisar el legal funcionamiento del sector financiero) por primera vez ha reconocido y oficializado tal circunstancia sin mayores complicaciones.
Si se atiende su reporte de septiembre de 2008, la CNBV aseguraba que poco más de 151 mil empleados trabajaban en la banca que opera en el país y en ella cobraban con, se supone, todas las prestaciones de ley. Sin embargo, en su informe de cierre de año, ya con el "catarrito" encima, el organismo dependiente de la Secretaría de Hacienda reconoce el hecho de la creciente subcontratación y el "desvío" de personal.
Así, en diciembre pasado de las 157 mil 14 personas oficialmente empleadas por la banca, 56 mil 641 (36 por ciento del total) despachan y cobran por fuera, toda vez que causaron baja en la nómina bancaria y han sido "contratados" por terceros ("prestadores de servicios"), es decir, empresas de outsourcing, incluso creadas ex profeso por las propias instituciones financieras para evadir la ley, sin que autoridad alguna se de por enterada. Y este "estilo" de relación laboral se utiliza en prácticamente todos los sectores de la actividad económica (con lo que además de ganar millones adicionales "matan" empleo formal), aunque el financiero es el campeón de campeones.
En el referido informe 2008, la CNBV reconoce que en el último mes del año el balance en la banca fue el siguiente: 100 mil 373 empleados formalmente contratados por los bancos ("sindicalizados" alrededor de 65 por ciento de ellos) y 56 mil 641 supuestamente "contratados" por "prestadoras de servicios". Tres meses atrás, en septiembre de ese mismo año, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores aseguraba que el personal formalmente contratado por la banca sumaba 151 mil 439 personas.
Un par de años atrás se denunció que alrededor de 20 por ciento del personal de las instituciones financieras formalmente había causado baja de la nómina bancaria y, en automático, engrosado la relación de personal de las "prestadoras de servicios". Ahora abiertamente se reconoce que la proporción se ha incrementado a 36 por ciento, cuando menos. Con ello, los consorcios bancarios ahorran millones de pesos en impuestos y prestaciones laborales, al tiempo que desaparecieron un fantasma que los horroriza: el derecho de sus trabajadores de emplazar a huelga y actuar en consecuencia.
A los que formalmente quedan en nómina bancaria se les ha incrementado la chamba, por el mismo salario y con idéntica amenaza: si te quejas te mandamos a las "prestadoras de servicios". En un año (2008), por ejemplo, se vieron en la necesidad de atender 22.5 millones de cuentas de captación adicionales y las urgencias y necesidades de mil 300 sucursales más. Quien reclama, al “outsourcing”, y si insiste, a la calle. ¿Y la Secretaría del Trabajo?: "golpeando" a los "enemigos" del inquilino de Los Pinos.
En menor o mayor proporción prácticamente todos los bancos utilizan el truco del "outsourcing" para evadir la Ley Federal del Trabajo, pero se dan casos verdaderamente llamativos, como el de la trasnacional española BBVA-Bancomer, la cual reconoce 27 mil 121 personas trabajando para su causa, pero acota: de ese universo, sólo una fue contratada por la institución y 27 mil 120 por una "prestadora de servicios". Es de suponer, aunque pueden existir errores de apreciación, que el único que fue específicamente contratado por y que cobra en Bancomer y que, se supone, tiene todas las prestaciones de ley, es el director general de la filial del Bilbao Vizcaya Argentaria; los demás, que arreen. Así, según las cifras de la CNBV, el 0.003 por ciento del personal al servicio de este banco está contratado en términos de ley y el resto fuera de, algo por demás notorio como para que la supuesta autoridad laboral ya lo hubiera registrado, impedido y sancionado. Pero no es así.
De los negocios oscuros y los manejos negros no podía quedar fuera el barón de los abonos chiquitos y los intereses de usura. Banco Azteca, propiedad de Ricardo Salinas Pliego, va más allá de Bancomer: de las 17 mil 994 personas reconocidas oficialmente que trabajan para su causa, todas, absolutamente todas, han sido "contratadas" por una "prestadora de servicios".
Lo mismo sucede con el Banco Inbursa, del catastrofista más rico del país: cero personal contratado por la institución de Carlos Slim y mil 544 por una "prestadora de servicios", de mil 544 posibles. Y al inventario se agregan los bancos chatarra Wal-Mart, Volkswagen, Autofin, Ahorro Famsa, Ve por Más, Regional, Compartamos (¡oremos!, porque es propiedad de los Legionarios de Cristo), entre otros.
Es la banca "moderna" y "sólida" (Calderón dixit) que trabaja por el bien de la patria, aunque no sea esta, desde luego.
Las rebanadas del pastel
Sólo a un acérrimo enemigo se le pudo ocurrir llevar al doctor "catarrito" a lanzar la primera bola en el Clásico Mundial de Beisbol, con la consecuente rechifla, y sólo al "pelotero" Carstens aceptar la invitación. De plano, no tiene remedio.
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