Apro
En la disputa por esta plaza, sicarios de La Familia y de los Zetas cobraron 31 vidas, esto es, una cada 24 horas, una cifra récord, según las estadísticas oficiales.
Sólo entre el viernes y el domingo pasados, 11 personas perdieron la vida en el territorio guanajuatense.
En León, un comando acribilló a tres hombres en un restaurante ubicado a la entrada de la zona residencial Villa Verde.
Otra persona fue asesinada en Salamanca; el cuerpo fue encontrado sobre un camino entre las comunidades de Salamanca y Valle de Santiago.
El sábado 31, los cuerpos de tres hombres aparecieron a un costado de la carretera federal Salvatierra-Celaya. Otros tres cadáveres fueron encontrados en la misma zona, pero en la carretera México-Ciudad Juárez, entre los municipios de Celaya y Tarimoro.
Según los mensajes que fueron dejados en ambos casos, se trataba de presuntos miembros de La Familia, victimados por supuestos sicarios de Los Zetas.
El mismo sábado, una lengua --al parecer de bovino-- fue depositada al pie del asta bandera ubicada a la salida de Irapuato, sujeta con alfileres sobre una franela de color rojo.
Según la fiscal Claudia Jaramillo, quedó descartado que se tratara de una lengua humana, pero igual su aparición provocó una gran movilización policiaca en esa zona.
En el caso de los ejecutados, la Policía Ministerial encontró encima de los cadáveres cartulinas en las que presuntamente Los Zetas señalan a las víctimas como "extorsionadores, secuestradores y aprendices de terroristas" que formaban parte de La Familia Michoacana.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) dijo que el primer reporte que recibió –poco después de las siete de la mañana del sábado-- fue el de la aparición de los cadáveres de tres hombres tirados a un costado de la carretera federal Celaya-Salvatierra, a la altura de la comunidad Charco Largo.
Los tres hombres recibieron disparos de armas R-15 y AK-47; unos once casquillos percutidos fueron localizados por los peritos en el sitio.
Sobre los cuerpos se encontró una cartulina con esta leyenda: "Estos son gente de La Familia, secuestradores, extorsionadores y aprendices de terroristas. Atentamente, Los Zetas".
En una segunda cartulina, se les señala como "chapetes de La Familia que se dedican a la extorsión", y se mencionan tres apodos: El Rey, El Búho y El Enano.
Unos minutos más tarde se reportó la aparición de otras tres personas acribilladas, cuyos cuerpos estaban tirados a un costado de la carretera de cuota México-Ciudad Juárez, a la altura del kilómetro 47 (tramo Salamanca-Celaya).
Estas personas tenían los ojos vendados y las manos atadas, así como disparos en la cabeza. También tenían cartulinas encima, con las mismas frases --supuestamente atribuidas al cártel del Golfo--, que los ejecutados en la carretera Salvatierra-Celaya.
En este caso se logró identificar a las tres víctimas como Pedro Núñez Olivares, Moisés Aarón González Belman y Juan Luis Rodríguez del Castillo, con domicilios en Salamanca y quienes habían sido reportados como secuestrados desde el jueves.
Y el domingo, en Cuerámaro, otro hombre que había regresado de dejar a su familia en la iglesia de una comunidad vecina fue interceptado por sicarios que le dispararon con armas largas.
La víctima fue identificada como Isaías Madrigal Sierra, originario de la comunidad El Platanal, en Cuerámaro.
Cuando regresaba a su casa, luego de dejar a su familia en la iglesia de Tupátaro, fue interceptado por un grupo que portaba armas largas, según los testimonios. Madrigal Sierra recibió al menos una decena de impactos, aunque en el lugar se encontraron más de 40 casquillos de diversos calibres, entre ellos de AK-47.
En la disputa por esta plaza, sicarios de La Familia y de los Zetas cobraron 31 vidas, esto es, una cada 24 horas, una cifra récord, según las estadísticas oficiales.
Sólo entre el viernes y el domingo pasados, 11 personas perdieron la vida en el territorio guanajuatense.
En León, un comando acribilló a tres hombres en un restaurante ubicado a la entrada de la zona residencial Villa Verde.
Otra persona fue asesinada en Salamanca; el cuerpo fue encontrado sobre un camino entre las comunidades de Salamanca y Valle de Santiago.
El sábado 31, los cuerpos de tres hombres aparecieron a un costado de la carretera federal Salvatierra-Celaya. Otros tres cadáveres fueron encontrados en la misma zona, pero en la carretera México-Ciudad Juárez, entre los municipios de Celaya y Tarimoro.
Según los mensajes que fueron dejados en ambos casos, se trataba de presuntos miembros de La Familia, victimados por supuestos sicarios de Los Zetas.
El mismo sábado, una lengua --al parecer de bovino-- fue depositada al pie del asta bandera ubicada a la salida de Irapuato, sujeta con alfileres sobre una franela de color rojo.
Según la fiscal Claudia Jaramillo, quedó descartado que se tratara de una lengua humana, pero igual su aparición provocó una gran movilización policiaca en esa zona.
En el caso de los ejecutados, la Policía Ministerial encontró encima de los cadáveres cartulinas en las que presuntamente Los Zetas señalan a las víctimas como "extorsionadores, secuestradores y aprendices de terroristas" que formaban parte de La Familia Michoacana.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) dijo que el primer reporte que recibió –poco después de las siete de la mañana del sábado-- fue el de la aparición de los cadáveres de tres hombres tirados a un costado de la carretera federal Celaya-Salvatierra, a la altura de la comunidad Charco Largo.
Los tres hombres recibieron disparos de armas R-15 y AK-47; unos once casquillos percutidos fueron localizados por los peritos en el sitio.
Sobre los cuerpos se encontró una cartulina con esta leyenda: "Estos son gente de La Familia, secuestradores, extorsionadores y aprendices de terroristas. Atentamente, Los Zetas".
En una segunda cartulina, se les señala como "chapetes de La Familia que se dedican a la extorsión", y se mencionan tres apodos: El Rey, El Búho y El Enano.
Unos minutos más tarde se reportó la aparición de otras tres personas acribilladas, cuyos cuerpos estaban tirados a un costado de la carretera de cuota México-Ciudad Juárez, a la altura del kilómetro 47 (tramo Salamanca-Celaya).
Estas personas tenían los ojos vendados y las manos atadas, así como disparos en la cabeza. También tenían cartulinas encima, con las mismas frases --supuestamente atribuidas al cártel del Golfo--, que los ejecutados en la carretera Salvatierra-Celaya.
En este caso se logró identificar a las tres víctimas como Pedro Núñez Olivares, Moisés Aarón González Belman y Juan Luis Rodríguez del Castillo, con domicilios en Salamanca y quienes habían sido reportados como secuestrados desde el jueves.
Y el domingo, en Cuerámaro, otro hombre que había regresado de dejar a su familia en la iglesia de una comunidad vecina fue interceptado por sicarios que le dispararon con armas largas.
La víctima fue identificada como Isaías Madrigal Sierra, originario de la comunidad El Platanal, en Cuerámaro.
Cuando regresaba a su casa, luego de dejar a su familia en la iglesia de Tupátaro, fue interceptado por un grupo que portaba armas largas, según los testimonios. Madrigal Sierra recibió al menos una decena de impactos, aunque en el lugar se encontraron más de 40 casquillos de diversos calibres, entre ellos de AK-47.
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