Índice Político / Francisco Rodríguez
El que perturba su casa no hereda más que el viento,
y el necio termina sirviendo al sabio
Proverbios, 11:29
MUCHO SE HABLA hoy del legado que George W. Bush ha dejado a su sucesor Barack Obama. Se le ha calificado con los peores adjetivos y, la verdad, muchos de ellos se han quedado cortos frente a los enormes retos que el nuevo inquilino de la Casa Blanca tiene frente a sí: dos guerras inconclusas, la economía en profunda recesión, la tasa de desempleo más alta en 16 años, un déficit fiscal de un billón de dólares y el mayor de los desprestigios en el plano mundial, entre otros.
Fueron ocho años de políticas erróneas. De privilegio a los más ricos del mundo y castigo a los trabajadores. De mentiras y engaños, pero sobre todo de inyección a la sociedad de miedos y temores para controlar y hasta apagar cualquier brote de inconformidad y disidencia.
Pero no nos vayamos tan lejos. Con poco más de dos años de (in)acción, no es difícil adivinar cuál será la herencia que el señor Felipe Calderón dejará aquí a quien en 2012 pudiera llegar a Palacio Nacional, si no es que antes se atraviesa un estallido al que nos conduzca el actual Estado Fallido.
Apenas ayer, en el artículo semanal que publica en Reforma, el coordinador de la fracción parlamentaria del PRD en la Cámara Baja, diputado Javier González Garza dibujaba un panorama bien conocido por las amas de casa de nuestro país y del cual han dado cuenta, en los últimos días, los capitostes del sector privado, tan apapachado por la disfuncional Administración Federal:
"Mientras las ventas de ropa, víveres y enseres mayores cayeron 22 por ciento en diciembre, con respecto a 2007, según datos de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, un estudio de la UNAM afirma que tan sólo durante la gestión de Felipe Calderón el salario ha perdido un 32 por ciento de su poder adquisitivo y se ha dado la mayor inflación de la década. La canasta básica se incrementó 67 por ciento, mientras el salario tan sólo creció 12 por ciento…
"El autonombrado ‘presidente del empleo’ resultó ser un gran ‘mata chambas’, según la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), que asegura que este año sólo se crearán 75 mil plazas formales, mientras que el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) señala que en el 2008 no se crearon empleos, por el contrario, se perdieron 37 mil 500. Lo mismo asegura el Seguro Social y el INEGI.
"Por su parte, El Colegio de México publicó que en el país existen 70 millones de pobres y de éstos 23 millones no reciben ninguna ayuda oficial…"
Las páginas de los diarios están llenas de este tipo de datos. El lector Emilio Treviño ha recopilado toda esta información y la ha enviado a este escribidor vía correo electrónico. El común denominador es la desesperanza. Aún entre aquellos que difícilmente pudieran etiquetarse como críticos del señor Calderón. Ninguno ve la salida. La mayoría, por no decir todos, observan que el plan anticrisis presentado hace un par de semanas por el ocupante de Los Pinos es "limitado", "insuficiente", "incompleto".
Y no. No es la crisis mundial de la que ahora se "cuelgan" los (dis)funcionarios públicos para excusar sus fallas. Desde el 2006 el país está prácticamente paralizado. No hay obra pública. No hay pagos a proveedores. Estados y municipios no reciben las participaciones federales. Pareciera que ninguno de quienes cobran altos estipendios en la nómina federal está haciendo su tarea.
No es casual, entonces, que el principal opositor, el señor Andrés Manuel López Obrador, ice hoy, a todo lo alto –con una reunión multitudinaria en el Zócalo de la capital nacional--, las banderas de un Movimiento Nacional en Defensa de la Economía Popular, como tampoco es gratuito que, a partir del próximo miércoles, el Congreso de la Unión, a iniciativa de los senadores del PRI coordinados por el sonorense Manlio Fabio Beltrones, celebren una serie de foros en los que se discuta y analice no sólo cómo enfrentar la crisis, sino cómo buscar el perdido camino al crecimiento económico.
Tan sólo en la economía, la herencia de Calderón es maldita. Peor aún si se considera que también dejará una "guerra" (jejeje) en contra del narcotráfico y, también, un enorme desprestigio en el plano internacional.
Índice Flamígero: Desde ayer, el precio del diesel asciende a 7 pesos con 53 centavos. El sábado anterior el litro de ese combustible había sido fijado en 7 pesos 48 centavos. La justificación de Hacienda: "sigue más barato que en Europa".
El que perturba su casa no hereda más que el viento,
y el necio termina sirviendo al sabio
Proverbios, 11:29
MUCHO SE HABLA hoy del legado que George W. Bush ha dejado a su sucesor Barack Obama. Se le ha calificado con los peores adjetivos y, la verdad, muchos de ellos se han quedado cortos frente a los enormes retos que el nuevo inquilino de la Casa Blanca tiene frente a sí: dos guerras inconclusas, la economía en profunda recesión, la tasa de desempleo más alta en 16 años, un déficit fiscal de un billón de dólares y el mayor de los desprestigios en el plano mundial, entre otros.
Fueron ocho años de políticas erróneas. De privilegio a los más ricos del mundo y castigo a los trabajadores. De mentiras y engaños, pero sobre todo de inyección a la sociedad de miedos y temores para controlar y hasta apagar cualquier brote de inconformidad y disidencia.
Pero no nos vayamos tan lejos. Con poco más de dos años de (in)acción, no es difícil adivinar cuál será la herencia que el señor Felipe Calderón dejará aquí a quien en 2012 pudiera llegar a Palacio Nacional, si no es que antes se atraviesa un estallido al que nos conduzca el actual Estado Fallido.
Apenas ayer, en el artículo semanal que publica en Reforma, el coordinador de la fracción parlamentaria del PRD en la Cámara Baja, diputado Javier González Garza dibujaba un panorama bien conocido por las amas de casa de nuestro país y del cual han dado cuenta, en los últimos días, los capitostes del sector privado, tan apapachado por la disfuncional Administración Federal:
"Mientras las ventas de ropa, víveres y enseres mayores cayeron 22 por ciento en diciembre, con respecto a 2007, según datos de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, un estudio de la UNAM afirma que tan sólo durante la gestión de Felipe Calderón el salario ha perdido un 32 por ciento de su poder adquisitivo y se ha dado la mayor inflación de la década. La canasta básica se incrementó 67 por ciento, mientras el salario tan sólo creció 12 por ciento…
"El autonombrado ‘presidente del empleo’ resultó ser un gran ‘mata chambas’, según la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), que asegura que este año sólo se crearán 75 mil plazas formales, mientras que el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) señala que en el 2008 no se crearon empleos, por el contrario, se perdieron 37 mil 500. Lo mismo asegura el Seguro Social y el INEGI.
"Por su parte, El Colegio de México publicó que en el país existen 70 millones de pobres y de éstos 23 millones no reciben ninguna ayuda oficial…"
Las páginas de los diarios están llenas de este tipo de datos. El lector Emilio Treviño ha recopilado toda esta información y la ha enviado a este escribidor vía correo electrónico. El común denominador es la desesperanza. Aún entre aquellos que difícilmente pudieran etiquetarse como críticos del señor Calderón. Ninguno ve la salida. La mayoría, por no decir todos, observan que el plan anticrisis presentado hace un par de semanas por el ocupante de Los Pinos es "limitado", "insuficiente", "incompleto".
Y no. No es la crisis mundial de la que ahora se "cuelgan" los (dis)funcionarios públicos para excusar sus fallas. Desde el 2006 el país está prácticamente paralizado. No hay obra pública. No hay pagos a proveedores. Estados y municipios no reciben las participaciones federales. Pareciera que ninguno de quienes cobran altos estipendios en la nómina federal está haciendo su tarea.
No es casual, entonces, que el principal opositor, el señor Andrés Manuel López Obrador, ice hoy, a todo lo alto –con una reunión multitudinaria en el Zócalo de la capital nacional--, las banderas de un Movimiento Nacional en Defensa de la Economía Popular, como tampoco es gratuito que, a partir del próximo miércoles, el Congreso de la Unión, a iniciativa de los senadores del PRI coordinados por el sonorense Manlio Fabio Beltrones, celebren una serie de foros en los que se discuta y analice no sólo cómo enfrentar la crisis, sino cómo buscar el perdido camino al crecimiento económico.
Tan sólo en la economía, la herencia de Calderón es maldita. Peor aún si se considera que también dejará una "guerra" (jejeje) en contra del narcotráfico y, también, un enorme desprestigio en el plano internacional.
Índice Flamígero: Desde ayer, el precio del diesel asciende a 7 pesos con 53 centavos. El sábado anterior el litro de ese combustible había sido fijado en 7 pesos 48 centavos. La justificación de Hacienda: "sigue más barato que en Europa".
Comentarios