Por Jesús Anaya Rosique
Al leer este libro vale preguntarse si la impunidad no es una condición patológica e intrínseca del ejercicio del poder. Afirma Jorge Zepeda Patterson: “la democracia, si como tal asumimos la competencia electoral que logró instalarse en México después de 70 años de régimen unipartidista, no ha disminuido la impunidad, más bien la ha fortalecido”. A partir del gobierno de Fox, las instancias diseñadas para implantar mecanismos de rendición de cuentas (Secodam, IFE, CNDH) han sido neutralizadas. Los poderes de facto han decretado: “nunca contra nosotros”. Lo normal hoy es que los delitos de los poderosos queden impunes. En cuanto a la corrupción, “el país experimenta una preocupante regresión… una vez en el poder, el PAN ha amparado la impunidad”. El recuento es espeluznante: el gobernador de Puebla ha sido exonerado por la Suprema Corte y el de Oaxaca sigue tan campante; Arturo Montiel fue encubierto por su delfín en el Estado de México; el líder minero vive en un exilio dorado y el petrolero Romero Deschamps fue exculpado por las negociaciones entre el PRI y Los Pinos; los Bribiesca están blindados por la complicidad panista…
Este libro documenta “historias ejemplares” de personajes que, “gracias a su poder, celebridad o riqueza viven, literalmente, al margen de la justicia”. De entre varias docenas, se eligieron cuatro casos de políticos multimillonarios y todopoderosos: Emilio Gamboa, “el Broker”, actual coordinador de los diputados priístas; Jorge Hank Rhon, vástago de un funesto clan político, ex alcalde de Tijuana y opulento propietario de casinos de juego; Diego Fernández de Cevallos, cacique panista y próspero abogado de demandas contra el erario público; Marta Sahagún y sus hijos, “los Beverly de Guanajuato”, reedición de una historia de enriquecimiento por tráfico de influencias. Los periodistas Jenaro Villamil, Marco Lara, Roberto Rock y Rita Varela dan cuenta del trasfondo de estas trayectorias.
“Ninguna descripción de la impunidad de la clase política estaría completa sin los gobernadores. La transición política y sus vacíos de poder los han convertido en verdaderos señores feudales”: del “Góber Bailador” de Coahuila al “Piadoso” de Jalisco, del “Precioso” de Puebla a los hermanos incómodos del sonorense Bours, del gobernador de Nuevo León al perredista de Guerrero… Fue tarea de Jorge Zepeda describir estos escándalos.
El cardenal Juan Sandoval Íñiguez es uno de los mayores intocables en México, como lo muestra la periodista Sanjuana Martínez. Y Lydia Cacho apunta certera sobre José Luis Soberanes, el “cancerbero que garantiza la impunidad de algunos intocables”.
La obra es la segunda parte de Los amos de México (Planeta, 2007), que se concentró en los dueños del dinero. Aquí se agrega ahora el “Doctor Simi”, retratado por Ricardo Raphael. Finalmente, Mauricio Carrera y Alejandro Páez desarrollan las trayectorias de la conductora de TV Azteca, Paty Chapoy, y del ex boxeador Julio César Chávez: se documentan así otras áreas en donde el poder mediático y la fama vuelven intocables a ciertos personajes…
Estas diez historias de impunidad, remata Zepeda, están animadas por “la convicción de que la única manera de combatir a la corrupción es desmontando sus intrincados y sutiles mecanismos… La revelación detallada de cómo viven y se reproducen los intocables es el primer paso para procesarlos”… El principio del fin de esta oprobiosa realidad es “asegurarse de que no sean ignoradas tantas infamias”.
anaya.jess@gmail.com
Jorge Zepeda Patterson (coord.), Los intocables, Planeta, México 2008, $219, 368 pp. ISBN 978-607-7-00025-9
Al leer este libro vale preguntarse si la impunidad no es una condición patológica e intrínseca del ejercicio del poder. Afirma Jorge Zepeda Patterson: “la democracia, si como tal asumimos la competencia electoral que logró instalarse en México después de 70 años de régimen unipartidista, no ha disminuido la impunidad, más bien la ha fortalecido”. A partir del gobierno de Fox, las instancias diseñadas para implantar mecanismos de rendición de cuentas (Secodam, IFE, CNDH) han sido neutralizadas. Los poderes de facto han decretado: “nunca contra nosotros”. Lo normal hoy es que los delitos de los poderosos queden impunes. En cuanto a la corrupción, “el país experimenta una preocupante regresión… una vez en el poder, el PAN ha amparado la impunidad”. El recuento es espeluznante: el gobernador de Puebla ha sido exonerado por la Suprema Corte y el de Oaxaca sigue tan campante; Arturo Montiel fue encubierto por su delfín en el Estado de México; el líder minero vive en un exilio dorado y el petrolero Romero Deschamps fue exculpado por las negociaciones entre el PRI y Los Pinos; los Bribiesca están blindados por la complicidad panista…
Este libro documenta “historias ejemplares” de personajes que, “gracias a su poder, celebridad o riqueza viven, literalmente, al margen de la justicia”. De entre varias docenas, se eligieron cuatro casos de políticos multimillonarios y todopoderosos: Emilio Gamboa, “el Broker”, actual coordinador de los diputados priístas; Jorge Hank Rhon, vástago de un funesto clan político, ex alcalde de Tijuana y opulento propietario de casinos de juego; Diego Fernández de Cevallos, cacique panista y próspero abogado de demandas contra el erario público; Marta Sahagún y sus hijos, “los Beverly de Guanajuato”, reedición de una historia de enriquecimiento por tráfico de influencias. Los periodistas Jenaro Villamil, Marco Lara, Roberto Rock y Rita Varela dan cuenta del trasfondo de estas trayectorias.
“Ninguna descripción de la impunidad de la clase política estaría completa sin los gobernadores. La transición política y sus vacíos de poder los han convertido en verdaderos señores feudales”: del “Góber Bailador” de Coahuila al “Piadoso” de Jalisco, del “Precioso” de Puebla a los hermanos incómodos del sonorense Bours, del gobernador de Nuevo León al perredista de Guerrero… Fue tarea de Jorge Zepeda describir estos escándalos.
El cardenal Juan Sandoval Íñiguez es uno de los mayores intocables en México, como lo muestra la periodista Sanjuana Martínez. Y Lydia Cacho apunta certera sobre José Luis Soberanes, el “cancerbero que garantiza la impunidad de algunos intocables”.
La obra es la segunda parte de Los amos de México (Planeta, 2007), que se concentró en los dueños del dinero. Aquí se agrega ahora el “Doctor Simi”, retratado por Ricardo Raphael. Finalmente, Mauricio Carrera y Alejandro Páez desarrollan las trayectorias de la conductora de TV Azteca, Paty Chapoy, y del ex boxeador Julio César Chávez: se documentan así otras áreas en donde el poder mediático y la fama vuelven intocables a ciertos personajes…
Estas diez historias de impunidad, remata Zepeda, están animadas por “la convicción de que la única manera de combatir a la corrupción es desmontando sus intrincados y sutiles mecanismos… La revelación detallada de cómo viven y se reproducen los intocables es el primer paso para procesarlos”… El principio del fin de esta oprobiosa realidad es “asegurarse de que no sean ignoradas tantas infamias”.
anaya.jess@gmail.com
Jorge Zepeda Patterson (coord.), Los intocables, Planeta, México 2008, $219, 368 pp. ISBN 978-607-7-00025-9
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