Reforma
Los Beltrán Leyva presuntamente contactaron a los Generales Roberto Dawe González y Rubén Pérez Ramírez, para ofrecerles sobornos a cambio de que les autorizaran "bajar" aviones con cocaína en los Aeropuertos Internacional de la la Ciudad de México (AICM) y el de Cancún.
El primero está arraigado y del segundo se desconoce su situación jurídica; sin embargo, de la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/112/2010, no se desprende que dichos militares aceptaran el dinero de los criminales, según informes a los que REFORMA tuvo acceso.
La investigación contra el General Tomás Ángeles Dauahare y los otros tres militares arraigados, inició el 17 de marzo de 2010 con una llamada anónima que recibió la SIEDO a las 8:30 de la mañana a su teléfono 53 46 38 52.
La investigación desde entonces se centró en seis militares, que son los Generales Ángeles, Dawe, Pérez y Ricardo Escorcia Vargas, así como el Teniente Coronel Silvio Hernández Soto y el Mayor Iván Reyna Muñoz, ya detenido y preso en el Penal Estatal de Querétaro.
"¿Hablo a SIEDO? Deseo denunciar pero no puedo decir mi nombre, ya que es un riesgo para mi persona y mi familia, espero que si quieren trabajar hagan caso de esta denuncia, tengo conocimiento de que hay militares con grados de Generales y Mayores que colaboran con la organización de los Beltrán Leyva, apoyándolos a bajar aviones y cargamentos de droga en los aeropuertos de la Ciudad de México y Cancún.
"Esto es una actividad común para los militares de nombres Tomás Ángeles Dauahare, Rubén Pérez Ramírez, Roberto Dawe González, Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto e Iván Reyna Muñoz; ustedes deben saber que tanto las policías municipales, estatales, federales y militares apoyan a la delincuencia organizada en la Ciudad de México como en Quintana Roo, lo pueden checar en sus bases de datos ya que hay muchos antecedentes de lo que les digo", dice la denuncia.
El martes pasado el testigo protegido "Jennifer" cruzó la frontera de San Diego a Tijuana, para ratificar y ampliar en la Zona Militar de Baja California los testimonios que rindió el 23 de julio de 2011 y el 2 de marzo de 2010, en los cuales incrimina a militares por narcotráfico.
De sus testimonios, se desprende que en marzo de 2007 "Jennifer" consiguió que un intermediario -cuya identidad omite identificar la SIEDO en los expedientes- le presentara a Dawe en el restaurante del Lago de Chapultepec. En ese entonces el General estaba adscrito al Cuerpo de Guardias Presidenciales.
El testigo colaborador declaró que había buscado a Dawe por órdenes de Édgar Valdez Villarreal "La Barbie", para que le ayudara a conseguir la protección militar en el AICM y la terminal aérea de Cancún. "Jennifer" llegó acompañado de otro sujeto y se presentó como emisario de los Beltrán.
Dawe, según el acusador, les dijo que él no tenía nada que ver con esos aeropuertos y que eso lo vieran los militares de Cancún. Entonces, supuestamente Dawe llamó al General Rubén Pérez para que recibiera a "Jennifer" y su acompañante. Al final de la conversación, el emisario de los Beltrán le quiso regalar un fajo de dinero.
"(Le dije) que 'La Barbie' le mandaba un recado por la ayuda en un futuro, que le mandaba 30 mil dólares", dijo "Jennifer".
Sin embargo, el General les habría revirado sarcástico: "cámbiamelo por pesos".
El problema del ex comandante de la 20 Zona Militar en Colima es que por ese entonces hizo una llamada telefónica al General Rubén Pérez Ramírez, quien fue jefe de la Guarnición de Cancún del 16 de diciembre de 2006 a 18 de agosto de 2007.
Lo llamó para pedirle que le ayudara a conseguir algunos descuentos de hotel para sus hijos, pues querían pasar sus vacaciones en la Riviera Maya.
Los hijos de Dawe nunca hicieron el viaje; sin embargo, Pérez Ramírez fue interrogado por la SIEDO y declaró que dos narcotraficantes fueron a verlo de parte del General Dawe, para ofrecerle sobornos por su protección en el aeropuerto.
"Les abrí la puerta y les dije que se retiraran, pensando en informar a mi comandante de Zona o bien quedarme con la información, optando por no darle parte, en primera por no saber a ciencia cierta si eran parientes del General Dawe y perjudicar a sus parientes y al propio General; asimismo, que pudiera tratarse de un gancho, a lo que se denomina dentro de mi ámbito laboral como un 'personal simulado' que he escuchado que emplea la Sedena para detectar corrupción de los integrantes de las Fuerzas Armadas. De igual forma, nunca reclamé al General Dawe respecto de las personas que mandó, ya que las líneas telefónicas están intervenidas", declara Pérez Ramírez.
El General Rubén Pérez después fue Comandante de la 22 Zona Militar, cargo con el que todavía el año pasado compartió el pódium con Enrique Peña Nieto, entonces gobernador del Estado de México.
Dawe fue retenido el 15 de mayo pasado y arraigado; Pérez declaró ante la SIEDO, pero se desconoce su calidad jurídica. Ninguno de los dos parece haber recibido dinero del narcotráfico.
Los Beltrán Leyva presuntamente contactaron a los Generales Roberto Dawe González y Rubén Pérez Ramírez, para ofrecerles sobornos a cambio de que les autorizaran "bajar" aviones con cocaína en los Aeropuertos Internacional de la la Ciudad de México (AICM) y el de Cancún.
El primero está arraigado y del segundo se desconoce su situación jurídica; sin embargo, de la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/112/2010, no se desprende que dichos militares aceptaran el dinero de los criminales, según informes a los que REFORMA tuvo acceso.
La investigación contra el General Tomás Ángeles Dauahare y los otros tres militares arraigados, inició el 17 de marzo de 2010 con una llamada anónima que recibió la SIEDO a las 8:30 de la mañana a su teléfono 53 46 38 52.
La investigación desde entonces se centró en seis militares, que son los Generales Ángeles, Dawe, Pérez y Ricardo Escorcia Vargas, así como el Teniente Coronel Silvio Hernández Soto y el Mayor Iván Reyna Muñoz, ya detenido y preso en el Penal Estatal de Querétaro.
"¿Hablo a SIEDO? Deseo denunciar pero no puedo decir mi nombre, ya que es un riesgo para mi persona y mi familia, espero que si quieren trabajar hagan caso de esta denuncia, tengo conocimiento de que hay militares con grados de Generales y Mayores que colaboran con la organización de los Beltrán Leyva, apoyándolos a bajar aviones y cargamentos de droga en los aeropuertos de la Ciudad de México y Cancún.
"Esto es una actividad común para los militares de nombres Tomás Ángeles Dauahare, Rubén Pérez Ramírez, Roberto Dawe González, Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto e Iván Reyna Muñoz; ustedes deben saber que tanto las policías municipales, estatales, federales y militares apoyan a la delincuencia organizada en la Ciudad de México como en Quintana Roo, lo pueden checar en sus bases de datos ya que hay muchos antecedentes de lo que les digo", dice la denuncia.
El martes pasado el testigo protegido "Jennifer" cruzó la frontera de San Diego a Tijuana, para ratificar y ampliar en la Zona Militar de Baja California los testimonios que rindió el 23 de julio de 2011 y el 2 de marzo de 2010, en los cuales incrimina a militares por narcotráfico.
De sus testimonios, se desprende que en marzo de 2007 "Jennifer" consiguió que un intermediario -cuya identidad omite identificar la SIEDO en los expedientes- le presentara a Dawe en el restaurante del Lago de Chapultepec. En ese entonces el General estaba adscrito al Cuerpo de Guardias Presidenciales.
El testigo colaborador declaró que había buscado a Dawe por órdenes de Édgar Valdez Villarreal "La Barbie", para que le ayudara a conseguir la protección militar en el AICM y la terminal aérea de Cancún. "Jennifer" llegó acompañado de otro sujeto y se presentó como emisario de los Beltrán.
Dawe, según el acusador, les dijo que él no tenía nada que ver con esos aeropuertos y que eso lo vieran los militares de Cancún. Entonces, supuestamente Dawe llamó al General Rubén Pérez para que recibiera a "Jennifer" y su acompañante. Al final de la conversación, el emisario de los Beltrán le quiso regalar un fajo de dinero.
"(Le dije) que 'La Barbie' le mandaba un recado por la ayuda en un futuro, que le mandaba 30 mil dólares", dijo "Jennifer".
Sin embargo, el General les habría revirado sarcástico: "cámbiamelo por pesos".
El problema del ex comandante de la 20 Zona Militar en Colima es que por ese entonces hizo una llamada telefónica al General Rubén Pérez Ramírez, quien fue jefe de la Guarnición de Cancún del 16 de diciembre de 2006 a 18 de agosto de 2007.
Lo llamó para pedirle que le ayudara a conseguir algunos descuentos de hotel para sus hijos, pues querían pasar sus vacaciones en la Riviera Maya.
Los hijos de Dawe nunca hicieron el viaje; sin embargo, Pérez Ramírez fue interrogado por la SIEDO y declaró que dos narcotraficantes fueron a verlo de parte del General Dawe, para ofrecerle sobornos por su protección en el aeropuerto.
"Les abrí la puerta y les dije que se retiraran, pensando en informar a mi comandante de Zona o bien quedarme con la información, optando por no darle parte, en primera por no saber a ciencia cierta si eran parientes del General Dawe y perjudicar a sus parientes y al propio General; asimismo, que pudiera tratarse de un gancho, a lo que se denomina dentro de mi ámbito laboral como un 'personal simulado' que he escuchado que emplea la Sedena para detectar corrupción de los integrantes de las Fuerzas Armadas. De igual forma, nunca reclamé al General Dawe respecto de las personas que mandó, ya que las líneas telefónicas están intervenidas", declara Pérez Ramírez.
El General Rubén Pérez después fue Comandante de la 22 Zona Militar, cargo con el que todavía el año pasado compartió el pódium con Enrique Peña Nieto, entonces gobernador del Estado de México.
Dawe fue retenido el 15 de mayo pasado y arraigado; Pérez declaró ante la SIEDO, pero se desconoce su calidad jurídica. Ninguno de los dos parece haber recibido dinero del narcotráfico.
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